Discursos y otros documentos del Secretario General

DURANTE LA SESIÓN ESPECIAL DEL CONSEJO PERMANENTE PARA CELEBRAR LA “SEMANA INTERAMERICANA DE LOS Y LAS AFRODESCENDIENTES EN LAS AMÉRICAS”

25 de marzo de 2021 - Washington, DC

Cuando se aprobó en la Asamblea General de la OEA de 2016 el Plan de Acción del Decenio de las y los Afrodescendientes en las Américas (2016-2025) no imaginamos hasta qué punto nuestro compromiso con la población afrodescendiente se pondría a prueba apenas cuatro años después.

El Plan fue elaborado para adoptar “políticas públicas, medidas administrativas, legislativas, judiciales y presupuestarias para asegurar a las poblaciones afrodescendientes en las Américas el goce de sus derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos” y “corregir los legados de injusticias históricas ocasionadas por la esclavización africana”.

Al inicio de la pandemia, sabíamos que el impacto del virus en los afrodescendientes y otros grupos vulnerables iba a ser significativo. Es por ello que el Departamento de Inclusión Social elaboró la “Guía Práctica de Respuestas Inclusivas y con Enfoque de Derechos ante el COVID-19 en las Américas”.
La Red Interamericana de Altas Autoridades en Políticas para la Población Afrodescendiente (RIAFRO) de la OEA, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Relatoría Especial sobre Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (REDESCA) también advirtieron del impacto que tendría la pandemia en nuestras comunidades de afrodescendientes.

Pese a todos los esfuerzos contra el racismo, persisten prácticas discriminatorias que mantienen a esta población en la base de la jerarquía social de los países de las Américas.

Como resultado, muchos afrodescendientes experimentan violencia, sufren violencia, sufren inseguridad alimentaria y viven en condiciones de hacinamiento, con poco acceso al agua potable y sin saneamiento, lo que los predispone a una mayor incidencia de enfermedades y comorbilidades como diabetes, hipertensión arterial y obesidad.

Este cóctel de factores aumenta el riesgo de contraer COVID-19. A la fecha sabemos que cerca de 1,3 millones de personas en las Américas han muerto, unos 53 millones han contraído el virus y que la mayoría pertenecen a los grupos más vulnerables.

Este año, la Organización celebra por cuarta vez la Semana Interamericana de los y las Afrodescendientes en las Américas bajo el tema: Poner Fin al Racismo Como Legado de la Esclavitud: Un Imperativo para Fortalecer la Justicia y la Resiliencia en Comunidades Afrodescendientes en las Américas, de cara al Covid-19.

Llamamos a los Estados miembros a cumplir con las metas del Plan de Acción y a seguir trabajando para poner fin al cruel legado de la esclavitud.

Es un tema cultural, es un tema social, es un tema político, es un tema en el cual no podemos mirar para otro lado, no podemos pretender que no es con nosotros, no podemos pretender que no tenemos nada que ver. Tenemos mucho de deuda, todos nuestros países en el hemisferio tienen una enorme deuda al respecto, no nos hemos puesto al día.

Cuando hablamos de pobreza, a pobreza tiene color. Cuando hablamos de violencia, la violencia la sufren fundamentalmente las personas afrodescendientes.

No es posible seguir admitiendo esta situación. No es posible pretender que esta situación puede seguir un segundo más sin asumir el máximo compromiso político, sin asumir el máximo compromiso social y sin asumir el máximo compromiso cultural que todos y todas debemos a una solución a este tema.

Muchas gracias.