Comunicado de Prensa


Mensaje del Secretario General de la OEA en el Día Internacional de la Mujer

  9 de marzo de 2015

La exclusión de las mujeres es una cuestión multidimensional que contribuye a precarizar su inserción y actuación en los ámbitos económicos, sociales y políticos, afectando su posibilidad de influir en los sistemas y procesos políticos. Su marginación de las instancias del Estado con poder de decisión, de la representación política y de los recursos públicos pone límites a la democracia y al ejercicio de su ciudadanía de pleno derecho. Se han logrado avances, pero aún es necesario trabajar mucho más.

Es por eso que en este Día Internacional de la Mujer, exhorto a los Estados Miembros a seguir consolidando estos avances a nivel de compromiso político y de marco jurídico con los recursos, los programas y el seguimiento necesarios para asegurar que impactan en la vida de las mujeres de una manera irrevocable.

El marco jurídico y político en torno a los derechos de las mujeres en las Américas es el más sólido del mundo después de Europa Occidental. la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belém do Pará), entre otros mecanismos, garantizan que en el plano jurídico las mujeres gocen de una amplia gama de derechos en igualdad de condiciones con los hombres.

En los últimos diez años, estos avances a nivel de la región han tenido eco en la Organización de los Estados Americanos (OEA), que mediante la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) ha fortalecido sus bases conceptuales y metodológicas y enriquecido su debate político para hacer de la Organización un referente hemisférico sobre los derechos de las mujeres y la igualdad de género.

Con la adopción, en el año 2000, del Programa Interamericano sobre la Promoción de los Derechos Humanos de la Mujer y la Equidad e Igualdad de Género (PIA), todos los Estados Miembros de la OEA asumieron un fuerte compromiso de formular políticas públicas, estrategias y propuestas dirigidas a promover los derechos humanos de la mujer y la igualdad de género en todas las esferas de la vida pública y privada, considerando su diversidad y ciclos de vida.

El último informe del PIA señala que los órganos internos de la OEA están trabajando en la integración de la adopción del enfoque de género como componente esencial en su funcionamiento.

El objetivo de esta política es capacitar a los funcionarios de la Organización, con una guía y un curso virtual, sobre la integración del enfoque de género y derechos; integrar una perspectiva de género en la preparación y aplicación de instrumentos, mecanismos y procedimientos internacionales, en particular las agendas de reuniones de nivel ministerial; evaluar relevancia de los proyectos en ejecución teniendo en cuenta su grado de atención a problemáticas de carácter transversal, incluyendo género; y fortalecer el monitoreo y la evaluación de los esfuerzos de integración de género en la OEA, así como la rendición de cuentas con base en los compromisos adoptados.

En ese contexto, es dable destacar el Sistema Integrado de Indicadores de Derechos Humanos de las Mujeres (SISDEHM) que ha establecido la CIM para apoyar los Estados Miembros en la armonización de sus legislaciones y políticas públicas económicas y sociales con los acuerdos internacionales vinculantes sobre los derechos de las mujeres y la igualdad de género. Ese Sistema de Indicadores, pionero en la región, integra siete derechos: económicos, la educación, el trabajo y la seguridad social, la salud, los derechos sexuales y reproductivos y los derechos políticos. De igual manera, en el Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará (MESECVI), se han adoptado una serie de indicadores para medir el ejercicio del derecho de las mujeres a vivir libres de violencia.

Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-069/15