Oficina de Prensa de la CIDH
Washington, D.C. - En el día internacional de las personas mayores la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) resalta la importancia de reconocer a las personas como sujetos de derecho y la obligación de garantizar una vejez digna, autónoma y con seguridad social. La CIDH alienta a todos los Estados de la OEA a adherirse a la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores.
En los últimos años, los esfuerzos por poner de relieve la importancia de respetar y garantizar los derechos de las personas mayores en las Américas y el Caribe se ha vuelto una cuestión de orden público internacional. La CIDH en 2017 creó la Unidad para los Derechos Humanos de las Personas Mayores y, con la intención de profundizar su institucionalidad, desde el 2019 la Unidad se convirtió en Relatoría Temática.
Los esfuerzos de la OEA también han sido patentes, al punto que en 2015 adoptó la Convención sobre personas mayores, la misma que entró en vigor en 2017 y de la que son parte Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, México, Perú, Surinam y Uruguay. La Comisión hace un llamado para la ratificación universal de la Convención.
Esta Convención es el instrumento más transformador respecto de la situación de los derechos de las personas mayores en la historia de la región. Su contribución más importante es el cambio de paradigma que establece que las personas mayores son sujetos de derecho con necesidades particulares y que estas son obligaciones internacionales de derechos humanos. El concepto clave, transversal en la Convención, ha sido el abordar la vejez como una etapa natural de la vida y el proceso de envejecimiento como consustancial a la persona humana, rompiendo el estigma y apuntando a garantizar la dignidad.
En su labor por la defensa y promoción de los derechos de las personas mayores, la CIDH adoptó el presente año su primer informe temático "Derechos humanos de las personas mayores y sistemas nacionales de protección" en el que se analiza la obligación internacional de los Estados de garantizar que estos sistemas atiendan las necesidades de las personas mayores, así como la vigencia de los derechos a la igualdad y no discriminación, independencia, autonomía, salud y consentimiento informado, participación e integración comunitaria, accesibilidad y movilidad personal, libertad de expresión, acceso a la información, alimentación, vivienda, agua y saneamiento, seguridad social, integridad y vivir vida libres de violencia y acceso a la justicia.
La erradicación de la discriminación por edad ("edadismo") y la generación de información que permita adoptar decisiones de política pública para la protección adecuada de los derechos de las personas mayores con base en evidencia es aún un reto pendiente en la región.
El nuevo enfoque en la protección integral de las personas mayores y el aumento demográfico de este grupo coloca una mayor presión en las demandas sobre los sistemas de seguridad social y salud. Esto conlleva desafíos para los Estados y las organizaciones de la sociedad civil en la articulación institucional de los sistemas de protección para las personas mayores, así como de financiamiento de políticas y programas suficientes con la finalidad de garantizar el disfrute efectivo de sus derechos.
En el día internacional de las personas mayores la CIDH llama a los Estados a establecer políticas públicas efectivas para atender estos retos y garantizar una vejez digna.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.
No. 233/23
9:00 AM