Discursos

SEÑORA MINISTRA DE RELACIONES EXTERIORES DE HONDURAS, EMBAJADORA MARÍA DOLORES AGÜERO LARA
INTERVENCIÓN DE HONDURAS DURANTE LA VIGÉSIMO NOVENA REUNIÓN DE CONSULTA DE MINISTROS DE RELACIONES EXTERIORES DE LA OEA

31 de mayo de 2017 - Washington DC


Estamos reunidos aquí, convocados por la grave situación que se vive en la República Bolivariana de Venezuela, país hermano, fundador de esta organización hemisférica.

Desde hace algunos años hemos venido observando que las condiciones de vida en esa hermana República han venido sufriendo un proceso de degradación continua en distintos campos; debido principalmente a la falta de acuerdos básicos de gobernabilidad democrática, tampoco ha sido posible resolver los problemas económicos fundamentales que abaten a la generalidad de la población.

En los últimos meses, esas condiciones se han agravado y el Gobierno lejos de buscar consensos y acuerdos con la oposición política, y con otros grupos sociales, ha intentado imponer sus puntos de vista con procedimientos que erosionan la institucionalidad del Estado de Derecho.

Cuando se intentó sustituir el poder legislativo por otro poder del Estado en abierta violación al ordenamiento jurídico nacional, a los tratados internacionales, a la Carta Democrática Interamericana y a los principios más elementales que regulan el funcionamiento de la democracia representativa en los Estados Modernos, esta Organización se dio a la búsqueda de soluciones viables con la participación de todos los sectores involucrados.

La última disposición del Gobierno de convocar a una Asamblea Constituyente, exacerba los ánimos y agrava la crisis.

No es cierto que frente a un problema tan grave como el que vive Venezuela esta Organización no puede hacer nada. Una situación de comprobada gravedad como la que vive Venezuela no puede ni debe ser ajena a la OEA una Organización, que nació precisamente para dar respuesta, para concitar el compromiso solidario, para resolver conflictos que pudiesen ocurrir y amenazar a la colectividad y a los valores esenciales que tenemos en común: La Democracia, la Paz, la Libertad, y el respeto irrestricto a los Derechos Humanos.

Todos esos valores están puestos en precario en la hermana República Bolivariana de Venezuela, que vive una situación grave y que requiere de una posición nuestra, coherente con el desafío que enfrentan esos valores que acabo de mencionar.

También quiero reconocer los esfuerzos que se han hecho en el marco de la institucionalidad del sistema interamericano, y por países amigos para contribuir a resolver la situación de Venezuela, el cual hemos venido acompañando desde un inicio.

Consideramos necesario que esta Organización, usando los medios diplomáticos que nos sugiere la Carta Constitutiva, la Declaración de Quebec y la misma Carta Democrática, exprese al Gobierno de la hermana República Bolivariana de Venezuela la necesidad de que realice elecciones generales a la mayor brevedad posible. Esas elecciones deberán ser acompañadas por esta Organización, usando toda su capacidad para apoyar el proceso y observar el mismo, lo cual daría garantías suficientes a todos los sectores involucrados.

Cualquiera que sea el resultado de esas elecciones la Organización deberá continuar apoyando todos los esfuerzos en marcha para restablecer completamente el orden democrático y el imperio de la Constitución, y las Leyes en esa nación hermana.

En tanto ese proceso se realiza, la Organización, con las mismas gestiones diplomáticas antes mencionadas deberá coordinar un esfuerzo de ayuda humanitaria, que permita llevar a la población venezolana ayuda de emergencia para atender necesidades básicas de atención sanitaria, transporte, alimentos y otras relacionadas.

El gobierno de Honduras ofrece su ayuda porque cree firmemente que no debe esperarse a que continúe y se agudice la crisis venezolana para que se encuentre la solución en medio de una tragedia. En américa hay ejemplos de grandes crisis que, mediante acuerdos políticos, las partes han encontrado soluciones y formulas exitosas y estos países han retomado rumbos de paz, democracia, desarrollo y bienestar.

Honduras es un país amigo de la nación venezolana y está a disposición de las partes en Venezuela para ayudar en lo que se nos requiera.

La posición del Gobierno de Honduras ante la situación venezolana privilegia el respeto a los derechos Humanos, la solución democrática y pacífica, y el auxilio humanitario.

Honduras si cree que corresponda que esta organización haga sus más prontas y hábiles gestiones diplomáticas y que presente sus más firmes exigencias democráticas, porque reconocemos que en Venezuela, un país miembro y amigo, hay una crisis muy grave que se agudiza cada día, y que lo que hagamos o dejemos de hacer, como países y como organización tendrá efectos y consecuencias en Venezuela, en la organización y en nuestra región.

¿Porque los países de nuestra américa reunidos en esta organización no podemos llegar a un consenso para pedir a un país miembro que llame a elecciones libres y observadas, que son el instrumento básico de la democracia? ¿Porque esta organización democrática no puede pedirles a las partes que busquen una solución negociada, constitucional, pacífica y democrática a la crisis en Venezuela?

Confiemos, en que esta vez, sepamos actuar con la sabiduría, el sano juicio, la moderación y el equilibrio que están estipulados en el propio texto de la Carta (de la OEA). Que usemos sus recursos para contribuir a solucionar este problema y precautelar otros. No contribuyamos a que se cometan injusticias, que se agraven enfrentamientos y perpetúen desencuentros entre hermanos, por el bien de Venezuela y de nuestra región.

Quiero concluir citando las palabras del Presidente Juan Orlando Hernández Alvarado: “Busquemos la paz para el Pueblo de Venezuela, son nuestros hermanos”

Muchas gracias,