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Comunicado de Prensa

La OEA conmemoró el Día Internacional de los Derechos Humanos

La Organización de los Estados Americanos (OEA) celebró hoy el Día Internacional de los Derechos Humanos con una mesa redonda sobre la materia en la que intervinieron el Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza; María Otero, Subsecretaria de Estado de Estados Unidos para la Democracia y Asuntos Globales; Santiago Canton, Secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); y Juan Méndez, Relator Especial de la ONU sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes.

El máximo representante de la OEA constató que “éste es uno de los temas principales de nuestra Organización”, y resaltó que las instituciones del Sistema Interamericano de Derechos Humanos han atendido en su trabajo “cada vez más las necesidades, los problemas y los dramas de nuestra región”.

“En nuestra Organización hemos avanzado muchísimo en esto y nuestro sistema es señero en el mundo. Una CIDH autónoma como la que tenemos es algo que debemos siempre defender. A pesar de los problemas y dificultades que a veces se pueden crear, creo que todos los países de América están de acuerdo en este tema fundamental”, sentenció.

La OEA se unió así a la conmemoración de la ratificación el 10 de diciembre de 1948 de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).

El Secretario General Insulza aseguró estar “muy contento por poder celebrar este día en una Organización que ha hecho su parte en la promoción de los Derechos Humanos”, y mencionó la aprobación en abril de 1948 de la Declaración americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la creación de la Comisión y la Comisión Interamericanas de Derechos Humanos (CIDH y CorteIDH) y del Instituto Interamericano de los Derechos Humanos.

La Subsecretaria estadounidense Otero, destacó que en las últimas décadas se realizaron progresos fundamentales en la materia, a pesar de lo cual “desde el Lejano Oriente hasta el Hemisferio Occidental, nos enfrentamos a desafíos en marcha que merecen nuestra atención”. Entre los principales que afectan a Latinoamérica y el Caribe destacó la protección y el empoderamiento de grupos vulnerables, para lo que pidió trabajar en la lucha contra la violencia y la discriminación por motivos de sexo, raza, etnia, minusvalía, orientación o identidad sexual; la preservación de la libertad de expresión; y el fortalecimiento de las democracias a través del papel de la sociedad civil.

“Cómo nos enfrentemos a estos asuntos en los años venideros, tanto doméstica como internacionalmente, escribirá la historia de nuestro éxito en Derechos Humanos durante generaciones”, afirmó Otero. “Los desafíos son enormes, pero hemos visto la recompensa del progreso. A pesar de la crisis, nuestra región presume de indicios de desarrollo económico e instituciones democráticas estables y que rinden cuentas. El Hemisferio Occidental tiene la capacidad de liderar al mundo en Derechos Humanos”, sentenció.

El Secretario Ejecutivo de la CIDH, Santiago Canton, hizo en su discurso un balance de los avances y desafíos en materia de Derechos Humanos en la región, y destacó especialmente el papel que desempeña la sociedad civil, sin la cual “el Sistema Interamericano sería una cáscara vacía”. Entre las mejoras conseguidas, destacó la anulación de los efectos de leyes de amnistía en algunos países, lo cual ha permitido juzgar a responsables de graves violaciones a los Derechos Humanos. También mencionó como avances el progresivo reconocimiento del derecho colectivo de los pueblos indígenas a sus tierras y la derogación de leyes de desacato en una decena de países de las Américas. Igualmente contabilizó como un logro la anulación, en algunos países, de leyes de desacato que limitaban la libertad de expresión.

Entre los desafíos pendientes, Canton resaltó que “hay una deuda pendiente en relación al cumplimiento de las decisiones de la Comisión y de la Corte por parte de los Estados. Se ha avanzado, pero los niveles de cumplimiento todavía deben mejorar mucho, especialmente en materia de justicia”. Además, hizo hincapié en la necesidad de profundizar en el combate contra todo tipo de discriminación y urgió a los países a ratificar los tratados interamericanos para lograr su universalización, a mejorar los niveles de cumplimiento con las decisiones de la CIDH y de la Corte, y a aumentar los recursos financieros que destinan al sistema interamericano para que sus órganos puedan cumplir con sus mandatos.

El Relator Especial de la ONU sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes destacó que el año 1948 “fue el inicio de un proceso que por supuesto no ha culminado pero que ha tenido un desarrollo muy importante”, que explicó en tres etapas: primero creación de estándares de cumplimiento para los Estados a través de tratados y convenios multilaterales; la creación de mecanismos para que las víctimas reclamen ante la comunidad internacional; y la actual, donde el objetivo es “hacer eficaces los Derechos Humanos nacional e internacionalmente”.

Méndez aseguró tener “grandes esperanzas” para la actual época, porque “la sociedad civil de nuestros países y las instituciones de la OEA son grandes pilares del respeto de estos derechos, y ofrecen garantías de que vamos a seguir progresando en el camino para la vigencia de la democracia y los Derechos Humanos en nuestro continente”.

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Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-489/10