Quiero agradecer la presencia de todos ustedes en este muy importante evento sobre la promoción de una conducta empresarial responsable y sostenible en las Américas. Estamos realizando esta conferencia junto con la finalización de la Competencia Talento e Innovación de las Américas (TIC Américas), que inauguramos ayer como parte de nuestras actividades preliminares a la Asamblea General. No es coincidencia, porque estamos comprometidos con el Programa Hemisférico de Promoción de la Responsabilidad Social Empresarial en América Latina y el Caribe.

El tema de la responsabilidad social es muy fundamental para nosotros y también en la competencia TIC Américas. Este año incluimos algunos temas que dicen relación con los temas de responsabilidad social.

Aprovecho de agradecer a PepsiCo América Latina que ha auspiciado este evento, y que además ha puesto mucho énfasis en temas de responsabilidad social, introduciendo una nueva temática en el TIC, cual es el “Eco-Challenge” –ustedes vieron ayer algunos stand que están compitiendo en esa categoría de “desafío ecológico”- ligado en su mayor parte al tema del agua, su conservación y uso de manera más eficiente y central. Nuestros agradecimientos a PepsiCo.

Nuestra Asamblea General ha instado a los gobiernos a que promuevan programas e iniciativas sobre responsabilidad social de las empresas, con especial énfasis en sus cadenas de valor, adquiriendo mayores conocimientos sobre los actuales principios voluntarios -global compact- y los lineamientos reconocidos internacionalmente, así como sobre las iniciativas del sector privado en esta área. Es lo que estamos intentando desarrollar aquí.

Los invitamos a examinar este tema del concepto de responsabilidad social empresarial más allá de una perspectiva de negocios. Nosotros sostenemos que la responsabilidad social es también un buen negocio; permite promover mejor los negocios de la empresa en un clima mucho más amable y en contacto con todos los “stakeholders” así como con la comunidad, pero significa también cumplir con un deber colectivo, involucrar a las empresas en el desarrollo de sus sociedades y aliarse con otros sectores de la sociedad para cumplir con esos objetivos.

La responsabilidad social empresarial es más que una filantropía, porque dice relación con hacer un trabajo social vinculado o darle una dimensión ya sea ecológica, social o laboral, darle una dimensión de responsabilidad a las tareas que la empresa debe realizar. No es simplemente una donación al margen de los objetivos de la empresa, sino que pretende involucrarla, darle a la empresa una dimensión de responsabilidad social. Por lo mismo, no estamos hablando tampoco de una condición de buena conducta; estamos hablando de un desafío fundamental para ser parte de una estrategia de desarrollo global con una particular estrategia de negocios. Sólo los buenos empresarios y los buenos administradores pueden lograrlo, y los que están aquí, PepsiCo y otros, están logrando precisamente eso y con ello invitan a otros empresarios a intentarlo.

Como tenemos acá una cierta cantidad de jóvenes que empiezan la tarea empresarial, es bueno que lo hagan con esa visión, con esa imagen de que la empresa cumple, además de una tarea fundamental productiva, una responsabilidad social con la sociedad en la cual se desarrolla.

Hablo aquí de todos los empresarios. Muchas veces se piensa que este es un tema de las grandes corporaciones. Pues no; el 95 por ciento de las empresas de nuestra región son micro-empresas, pequeñas y medianas empresas. Contribuyen con un poquito menos del 50 por ciento al Producto Interno Bruto regional, pero son la fuente del 70 por ciento del empleo, y es fundamental entonces incentivar también una actitud responsable y sostenible en las empresas pequeñas y medianas.

La OEA, en cooperación con el Banco Interamericano de Desarrollo y Forum Empresa, desarrolló una red de responsabilidad social empresarial entre 2006 y 2007 en cuatro países: Brasil, El Salvador, Perú y Chile. El 2006 iniciamos una nueva etapa en el Caribe y hemos expandido más este programa, capacitando no sólo empresarios sino también a organizaciones no gubernamentales, medios de comunicación, consultores independientes y académicos.

A partir del 2007, junto con la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), la Asociación Caribeña de Industria y Comercio (CAIC) y la Fundación de Jóvenes Empresarios de las Américas (YABT), estamos llevando capacitación en la implementación de indicadores de gestión empresarial y en responsabilidad social empresarial a 19 Estados Miembros de la OEA, para empresas de América Latina y el Caribe.

Por cierto, gran parte de este trabajo es posible gracias al apoyo financiero del Gobierno de Canadá, mediante su Agencia Internacional de Cooperación al Desarrollo Internacional, de manera de permitirnos sensibilizar a un número cada vez mayor de empresas en esta fundamental tarea.

El taller que vamos a realizar hoy, así como la mesa redonda que se llevará a cabo simultáneamente, son parte de ese esfuerzo. El objetivo es continuar el proceso de capacitación y entrenamiento a las pequeñas y medianas empresas en la cadena de valor de la industria extractiva, en el tema de indicadores de gestión empresarial.

El objetivo de la mesa redonda es establecer una visión compartida de responsabilidad social empresarial entre diferentes actores, particularmente el extractivo, y plantear de manera conjunta los próximos pasos de implementación en la región, mediante alianzas público-privadas.

Quiero reiterar nuestro agrado por encontrarnos junto con el YABT, y esperamos que los jóvenes que están acá, además de mostrarnos su talento, emprendimiento y capacidad, también se interesen por esta dimensión fundamental de la vida empresarial que ustedes quieren aprender; una vida inserta en la comunidad, vinculada a los otros “stakeholders”, llámense trabajadores, diputados, sociedad civil, accionistas de empresas, etc.

Quiero agradecerle nuevamente en nombre de la OEA por realizar este doble evento, el TIC y este seminario, porque estamos dando así un buen ejemplo del esfuerzo que podemos realizar organismos internacionales, gobiernos y sector privado, unidos en el desarrollo de políticas públicas para atender las necesidades del conjunto de la sociedad.

El tema de la responsabilidad social empresarial, en el cual también están involucradas otras instituciones como el Banco Mundial, es un proceso que no se va a detener, se va a ir ampliando a lo largo de los años, y nos alegra mucho ser parte fundamental de él.

Muchas gracias.