Discursos

JOSÉ MIGUEL INSULZA, SECRETARIO GENERAL DE LA ORGANIZACION DE LOS ESTADOS AMERICANOS
VISITA DEL PRESIDENTE DE EL SALVADOR, SR. ELÍAS ANTONIO SACA

27 de noviembre de 2007 - Washington, DC


Quiero extenderle, señor Presidente, la más cordial bienvenida a esta sesión Protocolar Especial del Consejo Permanente de la Organización en esta segunda ocasión en que usted nos concede el privilegio de visitarnos.

Esta Organización, y yo mismo, reconocemos en usted a una persona que más allá de sus relevantes condiciones de liderazgo y del sólido estilo de conducción que ha impuesto al mando de su país, ha estado también permanentemente vinculado a los valores, los programas y políticas que lleva adelante esta Organización. Especialmente aquellos que impulsan los más elevados valores de la convivencia humana, los derechos humanos y también, por razones profesionales, la libertad de expresión, por cuya defensa se ha destacado a lo largo de su vida y también como Presidente.

También han sido importantes sus aportes a la actividad económica y al desarrollo económico en su país, vinculando el sector público y el privado por intermedio del foro conocido como Encuentro Empresarial de la Empresa Privada.

Pero creo que lo más importante de su gobierno –y que yo sé que usted siempre quiere destacar- además de las libertades de mercado y la reforma fiscal, son sus políticas sociales en los ámbitos del combate a la pobreza y el impulso a la educación, la salud y un nuevo trato a los migrantes. Especialmente aquellas que se expresan en iniciativas como Red Solidaria, FOSALUD, FOMILENIO, Plan 2021, y la obra humanitaria que se realiza por intermedio de la Secretaría Nacional de la Familia. Ellos constituyen el sello que distinguirá a su gobierno.

Lo felicitamos por esa enorme disposición a considerar y a poner por delante siempre los problemas de los más pobres de su país. Y también porque ha mostrado que ello es perfectamente compatible con importantes ritmos de crecimiento económico, que el año 2006 alcanzaron la tasa más alta de los últimos diez años. Igualmente se debe destacar el efecto que ese crecimiento está teniendo en las exportaciones y la inversión pública del sector agropecuario industrial, y en áreas tan importantes como la red vial.

Usted ha emprendido hace pocos días una nueva tarea, que es realizar el próximo año en su país una Cumbre Iberoamericana sobre la juventud, tema que también preocupa significativamente a nuestra Organización. Por ello estamos más que disponibles a apoyarlo en lo que sea necesario para que esa empresa sea coronada con éxito.

Sabemos que usted conoce perfectamente los problemas de la juventud, no solamente en su país sino en toda América. Problemas que resume bien el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo cuando nos informa que uno de cada cuatro jóvenes en nuestra región ni trabaja ni estudia. Sin duda una cifra dramática. Ciertamente los problemas de nuestra juventud son los problemas de nuestra sociedad: problemas de injusticia, de pobreza, de atraso, de falta de educación. Estamos seguros que con su liderazgo, el próximo año, el año que todos queremos que sea el año de la juventud, arrojará resultados muy significativos.

Tenemos mucho gusto en recibirlo y escucharlo señor Presidente.

Muchas gracias