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Comunicado de Prensa

INSULZA: INICIATIVA PRIVADA Y POLITICAS PUBLICAS
EJES DE LA GENERACION DE EMPLEO

MAR DEL PLATA, Argentina—El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) José Miguel Insulza, dijo hoy en la inauguración de la Cuarta Cumbre de las Américas que existen condiciones indispensables sin las cuales la tarea de crear empleo digno en el continente no podrá ser acometida con éxito. Tales condiciones, especificó, son “el crecimiento, los equilibrios macroeconómicos y la apertura de mercados. En ellas hemos tenido avances importantes: buenas tasas de crecimiento, reducción sustantiva de los déficit y la inflación, la suscripción de una cantidad importante de acuerdos comerciales y bilaterales y regionales, entre los cuales el acuerdo CAFTA – DR es el más reciente.”

En su intervención en la ceremonia inaugural, Insulza reconoció la importancia del incentivo al libre mercado, en el propósito de generar empleo, pero también valoró, el rol de las políticas publicas. Recordó que en la década de los 80 la distorsión ideológica condujo al empequeñecimiento y al desprecio por el papel del Estado y del gobierno en la distribución de la riqueza y en la provisión de servicios sociales esenciales para la mayoría de los pueblos del hemisferio. “Reconocer el valor de las políticas públicas no significa en caso alguno caer en tentaciones estatistas que limiten la capacidad de las empresas y las personas para desarrollar plenamente su capacidad de generar riqueza”, dijo el jefe de la OEA.

Por el contrario, agregó, “la creación de un clima económico y social propicio a la inversión, al emprendimiento privado, a través de reglas claras que eliminen temores, abran mercados, reduzcan al máximo las trabas burocráticas y garanticen a la iniciativa privada la posibilidad de brindar crecimiento, son políticas publicas ineludibles para nuestros gobiernos”. Admitió que la mayor generación de empleo se produce a través de la iniciativa privada, pero advirtió que la sola acción de mercado se ha mostrado insuficiente para generar una justa distribución del ingreso y para atender necesidades sociales básicas.

“Es hora de aceptar que el combate a la pobreza y la desigualdad requiere también de políticas publicas claras, focalizadas y dirigidas por gobiernos dotados de recursos y capacidad técnica. La tarea fundamental de la política y los políticos, es resolver los problemas de la gente y no generar mas problemas, como ocurre muchas veces”, apunto.

El máximo representante de la OEA habló de la incertidumbre que afecta a la gente y comparó lo ocurrido al inicio de los 90 con lo que sucede actualmente. Dijo que hace más de una década, se creyó que el crecimiento económico podía prolongarse en el tiempo, cosa que no ocurrió. Admitió que eso trajo un desencanto que hoy se puede reproducir. El año 2004, explicó, fue en términos económicos el mejor vivido en la región en las ultimas dos décadas, y el 2005 y 2006 enfrentan buenos pronósticos. “Desde el punto de vista de la gente –resumió- las preguntas claves son dos: ¿seremos capaces esta vez, de mantener los ritmos de crecimiento necesarios, para que nuestra región no siga perdiendo relevancia en la economía mundial, frente a otras regiones en desarrollo que han tenido tasas de crecimiento más altas?, y, ¿será posible que esta vez los beneficios de nuestro crecimiento y nuestra democracia, beneficien a los más de 200 millones de pobres, la mitad indigentes, que hoy habitan nuestra región?”

Aumentar sustantivamente la gobernabilidad en la región, prosiguió Insulza, “es otro de nuestros grandes desafíos. Hemos tenido en los últimos años graves problemas de estabilidad política y de calidad de la gestión pública.” Siguiendo esta línea de reflexión, dijo que “mejorar la calidad de la política pública en el hemisferio significa, en primer lugar, ampliar y fortalecer la libertad en las Américas. La superación del desempleo y la pobreza, supone sociedades mas libres, con plena expresión y participación de todos sus ciudadanos, con más justicia, con transparencia, con mayor libertad de expresión y organización, con respeto a la igualdad de género, respeto a la diversidad de sus pueblos originarios, sus conciudadanos afro-descendientes, sus grupos más vulnerables, los millones de migrantes y desplazados.”

En este contexto, el Secretario General de la OEA destacó el papel que juega la Carta Democrática Interamericana, como instrumento básico de que dispone el organismo regional “para forjar una comunidad de naciones libres cuyos gobiernos no sólo se generen democráticamente, sino que también gobiernen con pleno apego al estado de derecho, garantizando siempre los derechos humanos de todos sus ciudadanos”. Aseveró que este documento es “un logro de nuestros pueblos, y como tal, debemos respetarla de manera irrestricta”. Insulza destacó la Carta Democrática Interamericana, junto al lanzamiento de las negociaciones del ALCA, la Convención Interamericana Contra la Corrupción, y la creación del Comité Interamericano para el Control del Abuso de las Drogas, como los grandes logros de las Cumbres de las Américas.

En la ceremonia de inauguración de la cita hemisférica participaron también, el Presidente de Argentina Néstor Kirchner, el Primer Ministro de Canadá, Paul Martin y el Presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

Referencia: C-259/05