Contexto


INAUGURACIÓN DE ASAMBLEA GENERAL DE LA OEA DESTACA DESARROLLO SOCIAL Y DEMOCRACIA FRENTE A LA INCIDENCIA DE LA CORRUPCION

  6 de junio de 2004

QUITO, Ecuador — El Presidente del Ecuador, Lucio Gutiérrez destaco hoy, al inaugurar la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), que el éxito de los nuevos diseños del desarrollo para el siglo XXI, va a depender de considerar al ser humano como “la premisa mayor de una propuesta de desarrollo integral de la especie humana”.

El mandatario ecuatoriano manifestó ante los cancilleres de las Américas, reunidos en el máximo foro hemisférico, que todos deben tener acceso a fuentes de trabajo estables, a salarios justos y a una capacidad de gasto que les permita vivir con dignidad y seguridad. Enfatizo que esto les permitiría llegar a ser “protagonistas activos, y no meramente pasivos de una sociedad verdaderamente progresista y solidaria”.

En torno al tema central del diálogo de cancilleres, el Presidente Gutiérrez destacó que la corrupción, que caracterizó de “una patología social”, menoscaba el desarrollo social y la democracia. Tras acertar que este flagelo desvía recursos que deben ser aplicados al desarrollo y para lograr un mayor bienestar para los pueblos, Gutiérrez hizo un llamado a orientar “nuestros máximos esfuerzos a fortalecer los mecanismos hemisféricos de combate a este mal, y de ser necesario, crear nuevos mecanismos, en donde todas las naciones se comprometan a perseguir los delitos de corrupción más allá de las fronteras”.

Reiteró el pleno respaldo del gobierno y pueblo ecuatoriano a la labor de la OEA en fortalecer y defender la democracia en la región. Asimismo, citó entre los significativos hitos de la OEA la adopción de la Carta Democrática Interamericana, la Declaración de Seguridad de las Américas, el seguimiento al proceso de cumbres hemisféricas, el fortalecimiento del Consejo Interamericano de Desarrollo Social, la mayor participación de la sociedad civil en las actividades de la OEA, y la Convención Interamericana contra la Corrupción y su Mecanismo de Seguimiento.

Por otra parte, el primer mandatario ecuatoriano reconoció la labor desempeñada por el Secretario General de la OEA, César Gaviria, durante sus diez años al frente de la máxima organización hemisférica. Agradeció a Gaviria “por su importante gestión y valiosas iniciativas desplegadas durante sus mandatos, los cuales han contribuido positivamente al fortalecimiento del sistema interamericano”.

Al intervenir en la inauguración de su última Asamblea General como jefe de la OEA, Gaviria subrayó que deja una Organización más relevante y más universal en sus objetivos políticos y “sin duda, la OEA se ha convertido en una institución que garantiza el equilibrio en las relaciones interamericanas”.

En un balance de la década en que ha estado al frente del organismo continental, Gaviria afirmó que “los hechos superaron nuestras mayores expectativas. Los problemas y desafíos a los que se enfrentan nuestros pueblos se han multiplicado de una manera exponencial, especialmente por la mayor interdependencia y la globalización”. Asimismo, hizo un llamado para concentrar las energías “no tanto en mirar el presente como otear el mañana”.

Gaviria, quien terminará su segundo mandato en septiembre próximo, reafirmó su convicción de haber dejado atrás un período de aislacionismo, rivalidades y desencuentros. “Muchas de las ataduras que en el pasado inmovilizaron a la OEA desaparecieron”. Dijo que el comienzo de su primer mandato—en 1994—se inició en medio de señales estimulantes sobre las posibilidades de un nuevo multilateralismo dentro de la OEA y sobre su capacidad de transformarse en un mundo que estaba cambiando vertiginosamente.

Destacó el esfuerzo de la OEA en fomentar una creciente participación tanto de la sociedad civil como del sector privado en el desarrollo de las actividades del organismo hemisférico.

Hizo hincapié en los importantes logros alcanzados por la diplomacia de la OEA en la resolución de controversias tales como entre Perú y Ecuador y entre Argentina y Chile, y se refirió al acuerdo suscrito para lograr el traspaso del Canal de Panamá, además de la decisión de Nicaragua y Honduras de llevar su contencioso a la Corte Internacional de Justicia.

Sobre el tema de Venezuela, señaló que se ha dado “un paso fundamental en el cumplimiento de los acuerdos de mayo de 2003, facilitados por la OEA, el Centro Carter y el PNUD, y que entonces le trajeron al país un clima de menos conflictividad política”. Destacó la labor en Colombia en el proceso de verificación de la desmovilización de grupos paramilitares y de su reinserción a la vida civil, y del mismo modo, expresó una insatisfacción de que no se ha podido resolver la crisis política en Haití.

Gaviria felicitó al gobierno del Ecuador por la propuesta de enfocar la actual Asamblea General en el desarrollo social y democracia frente a la incidencia de la corrupción. “La corrupción distorsiona la asignación de recursos para el desarrollo”, indico, agregando que “la pobreza, la desigualdad y la exclusión social constituyen entonces las más grandes amenazas y los retos principales para la democracia en nuestro hemisferio”.

Durante la inauguración se rindió homenaje, con un minuto de silencio, en memoria del ex Presidente estadounidense Ronald Reagan, quien falleció el día de ayer y también por las víctimas de las inundaciones recientes que azotaron a Haití y República Dominicana.

La Asamblea General clausura sus sesiones el 8 de junio tras una agitada agenda que incluye la elección del nuevo Secretario General de la Organización.

Referencia: AG-006-04