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Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)
saluda la resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU mediante la
cual, entre otros aspectos, expresa su preocupación por las violaciones a
los derechos humanos y abusos ocurridas desde abril de 2018; llama al
Gobierno de Nicaragua a liberar a todas las personas detenidas ilegal o
arbitrariamente; lamenta la decisión del Gobierno de Nicaragua de suspender
la misión del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes en
Nicaragua (GIEI-Ni) y del Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI),
y llama a reanudar la cooperación con la Oficina de la Alta Comisionada de
Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la Organización de Estados
Americanos y la CIDH. Esta resolución, bajo el título “Promoción y
protección de los derechos humanos en Nicaragua”, fue adoptada durante el
40º Período de Sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la Organización
de las Naciones Unidas (ONU).
“Nuestra participación en estas sesiones del Consejo de Derechos Humanos
de la ONU estuvo enfocada en darle visibilidad a la grave situación de
derechos humanos en Nicaragua”, señaló el Comisionado Joel Hernández, Primer
Vicepresidente de la CIDH, quien representó a la CIDH en la sesión.
Por primera vez, la CIDH intervino en el Segmento de Alto Nivel de las
sesiones, el 27 de febrero; en dicha instancia, el Comisionado Hernández
realizó una presentación enfocada principalmente en la situación en
Nicaragua. Asimismo, la CIDH participó en el debate interactivo del Consejo
de Derechos Humanos, el 7 de marzo, con una intervención sobre la situación
en Nicaragua. Adicionalmente, el 19 de marzo la CIDH sostuvo un evento
paralelo sobre la situación en Nicaragua y el trabajo del Mecanismo Especial
de Seguimiento de Nicaragua (MESENI).
El Comisionado Hernández también participó como ponente en otros dos
eventos paralelos, ambos sobre Nicaragua. Uno de esos eventos tuvo lugar el
5 de marzo, bajo el título: “La crisis de derechos humanos en Nicaragua: un
análisis basado en los hallazgos del Grupo Interdisciplinario de Expertos
Independientes para Nicaragua (GIEI-Ni)”, el cual fue organizado por
Amnistía Internacional y el Centro para la Justicia y el Derecho
Internacional (CEJIL). El otro, organizado por Human Rights Watch, se
desarrolló el 7 de marzo bajo el título “El rol del Consejo de Derechos
Humanos en ponerle fin a la crisis de derechos humanos en Nicaragua”.
“El aumento de la colaboración entre el sistema universal de derechos
humanos y los mecanismos regionales de derechos humanos ha sido un objetivo
de las Naciones Unidas desde la Conferencia de Viena de 1993, y ha sido
reiterado por resoluciones de este Consejo de Derechos Humanos”, dijo en su
presentación ante el Consejo el Comisionado Joel Hernández.
“En la última década, la CIDH ha tratado de ampliar su colaboración con
el sistema de derechos humanos de la ONU y con otros mecanismos regionales,
estableciendo un punto focal y promoviendo actividades conjuntas en sus
diferentes mecanismos. Esto se ha convertido en una prioridad institucional
del Plan Estratégico de la CIDH 2017-2021”, agregó.
Asimismo, en su discurso el Comisionado Hernández observó que “en algunos
países de la región se han venido dando expresiones públicas de autoridades
y segmentos sociales dirigidas a consolidar una retórica que proclama
abierta o encubiertamente nacionalismos exacerbados y formas de
discriminación como la xenofobia, la misoginia, la homofobia, y, en general,
discursos de miedo o de odio. Estos hechos han conducido a situaciones
altamente preocupantes sin que los sistemas nacionales de protección hayan
podido combatirlos adecuadamente.”
En este contexto, se hace más indispensable que nunca el trabajo
colaborativo con el sistema universal de derechos humanos. La CIDH ha
intensificado en los últimos años las actividades conjuntas con la ONU. En
2014, la CIDH firmó una Declaración Conjunta de cooperación con la Oficina
del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Asimismo, en
2017 la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos
Humanos y la CIDH lanzaron el Mecanismo Conjunto de Defensores y Defensoras
de Derechos Humanos, destinado a maximizar las capacidades de ambas
instituciones para la protección de estas personas.
Asimismo, el 16 de diciembre de 2018, la CIDH y el Presidente del Comité
de Coordinación de los Procedimientos Especiales firmaron una Hoja de Ruta
que sistematiza la contribución de los dos organismos entre sí, detallando
las formas en que se puede compartir la información y los tipos de
actividades que se pueden llevar a cabo conjuntamente.
La CIDH y la ONU han estado intensificando todas las áreas de cooperación mutua. Representantes de la Oficina de la Alta Comisionada han participado en audiencias públicas de la CIDH en varios períodos de sesiones recientes, entre otras formas de colaboración.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.
No. 084/19