Discursos


DISCURSO DEL JEFE DE GABINETE GONZALO KONCKE DURANTE LA SESIÓN DEL CONSEJO PERMANENTE PARA CONSIDERAR EL ROL DE LOS ACTORES EXTERNOS EN VENEZUELA

2 de mayo de 2019 - Washington, DC


Muchas gracias señor presidente

Con la finalidad de velar por el mantenimiento de la paz y la seguridad hemisférica, que es un cometido fundamental de esta Organización, el Secretario General Luis Almagro y la Secretaría General consideran sumamente pertinente la convocatoria de esta sesión extraordinaria del Consejo Permanente con el objetivo de deliberar sobre el "papel de los actores externos en Venezuela" y las consecuencias que puede ocasionar en nuestra región.

Venezuela está viviendo horas dramáticas. El Régimen ilegítimo de Maduro somete a la población civil mediante el uso de armas como la hambruna y la escasez de medicinas, las cuales se cobran diariamente la vida de personas en el país, a la vez que utiliza la violencia y la fuerza a través de sus actores estatales y no estatales armados, y la aniquilación económica mediante la destrucción de la producción privada y los efectos de la gran corrupción institucionalizada que ha provocado el éxodo de más del 12% de la población venezolana, con proyecciones de hasta del 20% para el 2020.

Este desplazamiento forzado es comparable únicamente -en números- a la catástrofe del desplazamiento de refugiados causada por la guerra civil en Siria, amenazando la estabilidad de los países vecinos de la región. No obstante, éste no es el único parecido con el caso sirio. El efecto de Siria se refleja también en la participación de actores extranjeros involucrados en el escenario venezolano.

Potencias extra regionales como Rusia, China, Turquía e Irán intentan expandir su presencia geopolítica en el hemisferio americano, explotando los recursos naturales de Venezuela y aprovechándose de la fragilidad jurídica e institucional del país. . Estos actores extranjeros despliegan su poderío a miles de kilómetros de distancia de sus países, sin compartir muchas veces todas las veces los valores y los intereses pacíficos de nuestros países, libres de tradición democrática y republicana.

Venezuela bajo el régimen ilegítimo de Maduro se ha convertido en un terreno fértil para que los actores externos amenacen continuamente el mantenimiento de la paz y la seguridad de la región.

El régimen venezolano facilitó que empresas criminales de la región controlaran el territorio de Venezuela a través de redes ilícitas relacionadas con el tráfico de drogas, el lavado de dinero, la minería ilegal, la extorsión, el secuestro. Todo ello bajo la protección de las fuerzas armadas venezolanas, desarticuladas y deslegitimadas por sus vínculos con organizaciones ilegales.

El régimen, a través de cambios en las instituciones económicas, sociales, políticas y militares destinadas a destruir el aparato democrático, ha impuesto el control general por parte de un régimen criminal, para lo cual socava la estabilidad de la región para convertirse en una verdadera amenaza: una crisis humanitaria ejecutada para mantenerse en el poder.

El régimen de Maduro estrechó las alianzas con el narcotráfico, con carteles de la droga, facciones terroristas como el ELN y Hezbollah y disidentes de las FARC con la finalidad de controlar las fronteras venezolanas, oprimir a su población y expoliar sus recursos naturales.

El crimen organizado transnacional, en convergencia con redes terroristas internacionales, se alimenta del desgobierno que auspicia sus acciones y entrega su soberanía voluntariamente, por la subyugada protección ilegal e ilegítima de agentes externos que dirigen las instituciones del país y esto, señor presidente, nos lleva a Cuba.

El régimen de Maduro se deja manejar por Cuba como una colonia sumisa vendida para formar un híbrido de franquicias estatales, no estatales y terroristas criminales. Del mismo modo, potencias extra regionales se han esforzado y enfocado en mejorar las capacidades de las fuerzas de seguridad del régimen, habiendo convertido a Venezuela en unos de sus clientes más fructíferos, y acopiando inventario armamentista representado en más de $12 mil millones en un hemisferio eminentemente pacifico.

Realmente, también Hezbollah tiene injerencia en Venezuela y hay evidencia que mantiene células con la posibilidad de establecer infraestructura basada en actividades delictivas en el país.

La actual intervención en Venezuela por parte de La Habana utiliza también herramientas de confusión masiva como la desinformación, el control social y político, y milicias armadas pro régimen, generando un caos sistemático y de múltiples dimensiones.

Señor presidente, la dictadura cubana juega un rol fundamental para mantener al régimen en el poder. A cambio de llevarse ignominiosamente casi un tercio de la producción petrolera de Venezuela, Cuba provee al régimen madurista de servicio secreto, actividades de inteligencia y de represión, tortura para los disidentes, protección y seguridad para los representantes del régimen. Esto debe cesar.

Asimismo, desde la Secretaría General se insta a las potencias extra regionales a respetar los instrumentos interamericanos y abstenerse de apoyar a un régimen ilegítimo. Todo este caos resultante genera pobreza, hambruna, enfermedades, violencia, inestabilidad y una espiral descendente que constituye una amenaza para la paz y la seguridad de la región, y nos recuerda la necesidad de proteger al pueblo venezolano que se encuentra en esta trágica situación.

Muchas gracias señor presidente