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3. Demanda de tierra para agricultura

.1 Tierras aptas para la labranza intensiva
.2 Tierras de aptitud limitada para la labranza intensiva
.3 Tierras aptas para cultivos permanentes
.4 Tierras aptas para pastos y bosques
.5 Tierras sin valor agrícola
.6 Uso actual de la tierra

En una sección anterior se mencionó la presión de la población sobre la tierra disponible en El Salvador; con el análisis del Cuadro 2.34 se alude al mismo problema, pero en forma más detallada. Los cálculos hechos en el mencionado cuadro se basan en los requerimientos mínimos expuestos por el Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá (INCAP) y en ciertas suposiciones, como por ejemplo que los rendimientos agrícolas correspondan a los obtenidos durante los años 1968-1970, y que la población tenga el suficiente ingreso como para comprar la dieta mínima recomendada por el INCAP. Por lo tanto, conociendo la dieta mínima requerida y multiplicándola por el numero de habitantes se obtendrá la suma de la producción alimenticia requerida para satisfacer las normas establecidas por el INCAP. En la suposición de que se obtenga un determinado rendimiento por hectárea, como el promedio logrado en el período 1968-70, se podrá calcular la extensión requerida para producir el volumen recomendado de alimentos. El cálculo de la fuente citada en el Cuadro 2.34 da una cifra de alrededor de 1900000 hectáreas, que excede en unas 400000 hectáreas a la superficie que se encuentra bajo fincas.4 Estos datos sirven para ilustrar el caso y no tienen la pretensión de ser exactos, ya que hay variaciones substanciales según las suposiciones que se quiera utilizar para los cálculos de la producción requerida, y por ende la extensión necesaria para producirla. Todos los datos indican una substancial deficiencia en el presente y una más grave aun para el futuro.

4 Según el Censo Agropecuario de 1961, de un total de 2037510 hectáreas, se encontraban en fincas sólo 1581428. Por otra parte se podían incluir en áreas urbanas, ríos, lagos, etc. un total de 483000 hectáreas. Sin embargo, esta cifra, más la que se encuentra en fincas, suman 2064000 hectáreas en vez de 2037510 del total mencionado según el Censo. Por ello, las 400000 hectáreas citadas es sólo una cifra aproximada.

Cuadro 2.29 Minifundios y fincas comerciales

Región y departamento

Total de fincas

Fincas minifundistas

Fincas comerciales

Numero

Superficie

Numero

Superficie

Numero

Superficie

OCCIDENTAL


 

Ahuachapán

7620

110360

5930

13640

1690

96720

Santa Ana

13290

179490

10480

18380

2810

161110

Sonsonate

8410

102510

7100

11940

1310

90570

Total

29320

392360

23510

43960

5810

348400

CENTRAL


 

Chalatenango

17810

172270

13860

23100

3950

149170

La Libertad

10350

155930

8560

18520

1790

137410

San Salvador

12560

79650

11050

15260

1510

64390

Cuscatlán

14890

58550

13360

16880

1530

41670

Total

55610

446400

46830

73760

8780

372640

PARACENTRAL


 

La Paz

10870

93330

9070

15330

1800

78000

Cabañas

10210

57770

8190

15260

2020

42510

San Vicente

7380

70120

5900

12290

1480

57830

Usulután

11300

135500

8930

18600

2370

116900

Total

39760

356720

32090

61480

7670

295240

ORIENTAL


 

San Miguel

18770

162330

14960

27940

3810

134390

Morazán

13510

89010

10040

20340

3470

68670

La Unión

14150

134610

10110

19890

4040

114720

Total

46430

385950

35110

68170

11320

317780

Total del país

171120

1581430

137540

247370

33580

1334060

Fuente: Segundo Censo Agrícola 1961.

Cuadro 2.30 Tipología social de la tenencia de la tierra (1961)

Fuente: Segundo Censo Agropecuario 1961.

Ministerio de Economía, Dirección General de Estadística y Censos, Cuadro 32,

Cuadro 2.31 Tipos de explotación

Departamento

Total de explotaciones

Microfincas

Subfamiliares

Familiares

Multifamiliares

Total

Mediana

Grande

Ahuachapán

15558

10432

3440

1351

325

304

31

Santa Ana

20053

11062

6177

2245

569

534

35

Sonsonate

14887

10076

3494

1027

290

258

32

Chalatenango

19583

6673

8963

3468

479

459

20

La Libertad

16971

9692

5489

1429

361

305

56

San Salvador

16321

9646

5165

1297

213

199

14

Cuscatlán

15422

7844

6048

1046

124

116

8

La Paz

13211

5910

1493

1542

266

243

23

Cabañas

12058

4115

5916

1886

141

137

4

San Vicente

10409

4415

4513

1235

246

234

12

Usulután

16328

7023

6842

2029

344

308

36

San Miguel

23368

9652

9908

3361

447

420

27

Morazán

15283

4438

7375

3247

223

219

4

La Unión

17534

6076

7421

3713

324

312

12

Fuente: Cálculos en base al Segundo Censo Agropecuario, 1961.

Ministerio de Economía, Dirección General de Estadística y Censos, Cuadro 32,

Las tierras de El Salvador han sido clasificadas en ocho clases según su capacidad productiva. Para ello se utilizó el sistema de clasificación de los Estados Unidos, pero con definiciones más adaptadas a las condiciones existentes en El Salvador. De cada una de esas divisiones principales se han hecho subdivisiones de acuerdo con los grados de productividad, condiciones del perfil, topografía, grado de erosión, peligros de inundaciones, drenaje, profundidad del manto de agua, cantidad de piedras en la superficie y zanjas en los campos que limiten el uso de maquinaria agrícola pesada. Reunidas todas estas condiciones y diferenciadas por su utilización, se les dieron valores que van del I al VIII. Esta clasificación tiene una subdivisión que indica la condición preponderante que lo amerita como tal.

Estas ocho clases se han agrupado en cuatro categorías de acuerdo con las características especiales de la producción agrícola. Ellas son: a) tierras apropiadas para cultivos anuales; b) tierras apropiadas para cultivos perennes; c) tierras no apropiadas para cultivos, pero adecuadas para vegetación silvestre, y d) tierras sin ninguna utilidad agrícola.

.1 Tierras aptas para la labranza intensiva

Existen 383645 hectáreas de tierras aptas para la labranza intensiva, localizadas mayormente en la planicie aluvial costera y en los valles interiores. Comprenden las clases agrológicas I, II y III. Casi todas estas tierras pueden dedicarse a cultivos anuales. Las principales cosechas que se adaptan son algodón, caña de azúcar, maíz, maicillo, maní, soya, hortalizas y frijoles. Estas tierras son de buena o moderada calidad y es posible emplear en ellas maquinaria agrícola y dotación de riego. Es de suma importancia señalar la urgente necesidad existente para conservar los suelos de esta categoría, en las cuales, aun las tierras de la Clase I, están sufriendo procesos de degradación por medio de la erosión laminar y en cárcavas.

.2 Tierras de aptitud limitada para la labranza intensiva

Comprenden los suelos de Clase IV y tienen una extensión aproximada de 128410 hectáreas. Son tierras de regular o buena calidad y poco aptas para la labranza intensiva. A causa de la pendiente, el peligro de erosión y las características desfavorables del suelo, tienen una selección de cultivos y métodos de labranza bastante restringidos, y/o necesitan el empleo de prácticas de conservación y corrección muy intensivas. Los suelos de esta categoría pueden utilizarse para cultivos anuales, cultivos permanentes y para la ganadería; cuando se usan para cultivos de maíz y maicillo sus rendimientos no pueden ser sostenidos durante largos períodos. Pueden obtenerse rendimientos rentables en los años de lluvias promedio aceptables, y fracasos en los anos de lluvia poco abundantes. El uso de maquinaria está bastante restringido debido a las pendientes y a problemas del suelo; la preparación de la tierra, la siembra y escardas se hacen con mayor facilidad por medio de tracción animal.

Cuadro 2.32 Indices normales de tenencia

Nota: Los nombres en mayúsculas corresponden a los departamentos, y los números subrayados a sus respectivos índices.

Cuadro 2.33 Indices máximos y mínimos de tenencia

Cuadro 2.34 Requerimiento de alimentos y tierra para producirla (1970: Población salvadoreña: 3.4 millones)

Alimentos

Consumo recomendado (kg/año)

Producción requerida (toneladas)

Rendimientos en ton/ha (por ano)

Extensión requerida (ha)

Leche

91.3

310420

.42

739100a

Huevos

17.5

59500

1.00

59500

Carnes

32.8

111520

.03

1486940b

Frijoles

27.4

93160

1.44

64694

Vegetales

76.6

260440

10.00

26044

Frutas

36.5

124100

7.00

17728

Musáceas

54.8

186320

16.00

11645

Raíces y tubérculos

21.9

74460

12.00

6205

Maíz

83.2

282880

1.60

181330

Trigo

41.6

151840

-

-c

Arroz

21.9

79935

2.00

39967

Azúcar

18.2

66430

7.00

9490

Grasas

5.5

20075

-

-c

Totales


1821080


1903543

Fuente: Araujo, M.P. y Ayala, R. La Población de El Salvador y sus Recursos Naturales, agosto 1971.

a El área para producción de leche se incluye en la extensión requerida para producir carne.

b El área indicada es para producir sólo el 40 por ciento de las carnes; el resto sería obtenida de aves, pescado y otras.

c Se excluye el área para el trigo, pues el país carece de condiciones ecológicas para producirlo económicamente. Las grasas podrían obtenerse como subproductos.

.3 Tierras aptas para cultivos permanentes

Comprenden los suelos de la Clase VI; están localizados mayormente en los bloques montañosos, macizos volcánicos y complejos volcánicos antiguos, y tienen una extensión aproximada de 385000 hectáreas.

Estos suelos pueden tener las limitaciones siguientes: pendientes muy pronunciadas, susceptibilidad severa a la erosión, efectos de erosión pasada, pedregosidad, muy poca profundidad y baja capacidad de retención de agua. Debido a una o mas limitaciones, estos suelos no pueden utilizarse para cultivos intensivos pero pueden ser adecuados para pastos, cultivos permanentes y cultivos forestales propios de la zona. Algunos de estos suelos son adecuados para cultivos especiales que requieren condiciones (calidad de suelo, clima) diferentes a aquellos cultivos comunes. Otros suelos pueden ser utilizados para algunos cultivos con cierta libertad, a condición de que se apliquen prácticas intensivas de manejo. A alturas mayores de 500 metros sobre el nivel del mar se encuentran los suelos que pertenecen a la Clase VI, adecuados para café, frutales, hortalizas y flores.

Las prácticas de conservación deberán ser adecuadas al lugar y al cultivo que se trate; las prácticas más importantes que deben emplearse son: terrazas individuales, terrazas continuas, cultivos en fajas, cultivos en contorno, barreras vivas y canales de desvío.

.4 Tierras aptas para pastos y bosques

Comprenden las clases V, VI y VII, y tienen una extensión de 1189975 hectáreas. Los suelos de las Clases Va, Vas y Vs, están localizados en la planicie costera, planicies aluviales, valles antiguos y valles interiores.

Estas tierras no presentan problemas de erosión, o si lo tienen son muy pequeños. Sin embargo, tienen otras limitaciones a causa del mal drenaje o por graves peligros de inundación. Los suelos de la Clase Vs, son arcillosos, de color gris muy oscuro o negro en la superficie; son muy plásticos y pegajosos cuando están húmedos, y duros y agrietados cuando se hallan secos; forman grandes bloques debido a la contracción a que están expuestos cuando pierden humedad. La profundidad de estos suelos puede llegar hasta un metro sobre la roca madre. La permeabilidad es muy lenta y la capacidad de retención de agua es alta.

Los suelos de la Clase VII tienen limitaciones que los hacen inadecuados para cultivos y restringen su uso, fundamentalmente para vegetación natural.

Las condiciones físicas de los suelos de la Clase VII son tales que resulta poco práctico aplicar aquellas medidas que fueron mencionadas para los suelos de la Clase VI, debido a una o más limitaciones continuas que no pueden ser corregidas.

La Clase VII de esta zona puede estar limitada por factores de muy poco drenaje o peligro muy grave de inundaciones y características malas del suelo (VIIas y VIIs). Dentro de la misma clase también hay tierras de utilidad restringida a causa del peligro muy grave de erosión (VIIe) y de las limitaciones que tiene como consecuencia del peligro de erosión y características desfavorables del suelo (Viles).

La Clase VIIas está localizada principalmente en la planicie aluvial costera; son tierras aptas únicamente para la vegetación natural.

Las Clases VIIe, Viles y VIIs están localizadas en los bloques montañosos y cadenas montañosas. Son aptas únicamente para vegetación natural.

Debido a que en las tierras de las Clases VIIe y Viles se inician los procesos erosivos, se hace necesario reforestarlas y aplicar siembras en contorno y barreras vegetales y de piedra.

En la Clase VIIas, si se realizan prácticas intensivas de avenamiento, podrían recuperarse las tierras para dedicarlas a pastoreo y a cultivos de palmáceas, bosques salados y refugio de la fauna marina; por lo tanto, es necesario preservarlas mediante una explotación racional adecuada.

.5 Tierras sin valor agrícola

Estas tierras están comprendidas dentro de la Clase VIII. Tienen una extensión aproximada de 31817 hectáreas, o sea que ocupan el 1.51 por ciento del territorio nacional. Estas tierras no son apropiadas para cultivos ni para la producción de vegetación útil y permanente. Están localizadas en áreas muy quebradas y pedregosas; constituyen pantanos imposibles de drenar, o depósitos de lavas recientes, farallones y conos volcánicos recientes. En suma, se trata de áreas donde no puede crecer la vegetación natural.

.6 Uso actual de la tierra

Con base en el Censo Agropecuario de 1961 y en algunas estimaciones recientes de la Dirección de Economía Agrícola y Planificación del Ministerio de Agricultura y Ganadería, la utilización de la tierra del país se presenta en el Cuadro 2.35.

Una característica preponderante del sector agropecuario salvadoreño es la escasa diversificación de su producción. La agricultura ha representado en los últimos anos alrededor del 75 por ciento del aporte al PTB del sector, mientras que la ganadería, por otra parte, sólo representa un 13 por ciento aproximadamente. A su vez, el principal producto dentro de la actividad agrícola es el café, que aporta un 40% al PTB del sector; le siguen en importancia el algodón y el maíz, con 8.1 y 7.5 por ciento, respectivamente, para 1970. En conjunto, estos productos abarcan un 55 por ciento del PTB del sector; el café y el algodón son productos de exportación, mientras que el maíz constituye un producto de consumo en el país. El Cuadro 2.36 presenta la composición porcentual del sector agropecuario en el producto territorial bruto.

Cuadro 2.35 Utilización de la tierra

Región y departamento

Superficie en cultivos

Superficie en pastos

Montes y bosque

Temporales

Permanente

Total

Sembrados

Naturales

Total

OCCIDENTAL


 

Ahuachapán

25460

16000

41460

5190

34550

39740

19900

Santa Ana

33450

34200

67670

9770

56560

66330

36580

Sonsonate

21510

17140

38650

15390

28780

44170

13060

Total

80420

67360

147780

30350

119890

150240

68540

CENTRAL


 

Chalatenango

43760

2030

45790

10180

69100

79280

22540

La Libertad

29550

26900

56450

8150

60690

68840

15850

San Salvador

23490

12160

35650

1950

21350

23300

13300

Cuscatlán

24060

3630

27690

930

21200

22130

4790

Total

120860

44720

165580

21210

172340

193550

56480

PARACENTRAL


 

La Paz

38970

8840

47410

10070

22780

32850

8100

Cabañas

28560

810

29370

2670

17780

20450

4970

San Vicente

23620

1980

25600

3160

25660

28820

11420

Usulután

52060

21320

73380

8960

24990

33950

19120

Total

143210

32550

175760

24860

91210

116070

43610

ORIENTAL


 

San Miguel

62210

9700

71910

12410

47580

59990

21300

Morazán

36220

3960

40180

7600

25950

33550

11340.

La Unión

50570

1370

51940

8010

4440

49450

26920

Total

149000

15030

164030

28020

114970

142990

59560

Total del país

493490

159660

653150

104440

498410

602850

229190

Fuente: Segundo Censo Agropecuario 1961.

Cuadro 2.36 Composición porcentual del producto territorial bruto

Actividad

1965

1968

1970

Actividad

1965

1968

1970

1. Agricultura

77.2

73.5

75.5

2. Ganadería

12.5

14.8

13.5


 

Café

39.7

36.4

40.1

3. Silvicultura

2.9

3.1

3.1

Algodón

10.9

7.0

8.1

4. Pesca

1.3

2.1

2.0

Maíz

5.8

7.0

7.5

5. Apicultura

.1

.1

.1

Frijol

1.1

1.5

1.9

6. Avicultura

6.0

6.4

5.8

Arroz

1.7

3.5

1.8





Maicillo

3.2

3.4

3.3

Total

100.0

100.0

100.0

Caña de azúcar

2.6

3.5

2.7





Frutas y Verduras

7.9

7.6

6.7





Otros

4.3

3.6

3.4

Total en millones de colones

579.5

602.7

691.0

Fuente: CONAPLAN, Indicadores Económicos y Sociales, Enero-abril 1971

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