El Desarrollo Social en las Cumbres de las Américas

El Departamento de Desarrollo Social y Empleo tiene como uno de sus objetivos centrales asegurar el cumplimiento y dar seguimiento a los mandatos de las Cumbres de las Américas y de las Reuniones de Ministros y Altas Autoridades en Desarrollo Social, así como de la Asamblea General de la OEA en los temas de su competencia.

En el proceso de las Cumbres de las Américas, iniciado en 1994, se observa una gradual y mayor atención a los desafíos que plantea el desarrollo y el combate a la pobreza, entendiendo que no es posible consolidar las democracias del Hemisferio ni fortalecer sus instituciones si no se atienden paralelamente las necesidades esenciales de la población.

Las Cumbres de las Américas orientan los trabajos que se realizan en el marco de las reuniones de Ministros y Altas Autoridades de Desarrollo Social, así como las actividades de la Comisión Interamericana de Desarrollo Social. Pero a su vez, esta Comisión y la Reunión Ministerial brindan insumos e influyen en la definición de prioridades sectoriales que recoge el proceso de Cumbres, para asegurar así la relevancia y pertinencia de las disposiciones al más alto nivel políticos de nuestros Estados.

Este proceso, que convoca a Jefes de Estado y de Gobierno, cobró un matiz de mayor relevancia en el ámbito del desarrollo social, especialmente tras la celebración de la Cumbre Extraordinaria de Monterrey, celebrada en México en enero de 2004, y de la IV Cumbre de las América, celebrada en noviembre de 2005. Esta última tuvo como lema “Crear trabajo para enfrentar la pobreza y fortalecer la gobernabilidad democrática”. Entendiendo que el combate a la pobreza y la estabilidad democrática son factores interdependientes y se refuerzan mutuamente, los Jefes de Estado y de Gobierno reafirmaron su compromiso “de combatir la pobreza, la desigualdad, el hambre y la exclusión social para elevar las condiciones de vida de nuestros pueblos y reforzar la gobernabilidad democrática en las Américas”. Entre otras cosas, se comprometieron a implementar políticas integrales que institucionalicen la lucha contra la pobreza y a intercambiar prácticas en materia de políticas y programas de combate a la pobreza.