COMUNICADO DE PRENSA
R50/13
RELATORÍA ESPECIAL CONDENA ASESINATO DE PERIODISTA SECUESTRADO EN HONDURAS
Washington D.C., 15 de julio de 2013. – La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condena el asesinato del periodista Aníbal Barrow, quien fue secuestrado el 24 de junio y cuyo cuerpo mutilado habría sido hallado el 9 de julio en el municipio Villanueva, departamento de Cortés. La Relatoría manifiesta su profunda preocupación e insta a las autoridades hondureñas a actuar con urgencia para identificar los motivos del crimen e investigar, juzgar y condenar a los responsables materiales e intelectuales del secuestro y asesinato del periodista.
De acuerdo con la información recibida, Barrow, quien era conductor del programa televisivo ‘Aníbal Barrow y nada más’, trasmitido por Globo TV, fue secuestrado por sujetos armados el 24 de junio en la ciudad de San Pedro Sula, departamento de Cortés. El periodista se encontraba en su automóvil junto a dos familiares y un chofer, cuando desconocidos habrían tomado control del vehículo y, luego de liberar a sus acompañantes, lo habrían secuestrado. El vehículo habría sido hallado horas más tarde con rastros de sangre e indicios de disparos.
Las autoridades iniciaron una intensa búsqueda para hallar al periodista, quien finalmente fue encontrado el 9 de julio en las inmediaciones de una laguna en el municipio Villanueva. Según lo reportado, el cuerpo del periodista estaba mutilado y parcialmente quemado. Las autoridades policiales han informado que hay cuatro sospechosos detenidos y orden de captura contra otras cuatro personas por su presunta vinculación con el crimen.
Para la Relatoría Especial es fundamental que el Estado hondureño esclarezca la causa de estos crímenes, identifique, procese y sancione a los responsables, y adopte medidas de reparación justas para los familiares de la víctima. La Relatoría Especial insiste al Estado en la necesidad de crear cuerpos y protocolos especiales de investigación, así como mecanismos de protección destinados a garantizar la integridad de quienes se encuentran amenazados por su actividad periodística. Ante la serie de asesinatos cometidos contra comunicadores en Honduras, resulta imprescindible que el Estado investigue de forma completa, efectiva e imparcial estos crímenes que afectan a toda la sociedad hondureña.
El principio 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la CIDH señala: "El asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada".
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a fin de estimular la defensa hemisférica del derecho a la libertad de pensamiento y expresión, considerando su papel fundamental en la consolidación y el desarrollo del sistema democrático.