Comunicado de Prensa


COLOMBIA Y NICARAGUA TRATAN DIFERENCIAS EN LA OEA

  24 de julio de 2008

El gobierno de Colombia denunció hoy ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) lo que caracterizó de “declaraciones inaceptables” del Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, sobre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

En su intervención ante una sesión ordinaria del Consejo Permanente, el Representante de Colombia ante la OEA, Embajador Camilo Ospina, explicó que su gobierno se vio obligado a entregar a Nicaragua y al Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, una nota en que manifiesta su “más enérgica protesta” al gobierno de la República de Nicaragua y, en particular, al Presidente Ortega, por sus declaraciones del 16 de julio de 2008 en las que el mandatario nicaragüense afirma que “nosotros tenemos la disposición a contribuir a este proceso de paz y le responderemos a los hermanos de las FARC que sí, que estamos dispuestos a conversar y dialogar para aportar a la paz en Colombia”.

Ospina subrayó que “el gobierno de Colombia no quiere ninguna clase de confrontación con ningún país” y reiteró a los miembros del Consejo Permanente que “el único objetivo de los colombianos es terminar con el terrorismo de una vez por todas, y para ello es necesario que los terroristas no cuenten con ninguna clase de apoyo internacional”. En este sentido, Ospina dijo que “rechazamos la injerencia del señor Ortega en los asuntos internos de Colombia. El Gobierno colombiano no ha autorizado ni autorizará gestión alguna con la organización terrorista de las FARC”.

Por su parte, el Representante Permanente de Nicaragua, Denis Ronaldo Moncada Colindres, sin hacer alusión a los planteamientos del diplomático colombiano, pidió la palabra para denunciar al Consejo Permanente “el insistente desprecio y violación al derecho internacional por parte del gobierno de Colombia al negarse a cumplir la resolución de la Corte Internacional de Justicia [respecto a la disputa territorial sobre el archipiélago de San Andrés] y recurrir a la amenaza del uso de la fuerza con el despliegue naval de sus fragatas creando mayor inseguridad en el Mar Caribe y atentando contra la paz y seguridad del Estado nicaragüense y de la región”.

Según el diplomático nicaragüense, “el gobierno de Colombia ha violado la Carta de la OEA, entre cuyos propósitos esenciales está el de afianzar la paz y la seguridad del continente; y uno de sus principios establece que el derecho internacional es norma de conducta de los Estados en las relaciones reciprocas”. Expresó que “el gobierno de la República de Nicaragua es respetuoso de la soberanía de los Estados; de la no agresión de un Estado en contra de otro Estado; y es partidario del diálogo y la negociación. Por ello ha persistido en acudir al Tribunal Internacional de Justicia de la Haya para prevenir las posibles causas de dificultades y asegurar la solución pacífica de controversias que surjan entre los Estados, de acuerdo con la Carta de la OEA y la Carta de la ONU”.

Por su parte, al concluir la sesión, el Secretario General Insulza dijo a la prensa que no le corresponde a la OEA pedir sanciones en contra del Gobierno de Nicaragua si no lo ha solicitado un país miembro, en este caso Colombia, y recordó que el Embajador Ospina dijo ante el Consejo Permanente que su Gobierno no busca
castigar al pueblo de Nicaragua. Si se quieren pedir medidas, que se pidan, manifestó Insulza refiriéndose a una eventual solicitud por parte de Colombia a la OEA, pero recalcó que ese país no ha formulado un planteamiento en ese sentido.

Referencia: C-287/08