The volume of world merchandise trade has fallen precipitously in the first half of 2020 as the COVID-19 pandemic has disrupted the global economy. Leading indicators provide clues about the extent of the slowdown and how it compares with earlier crises.

En este Resumen del informe Perspectivas económicas de América Latina 2020 (LEO 2020 por sus siglas en inglés) se analiza cómo la transformación digital puede ayudar a la región a enfrentar estos tiempos difíciles. La pandemia del COVID-19 está teniendo un profundo impacto en las condiciones socioeconómicas de América Latina y el Caribe, acentuando un escenario ya muy complejo debido a las debilidades estructurales existentes en la región. Esta crisis sin precedentes llega en un momento de altas aspiraciones de la sociedad y refuerza la necesidad de transformar el modelo de desarrollo de la región. El informe explora cómo la transformación digital puede ayudar a hacer frente a la situación socioeconómica actual, impulsar la productividad, fortalecer las instituciones y lograr niveles más altos de inclusión y bienestar. El LEO 2020 también destaca el papel clave que las alianzas internacionales tienen para aprovechar los beneficios de la transformación digital.

La pandemia de COVID-19 ha empujado los niveles de deuda hasta nuevos máximos. En comparación con finales de 2019, se proyecta que los coeficientes de endeudamiento promedio en 2021 aumenten un 20% del PIB en las economías avanzadas, un 10% del PIB en las economías de mercados emergentes y aproximadamente un 7% en los países de bajo ingreso. Estos incrementos se suman a unos niveles de deuda que ya son históricamente altos. Si bien muchas economías avanzadas todavía tienen capacidad de endeudamiento, los países de mercados emergentes y los de bajo ingreso afrontan limitaciones mucho más restrictivas de su capacidad de contraer nuevas deudas.

As in other economic downturns, the pandemic has reduced state and local revenues, but this time is different. Declines in income tax revenues are likely to be smaller than projections based on historical experience because employment losses have been unusually concentrated on low-wage workers (who pay less income taxes than higher-wage workers), the stock market has held up so far (sustaining taxes on capital gains), and the federal government has increased and expanded unemployment insurance benefits and grants to business, which will shore up taxable income. On the other hand, declines in sales and other taxes and fees are larger than historical experience would suggest, because consumption has fallen so sharply and people are staying home—meaning that revenues from taxes and fees on hotels, tolls, airports, and motor fuel have plummeted.

For the global payments sector, the events of 2020 have reset expectations and significantly accelerated several existing trends. The COVID-19 public- health crisis and its many repercussions—among them, government measures to protect citizens and rapid changes in consumer behavior—changed the operating environment for businesses, large and small, around the world. For the payments sector, global revenues declined by an estimated 22 percent in the first six months of the year compared with the same period in 2019. We expect revenues to recover (only to a degree) in the second half of 2020, ending 7 percent lower than full-year 2019. Over the past several years, payments revenues had grown by roughly 7 percent annually, which means this crisis leaves revenues 11 to 13 percent below our prepandemic revenue projection for 2020.

While the COVID-19 pandemic has “profoundly tested” global commitment to protecting refugees and forcibly displaced people, it has also shown the value of including refugees in national responses and safety nets to the benefit of all, UNHCR’s Assistant High Commissioner for Protection Gillian Triggs said today. 

Governments throughout the region have put in place temporary bans on forced evictions amid the pandemic. But some of these regulations either have already expired or are slated to in the coming weeks, raising concerns over a spike in evictions.

Where such measures remain on the books, they are not always enforced, with many landlords simply throwing tenants who are behind on the rent out onto the streets – where keeping safe from the coronavirus is that much more difficult. 

Los gobiernos de la región han impuesto prohibiciones temporales a los desalojos forzosos en medio de la pandemia. Pero algunas de estas regulaciones ya han expirado o se espera que expiren en las próximas semanas, lo que genera preocupaciones sobre un aumento en los desalojos.

Donde tales medidas de prohibición de desalojo permanecen, no siempre se aplican, ya que muchos propietarios simplemente arrojan a los inquilinos que están atrasados ​​en el alquiler a las calles, donde mantenerse a salvo del coronavirus es mucho más difícil.

One priority, then, is to reenergize the organization—to act rather than react. Even as the COVID-19 crisis continues to create a world of uncertainty, the goal must be to rebuild for the longer term. Companies that are strong and resilient will be better placed to survive and prosper. Those are qualities that can’t be taken for granted; they need to be cultivated.

We, the Labour and Employment Ministers of the G20 members and invited countries, met virtually on the 10th September 2020, to discuss recent global economic and labor market developments and to advance our work towards ‘Empowering People’ and ‘Realizing Opportunities of the 21st Century for All.’ This year, COVID-19 has brought an unprecedented global challenge with significant human costs. Fighting and overcoming the pandemic remains our highest and overriding priority. We recognize the importance of protecting and promoting decent jobs for all, especially for women and youth, within our domestic and global labor markets. We support comprehensive, robust and adaptive social protection systems and we are committed to tackling inequalities, including gender inequalities. We acknowledge the value of bringing together technology and a human-centered approach including by using Behavioral Insights in employment policymaking..

En el marco de un diálogo estratégico, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), el Fondo de Cooperación y Desarrollo Internacional (TaiwanICDF) y  la US Corporación Financiera de Desarrollo Internacional (DFC) anunciaron hoy la firma de una carta de interés para cooperar y dar soporte a los países de la región centroamericana en el marco de los retos que deben enfrentar como consecuencia de los efectos del COVID-19.

En particular, El Salvador, Guatemala y Honduras han luchado durante mucho tiempo contra las barreras que impiden el desarrollo económico y la prosperidad, lo que ha incrementado los desafíos como la pobreza, la violencia y la migración ilegal en la región, sumándose ahora la pérdida significativa de empleos en los diferentes sectores de las economías sobre todo en las MIPYMEs.

Confianza, tecnología, recuperación económica, protección social, seguridad y equilibrio de poderes son los principales retos que tiene la región para que la democracia no salga tan afectada por el impacto de la pandemia, que seguirá presente en las próximas elecciones en diversos países. La contienda electoral en Estados Unidos y sus efectos en América Latina también se abordó en la tercera jornada de la 24 Conferencia Anual CAF.

La Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) de la Organización de los Estados Americanos (OEA), con la cooperación de la Unión Europea a través de su programa EUROsociAL+, presenta y pone a disposición de los Estados Miembros de la OEA, de organizaciones de la sociedad civil y sector privado el documento “COVID-19 en la vida de las mujeres: Emergencia global de los cuidados”, en respuesta a la profundización de la desigualdad en la distribución de las tareas domésticas y de cuidado y al incremento de la carga de trabajo no remunerado que están realizando las mujeres. El texto analiza el rol de las mujeres en el funcionamiento de la vida doméstica y productiva y los impactos en sus vidas y en la economía.

As countries around the world battle the coronavirus pandemic, a troubling gap has come to light: there simply aren’t enough face masks, ventilators and test kits to go around. Demand for face masks is estimated to be four times the world’s current manufacturing capacity, according to the World Health Organization. For ventilators, demand is 10 times bigger than existing capacity. Over the next four months, the world is likely to face a shortage of more than 300 million test kits, according to the WHO and the Bill and Melinda Gates Foundation.

Un nuevo informe conjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que solo si se aplana la curva de contagio de la pandemia por COVID-19 se podrán reactivar las economías de la región. El reporte propone un enfoque con tres fases que incluyen la adopción de políticas de salud, económicas, sociales y productivas dirigidas a controlar y mitigar los efectos de la pandemia, reactivar con protección y reconstruir de manera sostenible e inclusiva.

El programa contribuirá a organizar y ejecutar con mayor eficiencia las políticas y programas que apoyen las prioridades gubernamentales para el manejo de la crisis y la preparación de la recuperación económica como respuesta a los impactos del COVID-19. Además, mejorará la gestión y el desempeño de las políticas gubernamentales prioritarias con un impacto directo en los servicios prestados a los ciudadanos.

En este sentido, se focalizará en la calidad de la planificación, el monitoreo, la toma de decisiones y la evaluación de programas gubernamentales estratégicos, y contribuirá a fortalecer las capacidades de innovación y la promoción de prácticas innovadoras sobre políticas públicas en la administración pública, con participación del sector privado y la sociedad civil.

Entre los principales hallazgos destacan que, dentro de la región andina, las empresas de Perú y Colombia se encontraban mejor posicionadas para enfrentar el choque del COVID-19, mientras que las de Ecuador y Bolivia estaban menos preparadas.  En todos los casos, las empresas grandes y medianas son las que tenían mayor preparación, en comparación con las pequeñas y, sobre todo, con las microempresas debido a diferencias importantes en aspectos como el acceso a crédito, el uso de tecnologías, la propiedad del espacio en el que operan, el peso de los costos fijos y la productividad laboral.

The supplies were procured via the UN Supply Portal and the PAHO Strategic Fund, which facilitates procurement of diagnostics, ventilators, and PPE for the COVID-19 response. This initiative is the result of several weeks of collaborative coordination between PAHO/WHO, the World Food Programme, the Government of Canada and the Caribbean Disaster Emergency Management Agency (CDEMA), which has developed an initiative to assist with the short-term establishment and operation of a new integrated Regional Logistics Hub for the COVID-19 response based in Barbados.

The Caribbean Development Bank (CDB) and the Caribbean Disaster Emergency Management Agency (CDEMA) took delivery of the majority of US$3 million worth of PPE at the Port of Bridgetown. CDB procured and purchased the equipment with concessional resources through the Bank’s Special Development Fund.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo de US$130 millones para apoyar la sostenibilidad financiera de corto plazo de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyME) como sostén del empleo en Bolivia frente a la crisis del COVID-19 y sus efectos en el tejido productivo.

El programa espera beneficiar como mínimo a aproximadamente 12.000 MiPyME afectadas por la crisis, mediante créditos que se otorgarán a través de las Instituciones Financieras elegibles, destinándose un monto superior al 30 por ciento del total de los recursos a empresas propiedad de mujeres.