¿Por qué es indispensable la identidad civil?

Según datos de UNICEF de 2016, 3.2 millones o un 6% de los niños nacidos en América Latina y Caribe no existen oficialmente pues su nacimiento no ha sido registrado. En cuanto a la población adulta, no hay datos certeros acerca del número de personas que nunca fueron registradas, variando los porcentajes de manera significativa entre los países, y también entre las diferentes áreas dentro de los países.

Las personas más afectadas por el subregistro son aquellas que viven en áreas rurales o en la periferia de las grandes ciudades, grupos étnicos minoritarios, aquellos que viven en hogares pobres y las hijas e hijos de madres con poca o ninguna educación formal.

Esto significa que los Estados no tienen constancia de su existencia y que por tanto esos niños y adultos van a quedar al margen del acceso a toda una serie de servicios y derechos que de otra forma le estarían garantizados.

Por un lado, la identidad civil es indispensable para el ejercicio de los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, así como para hacer efectivo los derechos a la nacionalidad, al nombre, a la personalidad jurídica y a los lazos familiares.

A su vez, la identidad civil es de vital importancia para el fortalecimiento de la gobernabilidad democrática ya que permite que los ciudadanos puedan participar activamente en la vida política de un Estado, haciendo uso de su derecho al voto.

Asimismo, un registro civil universal es la base para que los Estados puedan tener información precisa de su población y así poder elaborar sus planes de desarrollo social y económico.