Comunicado de Prensa


Declaración del Secretario General de la OEA en el decimoquinto aniversario de la Convención de Belém do Pará

  5 de marzo de 2010

El 25 de febrero en la sede de la OEA se lanzó el Año Interamericano de las Mujeres bajo el lema de "Mujeres y poder: Por un mundo con igualdad". 2010 servirá como momento de reflexión, de celebración y de renovación de compromisos para avanzar en el logro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres del Hemisferio. También constituye una oportunidad para analizar las realidades que todavía obstaculizan la igualdad de género, entre ellas la severidad y la continuidad de la violencia contra las mujeres.

Uno de los momentos más importantes de este Año Interamericano de las Mujeres es hoy, 5 de marzo, cuando se cumple el decimoquinto aniversario de la entrada en vigor de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Eliminar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belém do Pará). Este acuerdo histórico – el primero y el único en el mundo que aborda la violencia contra las mujeres – ha dado pauta para la adopción de leyes y políticas sobre la violencia contra las mujeres en todos los Estados Miembros de la OEA, así como un marco político y estratégico para su implementación. La Convención ha inspirado campañas de acción y de información, normas legales y procedimientos, modelos de atención, procesos de sensibilización y capacitación con personal legal, de salud y de seguridad, iniciativas de monitoreo, evaluación y seguimiento, y servicios de asesoría y de atención para mujeres víctimas. En cada país del Hemisferio existen ejemplos de estas acciones.

No obstante estos avances significativos, la violencia sigue siendo una realidad diaria para las mujeres en nuestra región: en las calles, en las escuelas, en el trabajo y, peor aún pero con mayor frecuencia, en sus propios hogares. La violencia se utiliza de manera rutinaria para callar, oprimir, sujetar y matar a las mujeres, por sus parejas íntimas, por sus supervisores, por las pandillas, por partidos políticos, y por las fuerzas del Estado. Afecta el desarrollo y la realización de los derechos de las mujeres – y su salud, su potencial económico, su participación en la política y su contribución a la sociedad en general. La violencia contra las mujeres es hoy uno de los obstáculos más grandes para el desarrollo humano sostenible.

La OEA empieza el Año Interamericano de las Mujeres con el decimoquinto aniversario de la Convención de Belém do Pará. Comprometámonos a doblar nuestros esfuerzos para asegurar que la visión de esta Convención pionera sea una realidad para las mujeres en nuestra región. La verdadera democracia, la verdadera prosperidad, la verdadera seguridad y el verdadero desarrollo sólo pueden lograrse cuando se respeten todos los derechos humanos, entre ellos el derecho a una vida libre de violencia.

Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-067/10