Comunicado de Prensa


INSULZA: LA DEMOCRACIA SIGUE ENFRENTANDO SERIOS DESAFIOS

  8 de diciembre de 2006

El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Jose Miguel Insulza, dijo hoy que los latinoamericanos siguen creyendo en la democracia como el mejor sistema político pero dudan de su eficacia para entregarles los beneficios económicos a que aspiran. Insulza hizo esta afirmación durante la sesión de apertura de la XXII Reunión del Parlamento Latinoamericano, que abrió sus sesiones esta mañana en Sao Paulo, Brasil.

Apoyándose en la encuesta de Latinobarómetro, que acaba de entregar sus resultados, Insulza sostuvo que aunque la democracia se encuentra en franco proceso de consolidación en el continente, subsisten serios desafíos para conquistar la confianza total de los ciudadanos. El crecimiento económico, la superación de la pobreza, los temas medioambientales, la integración, la seguridad y la gobernabilidad, constituyen para Insulza retos centrales a vencer para lograr que la democracia se exprese en los beneficios que la gente espera de ella.

Dijo Insulza que según la estimación de un 74 por ciento de los latinoamericanos, la democracia se considera el mejor sistema político, y recalcó que esta opinión surge de los países que han vivido procesos electorales. Pero advirtió sobre la importancia de “lograr que el crecimiento económico se traduzca en beneficios para la población, porque la percepción de la gente es que ese crecimiento no se traduce en mejor calidad de vida para el ciudadano común”.

El Secretario General Insulza sostuvo que “es difícil atenuar las condiciones de la pobreza sin crecimiento económico; y el único país de la región que ha mejorado su distribución del ingreso es Brasil; los demás países no lo han logrado. Por eso el crecimiento económico juega un papel tan importante”. Planteando una comparación en las cifras del ingreso per capita entre el mundo desarrollado y el subdesarrollado, dijo que en los últimos 30 años, éste ha crecido un 60 por ciento en Estados Unidos, un 50 por ciento en Europa, y sólo un 11 por ciento en América Latina.

“Es difícil plantearse objetivos de mejoramiento de la condición de vida de los más pobres cuando se crece tan poco, y hay que preguntarse entonces, en un período que crecemos bien, cómo retener este crecimiento y cómo repartir mejor su beneficio”, manifestó.

Podemos hacerlo, prosiguió, “pero tenemos algunas debilidades de carácter institucional que impiden que nuestros Estados hagan todo lo que deben en materia de crecimiento. Nuestro primer desafió, entonces, es el del crecimiento. El segundo, es la pobreza: tenemos un tercio de la población en condiciones de extrema pobreza, viviendo con dos dólares al día. No es lo que corresponde ni por el tamaño ni por las características del continente que no es el más pobre sino el más injusto, como dijo un ex presidente latinoamericano”.

El medio ambiente y la integración fueron señalados por Insulza como los siguientes desafíos para enfrentar. Sobre la cuestión medioambiental, citó una de las conclusiones de los ministros del hemisferio de esta materia, que en su reciente reunión en Santa Cruz, Bolivia, afirmaron que una de las grandes causas de la erosión y el deterioro del medio ambiente es la pobreza. Las condiciones de miseria en que viven millones de habitantes, dijo Insulza, provocan enorme daño a la calidad de vida general. “Nuestro desafió, por lo tanto, es mejorar el ambiente humano en que viven las personas”.

Sobre la integración dijo que ésta refleja una voluntad política a la que no se da instrumentos para materializarla. “Creamos instituciones y no las dotamos de poderes, sin que exista posibilidad de llevar a la práctica los acuerdos que se adoptan”. Nadie tiene disposición a asumir los costos de la integración; este proceso cuesta y nadie quiere pagarla en nuestro continente, apuntó.

La seguridad también fue mencionada por Insulza como otro gran desafió, denunciando que en nuestro continente se dan las mayores cifras de delito de todo el mundo. “El crimen va en aumento y eso desestimula la inversión”, advirtió.

Finalmente se refirió a la gobernabilidad, que según afirmó, “tiene relación con todo lo anterior; los ciudadanos creen en la democracia como la mejor forma de gobierno, pero los gobiernos no solucionan los problemas adecuadamente. Y eso hay que solucionarlo. Para mantener las tasas de empleo, América Latina debe crear 5 millones de empleos al año y estamos lejos de lograr esas cifras. La gente vincula el empleo al delito y muchas veces nuestros Estados no tienen capacidad para resolver este problema”.

No es sólo un problema de más Estado, advirtió Insulza, “sino de mejor Estado, de combatir la corrupción, la ineficiencia, la burocracia, pero al mismo tiempo de reconocer que sin un esfuerzo del sector público, difícilmente vamos a llegar mas allá”.

Referencia: C-273/06