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7.2 Zonas de uso forestal

.1 Cordillera Fronteriza (17)
.2 Zona forestal de Metapán (12)
.3 Cadena Costera (18)
.4 Otras áreas forestales

Las tierras de estas zonas son marginales tanto para los cultivos anuales y permanentes, como para la ganadería. Comprenden áreas seriamente erosionadas, y necesitan entrar en un proceso de recuperación de vegetación y suelos. También se han tomado en cuenta la calidad del desarrollo forestal en el terreno y la perspectiva para el más pronto rendimiento en cortas selectivas. Sin embargo, en todo el territorio existen áreas esparcidas con mayor o menor grado de vocación forestal.

Las zonas cafetaleras abarcan 1065816 hectáreas. Las categorías de tierras que tienen vocación forestal son las zonas de recuperación y las de reservas nacionales.

.1 Suelos

Los suelos pertenecen principalmente a las siguientes asociaciones: Latosoles Pardo Forestales y Arcillo Rojizos con topografía alomada a muy alomada; Latosoles Arcillo Rojizos y Litosoles; Litosoles y Rigosoles; Podsólicos Rojo-Amarillentos y Litosoles, y Pantanos.

a. Latosoles Pardo Forestales y Arcillo Rojizos

Esta asociación ocurre en las montañas volcánicas y en terrenos altos fuertemente disectados. La topografía predominante es alomada o montañosa, y muy quebrada a lo largo de los cursos precipitados de drenaje. El material basal está formado, principalmente, por cenizas volcánicas no consolidadas, de textura mediana a gruesa con intrusiones de corrientes de lava; a mayores profundidades hay gruesos mantos de materiales piroclásticos consolidados.

b. Latosoles Arcillo Rojizos y Litosoles

Son áreas montañosas fuertemente disectadas de las zonas intermedias y altas, y están compuestas de cimas onduladas a alomadas asociadas con faldas empinadas. Los estratos inferiores son más o menos intemperizados, de formaciones piroclásticas máficas y lavas de la época del pleistoceno y del terciario. Existe un complejo de suelos profundos, moderadamente profundos y superficiales, con pedregosidad variable. Los mejores suelos tienen horizontes superficiales oscuros, friables y francos, y son relativamente altos en contenido de material orgánico. El subsuelo es franco, de color gris rojizo a pardusco, en bloques débiles a fuertes sobre materiales volcánicos intemperizados. Los suelos más pobres varían desde afloramientos rocosos hasta suelos con intemperización profunda o formaciones volcánicas de materiales sueltos con horizonte superficial de delgado a grueso y a veces con subsuelo intemperizado. Los suelos predominantes son moderadamente ácidos y algunos pueden ser fuertemente ácidos. Tienen una saturación de base de media a alta. La fertilidad es de baja a moderada. El peligro de erosión acelerada es alto, razón por la cual deberían dedicarlos a usos forestales.

c. Litosoles y Regosoles

La fisiografía está formada por montañas volcánicas y terrenos elevados, de ondulados a muy accidentados. La topografía local es muy quebrada, con relieve que varía de moderado a alto, y estratos inferiores poco intemperizados de toba consolidada, lava y escoria máfica, mezclada a menudo con cantos rodados y guijarros. Se incluyen también las malpaiseras o flujos de lavas recientes, con o sin vegetación. Los suelos son complejos, no diferenciados, de superficiales a profundos, franco arenosos a franco arenoso-gravillosos, de moderados a muy pedregosos. En la superficie se encuentran a veces suelos poco desarrollados, y en otros casos existe una acumulación de materia orgánica. En algunas áreas predominan los afloramientos rocosos. Algunos son muy permeables y a menudo sufren de sequía, y otros son muy superficiales sobre roca impermeable. En estas áreas se incluyen algunas intrusiones de Regosoles de textura fina.

d. Podsólicos Rojo-Amarillentos y Litosoles

El paisaje fisiográfico está compuesto por montañas fuertemente disectadas con relieve alto; en las zonas templadas intermedias y altas existen capas inferiores de lavas piroclásticas endurecidas, estratificadas, plegadas y falladas. En muchos lugares estas capas están fuertemente intemperizadas o cubiertas por mantos de roca no consolidada, predominando las pendientes fuertes y muy fuertes. Las partes más altas de estos suelos tienen un ambiente continuamente húmedo, aunque existen dos estaciones que son la húmeda y la seca.

Son suelos muy variables; los más desarrollados tienen horizontes superiores de color claro; son moderada a fuertemente ácidos sobre subsuelos de textura más fina y de color rojo o gris amarillento. Los horizontes superiores son oscuros en algunos lugares, con alto contenido de materia orgánica sobre subsuelo arcilloso, pardo o pardo amarillento. Los suelos más extensos de la unidad son poco profundos, pedregosos y poco desarrollados. El peligro de erosión excesiva es grande. Algunas de las tierras más altas que no son muy accidentadas pueden ser apropiadas para cultivos perennes. La mayor parte de estos suelos deben dejarse para usos forestales. Gran parte del área es apropiada para pinares.

e. Suelos Halomórficos

Son suelos de áreas bajas, adyacentes al mar y a los esteros, inundables por las mareas altas, y cubiertas en su mayoría por mangle. Se incluyen canales estrechos y pequeñas áreas secas en playas arenosas de mar. Las capas inferiores son comúnmente arenosas o areno-limosas de origen marino.

El drenaje en general es muy pobre. Permanecen mojados durante todo el año, pero las áreas angostas de las playas son muy áridas en la estación seca. Existen zonas rehabilitadas que actualmente se encuentran motivadas de cocoteros en explotación turística. Los suelos pertenecen al Grande Grupo de suelos Halomórficos. Predominan los suelos de textura variable, desde limosos a franco arenosos. El color de los suelos superficiales es grisáceo oscuro, y los subsuelos son oliváceos, de claro a oscuro y moteados. Por lo general las capas inferiores están formadas por estratos de arena fina de origen marino. Estos suelos tienen una gran cantidad de sales debido a la influencia marina.

En base a la "Investigación preliminar de las posibilidades de conservación del suelo y del agua en El Salvador", se han determinado zonas de reforestación. Es en extremo urgente la creación de bosques nacionales en los cuales se pongan en práctica las medidas necesarias de plantación, conservación y utilización racional de los bosques. Estas tierras tienen las siguientes características: son de baja productividad en términos de rendimientos de madera por hectárea; requieren medidas especiales de inversión para restaurar la productividad, que está lejos de lo que se puede esperar bajo la iniciativa privada, lo que incluiría obras tales como diques o terrazas para reducir la erosión y la sedimentación. El uso de prácticas impropias de manejo resulta en fuertes daños en tierras situadas en las elevaciones más bajas. Un ejemplo es la excesiva sedimentación en la Presa 5 de Noviembre, resultante del uso impropio y falta de protección de las tierras altas; la corta de madera tiene que ser modificada y en algunos casos restringida para reducir el daño de la erosión.

En la frontera norte, en parte del departamento de Chalatenango, los límites considerados siguen más o menos el curso del río Lempa, aguas abajo desde Cítala hasta un punto donde el río tiene un corto viraje hacia el sur. Dichos límites se extienden de inmediato en una vuelta tendida hacia el noroeste, hasta la línea fronteriza internacional con Guatemala.

Esta área está afectada grandemente por deslizamientos de tierra, cárcavas y erosión lateral. Los sedimentos han obstruido las cuencas aumentando el nivel de los torrentes, y los sedimentos de arrastre llenaron los cauces de los ríos ocasionando inundaciones en las partes bajas. La erosión es alarmante en toda la zona fronteriza, que actualmente se está extendiendo incluso hasta terrenos situados a alturas superiores a 1000 metros.

Las elevaciones varían de 900 a 2418 metros en la cumbre de Montecristo. Las vertientes son casi todas en precipicio. Los suelos predominantes son Podsólicos Rojo Amarillentos y Litosoles. Se encuentran depósitos de alto contenido calizo.

.1 Cordillera Fronteriza (17)

En la Cordillera Fronteriza se encuentran varios tipos de bosques nacionales, entre los que cabe mencionar el Bosque Nacional de Ahuachapán, el Bosque Nacional de los Sisimiles y el Bosque Nacional de Torola.

.1 Bosque Nacional de Ahuachapán

Hacia el occidente del departamento de Ahuachapán, a unos siete kilómetros al noroeste de la cabecera departamental, en los nacimientos de algunos afluentes pequeños del río Paz, existen vastas extensiones formadas por varias propiedades pequeñas y esparcidas. El carácter de la región es abrupto, pedregoso e irregular, y el suelo está tan erosionado que la gente no obtiene ningún producto para su subsistencia. Allí hay extensas áreas cubiertas de bosques que necesitan una inmediata extensión cultural y crece una amplia variedad de árboles que abarcan prácticamente todas las especies comerciales importantes del país, así como otras de importancia solamente local.

.2 Bosque Nacional de los Sisimiles

Comprende aproximadamente 40000 hectáreas, y se localiza en la parte noroeste del departamento de Chalatenango. Al oeste limita con el río Lempa, al norte con la frontera hondureña, al este, siguiendo un curso tortuoso, con el río Sumpul, hasta cerca de San Fernando, mientras que al sur sigue más o menos la intrincada línea de nivel de 900 metros de altura de las montañas, en las cuales está el área central del bosque. Las elevaciones varían de 900 a 2700 metros sobre el nivel del mar. Los suelos predominantes son los mismos que los de Metapán-Citalá. Las especies más comunes en el área son el pino, el roble y un poco de liquidámbar.

La creación de un bosque nacional en esta área tendría el propósito fundamental de la conservación, protección y mejoramiento de la subcuenca de la Presa 5 de Noviembre, y además permitiría mantener la capacidad de generación de energía eléctrica.

De acuerdo con mediciones efectuadas por la CEL, el azolve que llega anualmente a la cuenca es de 9.8 millones de metros cúbicos, de los cuales un 25 por ciento llega hasta la presa; esto significa que la vida útil de dicha presa, que costó 55 millones de colones, es de 50 anos.

Como alternativa a la construcción de una nueva presa o a la práctica costosa de azolvamiento, se presentan los sistemas de conservación de suelos por medio de la reforestación.

En las áreas de mayor elevación de esta zona existe un "bosque nebuloso" natural, cuyas condiciones climáticas serían de gran atracción turística; sus características son muy semejantes a las de los bosques tropicales de tipo húmedo de las grandes alturas.

.3 Bosque Nacional de Torola

En la parte norte del departamento de Morazán hay un área de aproximadamente 15000 hectáreas, de condiciones ideales para la creación de un bosque nacional. La parte central de la sección de mayores posibilidades madereras está situada entre Perquín y la frontera.

Los suelos pertenecen a las asociaciones Podsólicos Rojo Amarillentos y Litosoles. La topografía es elevada y de flancos precipitados y rocosos; en su mayor parte se adapta únicamente a la reforestación. Sin embargo, dicha área está sujeta al furor irrestricto de las quemas; esto, como es natural, causa daños en los árboles grandes y destruye, año tras año, millares de árboles más pequeños.

En las áreas bajas existen algunas plantaciones de henequén. El desarrollo de este cultivo, junto con el de otros perennes, servirían mucho para resolver los problemas de las quemas y de la erosión.

Actualmente casi han desaparecido los bosques que producían una cantidad muy limitada de madera. Existen plantaciones aisladas de manzanos, lo que quiere decir que podría haber cultivo de frutales de altura en parcelas que se dedican al maíz, maicillo y frijoles.

.2 Zona forestal de Metapán (12)

Grandes áreas de esta zona, comprendida en la Cordillera Fronteriza, están sujetas a peligros de inundaciones, especialmente los suelos aluviales que se encuentran bien distribuidos en la zona. Sin embargo, los suelos más extensos son los que pertenecen al Grande Grupo Latosol Arcillo Rojizo (Ando) en sus fases poco profundas, con relieve que varía de ondulado a alomado. En algunas partes también se encuentran Litosoles.

La principal característica de los suelos de esta zona es que son calcáreos, a diferencia de la mayor parte de los suelos del país.

.1 Suelos

Los suelos más extensos de la zona pertenecen a los Grandes Grupos Latosol Arcillo Rojizo y Podsólico Rojo Amarillo, con relieve que varía de ondulado a alomado. En algunas partes son poco profundos y pedregosos. También se encuentran, en forma bastante bien distribuida, suelos Aluviales, relativamente profundos y con topografía que varía de llana a ondulada. En las partes más altas y colinosas se encuentran los Litosoles.

.2 Capacidad productiva de la tierra

En general, la capacidad productiva actual es baja debido principalmente a los peligros de inundación. Las partes llanas permanecen inundadas por grandes períodos de tiempo. Sin embargo, con adecuados trabajos de recuperación, estos terrenos podrían aumentar su capacidad productiva, especialmente en las Clases III, IV y V, que se encuentran distribuidas en la zona. Por razones de pedregosidad y poca profundidad, se han clasificado algunas tierras en las Clases V y VI; sin embargo, con manejo adecuado, estos terrenos podrían producir frutales, especialmente cítricos.

.3 Cadena Costera (18)

La Cadena Costera cubre prácticamente la misma área territorial que la planicie costera. Es un bloque que empieza en el mar, debajo de la planicie costera, con una longitud de 250 kilómetros, subiendo hacia el norte hasta elevaciones de 1200 metros sobre el nivel del mar. Es un bloque levantado de la corteza terrestre por las fuerzas orogénicas, y luego fracturado por numerosas fallas y fuertemente disectado por los procesos erosivos que tuvieron lugar durante milenios. En la actualidad se presenta como una región muy accidentada, con pocos remanentes del bloque original, pendientes muy fuertes, cimas largas y estrechas y valles en forma de "V", que corren desde las alturas y llegan hasta el mar.

Existen muchos afloramientos rocosos. Los suelos en sí varían de medianamente profundos a superficiales, y son de moderada a baja calidad. En su mayor parte pertenecen a tipos pedregosos de los Grandes Grupos Litosoles y Latosoles Arcillo Rojizos. La vegetación original en esta zona estaba formada por bosques semihúmedos caducifolios y montes secos, y son muy escasos los bosques perennifolios en las orillas de los ríos. En la actualidad, los pocos remanentes de esta vegetación están localizados en algunas laderas altas de las montañas. La mayor parte de estas tierras están cubiertas por montes secos y pastos naturales; tienen una potencialidad agrícola bastante limitada, y su mejor utilización es como zonas de reservas forestales en combinación con pastos limitados a las áreas menos accidentadas.

.4 Otras áreas forestales

Además de las anteriores, existen en el país otras áreas forestales determinadas por características geográficas especiales o por determinación oficial, como en el caso de los bosques municipales.

.1 Bosques de los lagos, volcanes y playas

Se pueden localizar extensiones de tierras no arables en los alrededores de los lagos de Ilopango, Olomega, Coatepeque y Güija, en las cercanías de los volcanes de San Salvador, San Miguel, Santa Ana e Izalco, y en las playas de Conchalío, La Libertad, El Cuco y El Tamarindo. Estas áreas, incluyendo la extensión del agua circundante, abarca un total de 90000 hectáreas. Sus bellezas panorámicas justifican adecuar la zona para incrementar la recreación y el turismo. Cuando la iniciativa privada no asegure la adecuada preservación de las bellezas naturales y su acceso, el estado debería tomar la iniciativa correspondiente.

.2 Bosques salados

Comprenden las tierras de Clase VIIa y VIIas con una extensión de 30000 hectáreas aproximadamente; los suelos pertenecen al grupo halomórfico.

Las tres principales especies botánicas que forman la arboleda de los bosques salados son: el mangle (Rhizophora mangle L.) familia Rizoforáceas; el Ishtate o árbol de sal (Avicennia nítida, Jacquin) familia Verbenáceas, y el Cincahuite (Laguncularia Racemosa [L] Gaertner), familia de las Combretáceas.

Los bosques salados suministran madera rolliza de construcción. La madera de Ishtate se estima como de mejor calidad; la goma exudada por el tallo de este árbol tiene cualidades curativas. La corteza del mangle contiene de 25 a 30 por ciento de tanino, y constituye un importante material de curtiente. La leña que suministran los bosques salados es el combustible generalmente usado en la industria salinera. A este consumo hay que agregarle la leña del mismo origen, usada por otras industrias, y específicamente como combustible en los hornos de quemar ladrillos y tejas.

Los bosques salados constituyen los únicos recursos forestales de alguna importancia pertenecientes al estado; debido a su intensa explotación, se necesita tomar las medidas necesarias para asegurar un rendimiento continuo, económico y progresivo sin menoscabo de su conservación, y evitar la desaparición progresiva del mangle por ser la especie de árbol más valiosa de estas extensiones boscosas.

.3 Bosques municipales

Para lograr el control de inundaciones, la protección contra la contaminación del medio ambiente y la protección de las fuentes de abastecimiento, se necesita la creación de bosques que estén en función del urbanismo y al cuidado de las municipalidades.

San Salvador necesita la creación de un bosque municipal en los flancos y cimas del cerro de San Jacinto; en las faldas muy precipitadas al este, e inmediatamente debajo de los Planes de Renderos, o bien en los flancos más elevados del volcán de San Salvador.

Así como se establezca un bosque municipal en San Salvador, podrían establecerse también en las subcuencas de las principales ciudades.

.4 Bosques de la Fosa Central

Comprenden las faldas de los cuatro grandes macizos (macizos volcánicos de la Fosa Central) que han sido deforestados y no se encuentran cultivados de café. Tiene gran importancia por su relación directa con el desarrollo agrícola de las tierras dedicadas a la labranza intensiva. El desarrollo de esta área forestal tendrá éxito solamente si al mismo tiempo se realizan obras de reforestación y ordenamiento integral de las cuencas, que permitan mantener un nivel friático adecuado y eviten problemas de erosión y sedimentación.

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