Oficina de Prensa de la CIDH
Washington D.C.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presenta el informe de balance de las actividades y los resultados alcanzados por el Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI) en cuatro años de funcionamiento.
Desde el inicio de las protestas del 18 de abril de 2018, la CIDH desplegó todas sus herramientas convencionales para responder, de manera pronta y oportuna, a las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas en el marco de la represión estatal. El 17 de mayo la CIDH llegaba al país para una visita de trabajo que duró cinco días, la cual permitió observar la situación en terreno y emitir sus primeras recomendaciones.
Posteriormente, el 24 de junio del mismo año, se instala el MESENI que trabajó en la ciudad de Managua, luego de la invitación del Estado y en cumplimiento de las recomendaciones derivadas de las observaciones preliminares y del Informe Final de la visita. El 19 de diciembre de 2018, el Estado de Nicaragua informó la decisión de suspender la presencia del MESENI en el país y de las visitas de la CIDH a Nicaragua. A partir de esta fecha, el Mecanismo ha continuado monitoreando la situación en Nicaragua desde la sede de la CIDH en Washington D.C. y mediante la realización de visitas de trabajo a otros países.
A lo largo de estos cuatro años, el MESENI ha realizado visitas de trabajo a diferentes países de la región, con la finalidad de monitorear el desarrollo de la crisis, a través de la realización de reuniones periódicas con organizaciones de la sociedad civil, víctimas de violaciones de derechos humanos y familiares. Ello ha permitido documentar las graves violaciones; denunciar ante la comunidad internacional; acompañar a las personas nicaragüenses que sufren afectaciones a sus derechos y se han visto forzadas a huir de su país; así como, coadyuvar en el fortalecimiento de capacidades de la sociedad civil; y aportar en la construcción de la memoria para eventuales procesos de justicia transicional.
En cuatro años de trabajo, el MESENI elaboró 177 comunicados de prensa sobre el desenvolvimiento y agudización de la crisis de derechos humanos; 4 informes que se encuentran en el Capítulo IV.B del informe anual, desde el 2018 al 2021; 31 boletines mensuales; un sitio multimedia que contiene el registro actualizado sobre las víctimas fatales en el contexto de la crisis. Además, recibió 1986 testimonios, los cuales permiten reflejar las voces de las propias víctimas en los diferentes informes temáticos y de país publicados.
Hasta la fecha, la CIDH otorgó 129 medidas cautelares para proteger la vida e integridad de más de 280 personas de manera directa, solicitó 3 medidas provisionales y 8 ampliaciones a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH). En relación con el sistema de peticiones y casos, se destaca el registro de más de 399 peticiones sobre posibles violaciones de derechos humanos en el marco de las protestas sociales. De este total, la CIDH decidió la apertura a trámite de 58 peticiones. Asimismo, desde 2018, se publicaron 10 informes de admisibilidad y elevó 4 casos contra Nicaragua ante la Corte IDH.
En el marco del funcionamiento del MESENI, la CIDH también ha promovido el conocimiento de los estándares de derechos humanos en materia de memoria, verdad y justicia, y la utilización de los mecanismos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, mediante la realización de 40 talleres dirigidos a más de 900 personas. El impacto de este trabajo ha incidido en la formación de nuevas organizaciones y colectivos que defienden derechos humanos, así como en el incremento en el uso del Sistema Interamericano, a través de solicitudes de medidas cautelares o el inicio de casos.
A cuatro años de la creación del MESENI, la CIDH reitera su solidaridad con las víctimas de la crisis política, social y de derechos humanos iniciada en abril de 2018. Mientras que, observa la persistencia de un contexto de impunidad generalizada respecto de las graves violaciones a derechos humanos cometidas en el marco de la represión estatal a las protestas sociales, las cuales resultaron en la muerte de al menos 355 personas; más de 2mil personas heridas; más de 1.614 detenidas; cientos de despidos arbitrarios de profesionales de la salud; más de 150 expulsiones injustificadas de estudiantes universitarios y; más de 150 mil personas se habrían visto forzadas a huir del país y a buscar protección internacional en Costa Rica, según datos de ACNUR. Asimismo, el gobierno canceló más de 1.400 personerías jurídicas de organizaciones de la sociedad civil.
En este contexto, la CIDH refrenda su compromiso de seguir trabajando en la articulación de esfuerzos con la comunidad internacional, a través del MESENI, hasta lograr la liberación de las 180 personas que permanecen privadas de libertad en condiciones contrarias a la dignidad humana, el restablecimiento de todas las garantías y libertades propias de un Estado democrático de derecho mediante la separación de poderes.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.
No. 189/22
10:13 AM