Como podemos constatar estamos muy activos en el tema de Seguridad Pública en la región, es mucho lo que podemos hacer y, como Organización, estamos atentos en hacerlo ya que este tema afecta profundamente las Américas. Las causas, algunas de ellas como la marginación y la pobreza son difíciles de revertir a corto plazo, pero sí es posible actuar rápidamente en aspectos como la mejora en la capacitación de las fuerzas de seguridad en nuestros países. La situación de inseguridad que vive nuestra región se ve agudizada en muchos casos por la falta de formación de nuestros policías, lo que impide avanzar de forma adecuada en actividades de prevención y combate al delito.

En la actualidad, uno de los principales desafíos que enfrentan nuestras sociedades modernas es el poder dar respuesta eficiente y eficazmente al fenómeno del crimen y la violencia, por supuesto dentro un marco de respeto al Estado de Derecho y de gobernabilidad democrática, salvaguardando los derechos fundamentales de los ciudadanos.

En este sentido, el rol que cumplen las instituciones policiales en la prevención, control e investigación del delito es de suma importancia. La formación y capacitación permanente, introduciendo el uso de herramientas tecnológicas y definiendo claramente la gestión, estrategias y metodologías para la acción policial, juega un rol clave.

Concientes de la necesidad de promover políticas públicas de seguridad que cumplan con lo anterior, la Secretaria General de la OEA, está impulsando programas de formación y capacitación policial en la región. El Departamento de Seguridad Pública de la Subsecretaría de Seguridad Multidimensional de la OEA se encuentra promoviendo el Programa Interamericano de Capacitación Policial-PICAP- dentro del cual la ejecución de este curso sobre "Accountability y Modernización Policial".

Sin duda este vínculo de Cooperación entre las dos instituciones redundará en beneficios para la región, mejorando el proceso de transferencia de información y buenas prácticas para tener herramientas en la toma de decisiones cuando se enfrenta a situaciones de crisis de seguridad.

El rol positivo de la PICH y su modelo ejemplar en la región, permitirá la transferencia de experiencias desde esta institución, para que diversas policías de las Américas se capaciten y puedan ser agentes de cambio tanto a nivel local, nacional, como regional.

Quisiera también informarles acerca de otra iniciativa que estamos impulsando en la OEA: la creación de la Academia Interamericana de Policía, como órgano especializado de la OEA, con sus propios estatutos, reglas de procedimientos, y presupuesto, que será por naturaleza multilateral, asegurando la cooperación Inter Americana es esta materia, y se basará en las mejores prácticas y recursos humanos especializados en la región.
La Academia Interamericana de Policía sería un foro académico, técnicamente independiente, donde civiles y oficiales de la policía al más alto nivel puedan recibir entrenamiento intensivo en varias materias, permitiendo la profesionalización de las fuerzas policiales en sus respectivos países. Será un foro de discusión, identificación, análisis y diseminación de las mejores prácticas relacionadas con la capacitación policial.
Todos los Estados Miembros de la OEA podrán participar en el manejo y direccionamiento de la Academia Interamericana de Capacitación Policial. Contará con una estructura sencilla y con presupuesto propio, separado del presupuesto regular de la Secretaría General de la OEA.
El 17 de Septiembre pasado, propuse ante la Comisión de Seguridad Hemisférica de la OEA, otra iniciativa importante, la realización de la Primera Reunión Ministros Responsables de la Seguridad Pública en las Américas. Esta reunión se celebrará en México, los días 7 y 8 de octubre de este año. Es importante notar, que esta es la primera vez que se reunirán a nivel regional los ministros encargados de este importante tema, ya que han habido reuniones, pero estas han sido a nivel subregional.

Esperamos transformar esta Reunión de Ministros de Seguridad Pública en un foro político y técnico permanente a través del cual todos los Estados Miembros puedan compartir experiencias y visiones para coordinar acciones para disminuir la violencia y la criminalidad, tomando a los hombres y mujeres de nuestros países como los destinatarios primarios de nuestras intervenciones.

Estamos trabajando con la Coalición Interamericana para la Prevención de la Violencia, una alianza de las instituciones multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo, la Organización Panamericana de la Salud, el Banco Mundial, PNUD, UN-Hábitat, y agencias del gobierno de Estados Unidos como USAID, que tienen la convicción que uniendo esfuerzos y compartiendo información pueden promover y apoyar proactivamente iniciativas en el área de prevención de violencia en la región. La Coalición está desarrollando un documento que será un importante insumo para la Ministerial, con propuestas concretas, basadas en:

 Promover el desarrollo de información y sistemas;
 Introducir en todas las propuestas de desarrollo un análisis de impacto en materia de violencia;
 Involucrar al sector privado para que asuman un papel mas activo en las tareas de disminución de la violencia y la criminalidad – de las cuales se beneficiarán directamente;
 Mejorar la capacidad y la eficiencia de nuestras instituciones judiciales para que los procesos sean más acelerados y la encarcelación sea realmente un último recurso;
 La necesidad de tener una buena idea del costo directo e indirecto de la violencia. En un reporte del año 2005 del Banco Mundial el 80% de las empresas encuestadas ven en el crimen como una de las barreras importantes para su desarrollo. Sabemos que se han hecho estudios y que hay problemas metodológicos, pero es necesario retomar este tema.

El próximo jueves 8 de mayo, firmaremos un Acuerdo entre la Secretaría General de la OEA y el Gobierno de Chile, a través del Ministerio de Justicia, para la realización de la Segunda Reunión de Autoridades Responsables de las Políticas Penitenciarias y Carcelarias de los Estados Miembros de la Organización de los Estados Americanos, que se llevará a cabo en Valdivia, Chile del 27 al 29 de agosto de 2008

Desde hace varios meses, el Ministerio de Justicia de Chile, a través de la Oficina de Relaciones Internacionales y Cooperación y el Departamento de Seguridad Pública de la Secretaría de Seguridad Multidimensional, vienen trabajando en la organización de la esta Segunda Reunión de Autoridades Responsables de las Políticas Penitenciarias y Carcelarias.

El tema carcelario es de sumo interés para la OEA como foro político de la región. Los problemas que enfrentan los sistemas penitenciarios en la región son graves: la sobrepoblación carcelaria, las políticas de endurecimiento de penas, la necesidad de definir una política integral de rehabilitación penitenciaria y post penitenciaria, entre otros. Estos temas son parte importante del debate público y son espacios donde hay que trabajar.

El sistema carcelario debe situarse como un pilar de las políticas de seguridad. Es necesario que en el marco de esta reunión podamos plantear algunos desafíos con los que se enfrenta el sistema carcelario de los países latinoamericanos y profundizar en el intercambio de información y experiencias y en el fortalecimiento de la cooperación mutua.

Es importante intercambiar experiencias tanto positivas como negativas en materia carcelaria en la región. Chile cuenta con experiencias importantes para compartir en el campo de las alianzas público privadas relacionadas con la concesión de cárceles y en el tema de adolescentes y jóvenes privados de libertad. La nueva Ley de Responsabilidad Penal Juvenil, que permite la aplicación de medidas judiciales de prevención, rehabilitación y condena para los menores de 18 años que cometan delitos, obedece a las políticas de modernización del Estado y, especialmente, de la Justicia chilena.

Como pueden ver, La OEA, está muy activa en los principales temas de seguridad pública de la región, promoviendo iniciativas innovadoras, y aprovechando la voluntad de los países miembros de poner a la disposición del continente, sus experiencias, sus conocimientos, e iniciativas de cooperación horizontal, como lo está haciendo el gobierno de Chile y la Policía de Investigaciones de Chile con la realización de este evento.

Quisiera agradecer especialmente a la PICH por su generosidad y al Departamento de Desarrollo Humano de la Secretaría General de la OEA, a través del Programa de Becas por haber permitido que 17 países de la región con la participación de 24 oficiales pudieran participar en este evento.

Muchas gracias