COMUNICADO DE PRENSA
R 135/14
RELATORÍA ESPECIAL CONDENA ASESINATO DE PERIODISTA EN PERÚ
Washington
D.C., 14 de noviembre de 2014. – La Relatoría Especial para la Libertad de
Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condena el asesinato
de Fernando Raymondi, estudiante de periodismo y trabajador de la revista Caretas, ocurrido el 9 de noviembre en
San Vicente de Cañete, Departamento de Lima, Perú. La Relatoría manifiesta su
preocupación e insta a las autoridades peruanas a actuar con urgencia para
identificar los motivos del crimen y poner en práctica todos los instrumentos
jurídicos con los que cuenta para sancionar a los responsables materiales e
intelectuales del mismo.
De
acuerdo con la información recibida, la noche del 9 de noviembre Fernando
Raymondi se encontraba en la tienda de productos alimenticios de su padre
cuando dos desconocidos ingresaron y le dispararon, pese a que les indicaron
dónde guardaban el dinero de la tienda. Según la información disponible,
Raymondi falleció camino al hospital.
Raymondi
estudiaba periodismo en la Universidad San Martín de Porres y trabajaba en el
área de investigación de la revista Caretas.
El medio de comunicación informó que el periodista estaba investigando la
existencia de asesinos por encargo en Cañete.
El
director de la Policía Nacional del Perú afirmó que la hipótesis manejada hasta
el momento, estaría relacionada con un intento de asalto que tuvo como
consecuencia la muerte del periodista.
Para la
Relatoría Especial es fundamental que el Estado peruano esclarezca a la mayor
brevedad posible la causa de este crimen y exhorta a las autoridades para que
investigue de manera exhaustiva la hipótesis según la cual el crimen habría
podido estar asociado con el ejercicio de la profesión del periodista.
Asimismo, el Estado deberá identificar, procesar y sancionar a los
responsables, y adoptar medidas de reparación justas para los familiares de la
víctima.
El
principio 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de
Expresión de la CIDH señala: "[e]l asesinato, secuestro,
intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción
material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las
personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados
prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las
víctimas una reparación adecuada".
La
Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a fin de estimular la
defensa hemisférica del derecho a la libertad de pensamiento y expresión,
considerando su papel fundamental en la consolidación y el desarrollo del
sistema democrático.