Discursos

CÉSAR GAVIRIA TRUJILLO, SECRETARIO GENERAL DE LA ORGANIZACION DE LOS ESTADOS AMERICANOS
DURANTE LA CEREMONIA DE ENTREGA DEL PREMIO INTERAMERICANO AL LIDERAZGO, OTORGADO A SU EXCELENCIA GONZALO SÁNCHEZ DE OZADA, PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DE BOLIVIA POR LA FUNDACIÓN PANAMERICANA PARA EL DESARROLLO FUPAD

22 de abril de 1996 - La Paz


Sr. Presidente Sánchez De Lozada. Para el Secretario de la OEA es motivo de inmenso orgullo estar hoy aquí para hacerle este reconocimiento en nombre de la Fundación Panamericana para el Desarrollo, que hace 33 años trabaja en nuestro hemisferio con valiosas iniciativas en favor de las organizaciones sociales de base.

Pero mas que en nombre de ella, Yo quiero hablar en nombre de los pueblos de América, que lo tienen a usted de paradigma y portaestandarte de lo que los ciudadanos del hemisferio esperan de sus dirigentes.

Usted llego a la presidencia de esta nación por lo que representaba para el pueblo boliviano como emblema de seriedad, de internacionalismo, de vastedad de conocimientos de un hombre que, formado con su familia en la dura y valerosa escuela del exilio, uso su tiempo y energías para prepararse a sacar a Bolivia del estado de postración y caos económico en que se encontraba.

Bolivia, como tantos otros países de América esta todavía atrapada en rezagos de su pasado colonial, mezclados con una prolongación de las luchas de siglo XIX sobre formación de la nacionalidad, y todavía fuertes vestigios bastante arraigados de la ideología de la guerra fría, de las ideas en exceso estatistas y proteccionistas con las que todos los latinoamericanos enfrentamos nuestros problemas al terminar la ultima conflagración global.

Su paso por el Ministerio de Planificación en el gobierno de Víctor Paz Estensoro fue una experiencia pionera al lado de la chilena, pero esta por métodos democráticas, para devolverle a Bolivia su estabilidad económica, financiera, su equilibrio fiscal. En aquel momento tener el coraje de adoptar una política de esa naturaleza era no solo una rectificación histórica sino además, era ni mas ni menos que devolverle al país su viabilidad, que se había perdido en una atroz mezcla de populismo, militarismo, marxismo y una irresponsabilidad sin limites en el manejo de los asuntos financieros de estado, absurdamente justificada como reflejo de nuestros problemas estructurales.

Y aquella experiencia dejo grabada en el alma del pueblo boliviano, no simplemente un huella de popularidad, que es siempre efímera, sino la imagen de un hombre de carácter, decidido a hacerle frente a todas las vicisitudes, a todas las incomprensiones, a todos los atavismos, a los intereses creados a lo largo de décadas. Entonces el estado era una especie de botín que se repartía entre los grupos poderosos de todos los estratos, en las que los grupos económicos entendían su labor no como una de producir mas de manera eficiente, sino la de obtener del estado aranceles, cuotas, privilegios, prohibiciones, beneficios sin importar para nada el consumidor o ciudadano.

Pero yo seria injusto con su trayectoria y personalidad si me detuviera solo en la clarividencia de su pensamiento económico para destacar sus antecedentes como presidente. Usted entendió esa tarea de ajuste y estabilidad solo como una primera piedra para los cimientos de una nueva sociedad boliviana. El suyo no era solo un proyecto económico sino político y social llamado a sentar las bases de una Bolivia que fuera de veras capaz de romper las ataduras con el pasado en todos los ámbitos de su vida económica , política y social.

Por eso al buscar usted la jefatura del estado, el pueblo boliviano acogió su proyecto de llevar el país a la modernidad, a la participación, al fortalecimiento del estado en sus funciones esenciales de justicia, seguridad, educación, salud, descentralización, defensa de los derechos humanos y política social. Lo que usted denomino como El Plan de todos.

Su política de capitalización social, constituye una de las experiencias mas imaginativas y exitosas puestas en practica en todo el mundo en desarrollo. Esta siendo recogida en los mas remotos lugares de todos los continentes como ejemplo de equilibrio político de un uso totalmente responsable de los recursos públicos. Esta resuelve de plano la enorme injusticia acumulada a lo largo de los años con nuestros trabajadores, con un esquema de seguridad social generoso en el papel pero engañoso e irresponsable en la practica.

En la mayoría de otras naciones, los recursos de las denominadas privatizaciones simplemente ingresan al presupuesto y han sido usados para tapar huecos fiscales. Usted los ha capitalizado en favor de los trabajadores, incrementando de manera importante la tasa de ahorro de Bolivia, renunciando a cualquier uso mas vistoso o inmediato. Mas temprano que tarde el ciudadano encontrara el afortunado uso que se dio a estos recursos en beneficio de todos.

Su política de descentralización va mucho mas allá de este objetivo. Nuestro estado centralista y asfixiante no es una simple herencia como creen algunos con ideas de planificación de la post guerra, sino que se remontan a nuestro pasado colonial, a la lucha de la monarquía por mantener el control total del poder, a la desconfianza en cualquier poder local. Con toda clase de justificaciones políticas, religiosas, económicas y de interés nacional mantuvimos nuestros países a espaldas de la vitalidad municipal, del control ciudadano, de los ojos y los oídos de nuestro pueblo, de su capacidad para identificar sus problemas y soluciones.

Su programa es de participación ciudadana, no es entonces una simple descentralización de responsabilidades, ni consiste en que el estado central sea mas abierto a las quejas de las regiones. Es un compromiso con el fortalecimiento de la democracia, es una forma de acercar la administración al ciudadano y de promover su responsabilidad. Y es por sobre todo una forma de romper el monopolio estatal de la gestión publica.

Tenemos que reconocer que una de las grandes limitaciones para la aclimatación de la democracia representativa en América, era que esta carecía de una verdadera noción de participación. Las nuestras fueron siempre democracias elitistas u oligárquicas en las que solo en momentos excepcionales de tensión social el pueblo se sintió representado en sus decisiones. Todos esperamos que los comités de vigilancia locales aseguren el cumplimiento de las funciones municipales y de una buena prestación de los servicios públicos.

Su reforma educativa, esta basada en el carácter pluricultural multiétnico y multilinguístico del pueblo boliviano y en la necesidad de amoldar el funcionamiento del sistema educativo, a estas realidades. De manera simultánea constituye un notable esfuerzo para atender las necesidades de la modernización; para que los recursos humanos del país correspondan a la necesidad que tiene Bolivia de integrarse al resto de América.

Lo que usted está haciendo en Bolivia, Sr. presidente, corresponde a plenitud a la ideas consagradas en la Declaración de Principios y a los compromisos del Plan de Acción de la Cumbre de Miami que hacen de la creación del Área de Libre Comercio no una meta exclusivamente comercial, sino la expresión de valores económicos , políticos y sociales fundamentales de todos nuestros pueblos.

Todos los países son conscientes de que para avanzar en el proceso de integración en la próxima década, paralelamente con defender la reforma significativa de la economía que hemos logrado es igualmente crucial defender la democracia y sus libertades, luchar por la purificación de las costumbres políticas, hacerle frente a las diversas formas de violencia, mejorar la calidad de la política social.

A todo lo ancho de América, las economías mas abiertas, mas orientadas al mercado y mas balanceadas fiscalmente, con un estado mas concentrado en sus funciones, han demostrado su capacidad para incrementar la inversión social, producir mayores tasas de crecimiento económico y mejores empleos, condiciones necesarias para reducir la pobreza de una forma significativa.

Claro que todo esto seria insuficiente si la reforma no llega, como lo ha empezado a hacer en Bolivia , a la manera como el estado cumple sus funciones sociales, para que los recursos públicos de veras lleguen a los mas pobres y no se queden alimentando pesadas burocracias o desviándose a grupos económicamente privilegiados.

Pero la lucha contra la pobreza no dará frutos si no luchamos también, como usted lo esta haciendo en Bolivia por la defensa de los derechos humanos, por una mayor participación ciudadana, por el respeto a las minorías étnicas , que en el caso de Bolivia son mayorías, los derechos de la mujer y una mejor administración publica y de justicia.

En fin, Presidente Sánchez de Lozada, como usted bien lo ha impulsado en todas sus acciones de gobierno, la integración solo tiene sentido si se convierte en sinónimo de democracia, igualdad, prosperidad y dinamismo. Así lo ha entendido su gobierno y ello se refleja en su inquebrantable voluntad de avanzar por el camino que nos debe conducir al Área de libre Comercio de las Américas en el 2005.

Señor Presidente

En diciembre próximo, por su feliz iniciativa se celebrara , en Santa Cruz de la Sierra, la Cumbre de presidentes del hemisferio Americano sobre Desarrollo Sostenible. Se trata de una singular oportunidad para dilucidar los alcances, las limitaciones, las formas de consolidar el desarrollo sostenible como la política de los países de las Américas.

Desde la Cumbre de la Tierra, en Río de Janeiro, los acuerdos y tratados multilaterales hacen siempre referencia a esta concepción de desarrollo sostenible, que obtuvo su respaldo al mas elevado nivel político en dicha conferencia. En América nos falta comprometernos mas con un plan de acción, ya que aun hoy para algunos tiene un marcado sesgo ambientalista , mientras que para otros ha llegado incluso a justificar acciones depredadoras de los recursos naturales.

Pero en América, con su liderazgo presidente, no podemos tener dudas en que nuestro desarrollo económico y social no puede darse en detrimento de la base natural que lo sustenta. Es para partir de este entendimiento que todos nos reuniremos para reafirmar nuestro compromiso con el desarrollo sostenible y para acometer acciones en pos de su aprehensión.

Es esta una tarea que por decisión de nuestros países miembros la OEA ha decidido comprometerse a fondo y ello justifica la alta prioridad que le estamos dando a la Cumbre de Bolivia. Y en su realización partimos del supuesto de que existen diversos caminos posibles para alcanzar la meta del desarrollo sostenible y de que deben tenerse en cuenta las profundas diferencias existentes entre los países altamente desarrollados de la región y aquellos en vía de desarrollo, donde una parte sustancial de la población se encuentra en situación de pobreza extrema.

La cumbre constituye una enorme responsabilidad y su éxito dependerá en buena medida del acierto y dedicación con que los diversos actores participes en su proceso de preparación ejecutemos cabalmente nuestras responsabilidades.

El gobierno de Bolivia tiene, entre otros y además de todos los aspectos logísticos y de organización, el enorme reto de coordinar los diversos acuerdos que se someterán a consideración de la Cumbre. Hasta el momento se ha desarrollado una fructífera labor dirigida a definir la Agenda de la Cumbre, a cargo de la Secretaria bajo la dirección de Fernando Romero.

A principios del año, la propuesta de agenda fue sometida a la consideración de los gobiernos del continente, a través de una presentación que hiciera ante nuestro Consejo permanente el canciller Aranibar. Una vez que se obtengan los comentarios y recomendaciones de los gobiernos, se continuara trabajando simultáneamente en los procesos técnico y político, los cuales demandaran un alto grado de coordinación.

Todos esperamos que a través de la secretaria de la Cumbre Hemisférica se coordine el proceso de elaboración de los documentos que ahora se inicia, como la celebración de diversos talleres técnicos para su consideración. Esta función del Secretariado es particularmente importante dada la necesidad de armonizar las diversas instituciones que colaboran en este empeño de su gobierno.

En lo que a la OEA se refiere, estamos comprometidos en la preparación de la documentación técnica sobre bosques y energía, conjuntamente con el Banco Mundial, y en lo correspondiente a aguas conjuntamente con el BID. La OEA también deberá coordinar los informes de progreso concernientes a los avances alcanzados en la alianza de los países americanos en su lucha contra la contaminación y la alianza para el desarrollo sostenible de la energía, de conformidad con los mandatos de la Cumbre de las Américas. Además la OEA esta asociada al proyecto de participación social en la defensa del desarrollo sostenible con el apoyo del Departamento de Estado.

Esta tarea de la Secretaria de la Cumbre debe darse en estrecha sintonía con la Cancillería de Bolivia y con la OEA que son responsables del complejo proceso de consulta política que debe alimentar el proceso técnico de preparación de documentos.

Las consultas políticas intergubernamentales se están realizando en el seno del Consejo Permanente, para lo cual se ha establecido un grupo intergubernamental de trabajo bajo la acertada coordinación del embajador Carlos Casap. Estas consultas de las cuales depende el éxito del proceso político dependen en gran medida de la calidad de los documentos que se elaboren y de la oportunidad con la cual se entreguen.

Señor presidente. Usted me perdonara esta disgresión a la manera de Informe sobre nuestras tareas en relación con la Cumbre. Pero su empeño personal y el de todo su país para hacer avanzar a América por este sendero me obligan a reportar a usted. Con su enorme capacidad de mediación y liderazgo esta acción colectiva de los gobiernos y pueblos de América será un éxito de todos y en particular de su país

Señor presidente Sánchez de Lozada

Después de la cumbre de las Américas, todos los ciudadanos de este hemisferio hemos aprendido, como todas las sociedades en transición, que la euforia ilimitada que siguió al final de la guerra fría no era realista, que la globalización, la prosperidad, el progreso y la reforma económica eran tendencias permanentes e inevitables porque compartimos en lo fundamental unos valores económicos y políticos. Hoy sabemos que hay retrocesos, tropiezos económicos , políticos y sociales. Y por eso mismo es tan importante mantener un norte, saber encarar las dificultades y ofrecer a nuestros países una forma de ejercicio de las responsabilidades publicas que preserve los grandes objetivos de nuestra tarea colectiva.

En nombre de la Fundación Panamericana para el Desarrollo es un gran honor para mi hacerle entrega oficial del Premio Interamericano al Liderazgo al estadista, pero también al hombre de finísimo y penetrante humor, al padre de familia, al esposo de Doña Jimena, compañera inseparable y digna representante de las calidades de la mujer Americana. Que este reconocimiento sirva de ejemplo y estimulo a todos los que en las Américas buscamos hacer de este un continente de paz, libertad, justicia social, progreso y bienestar.