FIRMA DE DECLARACIÓN SG/OEA Y PMA SOBRE LA AGENDA 2030 Y EL LOGRO DE LOS ODS

23 de agosto de 2017 - Washington, DC

• Si bien América Latina y el Caribe han experimentado avances significativos en la erradicación del hambre y la desnutrición en las últimas décadas, en la región aún existen 47 millones de personas que padecen hambre (Datos al 2015). ¹
• Además, el 11,5% de la población no cuenta con ingresos suficientes para cubrir sus requerimientos nutricionales mínimos, y el 8% sufre subnutrición. Los menores de 5 años que viven en las comunidades más pobres tienen el doble de probabilidades de sufrir desnutrición crónica que los que viven en las comunidades más ricas. La desnutrición crónica está afectando a cerca del 13,3% de los niños menores de cinco años.²
• Entre los países de la región más afectados se encuentran Haití, Paraguay, Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Guatemala, por nombrar algunos. Este último tiene uno de los índices más altos de desnutrición de América Latina y el Caribe, y de acuerdo a UNICEF, cerca de un millón de niños está siendo afectado por esta grave problemática.
• La desnutrición infantil afecta al desarrollo integral del ser humano, su salud y su bienestar, privándolo de acceder a una educación adecuada y a oportunidades productivas.
• En la región también hay zonas principalmente rurales dentro de los países donde la desnutrición persiste como un flagelo, esto sobre todo, por el hecho que todos los años, los países se ven afectados por la variabilidad climática, los desastres naturales a los que se suman epidemias, enfermedades y crisis socioeconómicas.
• De acuerdo a la FAO, el hambre en nuestra región no es principalmente un problema de disponibilidad o de producción de alimentos, sino sobre todo de acceso a éstos, de ingresos insuficientes para cubrir los gastos de una alimentación adecuada, razón por la cual la seguridad alimentaria está estrechamente ligada a la superación de la pobreza y la desigualdad, característica que distingue a nuestra región. ³
• En otras palabras, el hambre y la desnutrición son problemas de primer orden que deben ser atendidos para romper el círculo vicioso de la pobreza porque afectan de forma directa la salud, educación, el bienestar y la economía de nuestros ciudadanos de las Américas.
• Para la OEA, erradicar la pobreza, el hambre, y la desnutrición en todas sus formas implica avanzar en la garantía de derechos impulsando nuestro lema de alcanzar “Mas Derechos para Más Gente”.
• En efecto, a nivel interamericano, la OEA cuenta con instrumentos jurídicos tales como el Protocolo de San Salvador y la Carta Social de las Américas y su Plan de Acción que consagran derechos económicos, sociales y culturales, como el derecho a una alimentación adecuada, y plantean una hoja de ruta para que los países implementen acciones para erradicar el hambre en la región.
• Estos instrumentos requieren de la adopción de políticas sociales de parte de los Estados que hagan realidad dichas obligaciones a nuestros ciudadanos y ciudadanas de la región.
• La Secretaría General de la OEA y el PROGRAMA MUNDIAL DE ALIMENTOS sabemos que para poder avanzar, necesitamos trabajar todos juntos, estableciendo una coordinación efectiva para cumplir con las metas de desarrollo. Por eso hemos decidido unir esfuerzos y experiencias para acompañar a los Estados Miembros de la OEA en la implementación de la Agenda 2030 y hacer realidad el ejercicio del derecho a una nutrición y alimentación adecuada en nuestro hemisferio en beneficio de los más vulnerables.
• Nuestra colaboración se enfocará particularmente en plantear soluciones integradas que den respuesta a las problemáticas de la erradicación del hambre, el logro de la seguridad alimentaria y nutricional de los grupos más vulnerables; así como a la gestión de riesgos y desastres y la contención de situaciones de emergencia alimentaria.
• Me gustaría además mencionar que esta alianza también vendrá a robustecer los trabajos de fortalecimiento institucional que la Secretaría General de la OEA a través de su Secretaría de Acceso a Derechos y Equidad, y su Departamento de Inclusión Social, está realizando en Guatemala para contribuir a la meta al 2019 de reducir en un 10% la tasa de desnutrición infantil en ese país.
• Desde la OEA estamos conscientes que el desarrollo económico y social de la región está atado al progreso en la garantía de derechos, a la igualdad de oportunidades y al bienestar compartido de nuestros pueblos, eso es lo que está en juego y vamos a trabajar junto a socios como el PROGRAMA MUNDIAL DE ALIMENTOS para continuar en esa lucha.
• Muchas gracias.

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