Hasta hace unas décadas, la mayoría de los países en América y el Caribe tenían leyes anticuadas, que respondían más al machismo, el racismo, al clasismo, que a las ideas y derechos de la sociedad actual.
Se ha discriminando legalmente a las Trabajadoras del Hogar con mayores cargas horarias y menores salarios que a los demás tipos de empleo, con restricciones para acceder a otros derechos laborales como a la seguridad social, al pago de horas extraordinarias, primas, bonificaciones, entre muchos otros.