Discursos

EMBAJADOR DENIS MONCADA, REPRESENTANTE PERMANENTE DE NICARAGUA ANTE LA OEA
PALABRAS DEL REPRESENTANTE PERMANENTE DE NICARAGUA ANTE LA OEA, EMBAJADOR DENIS MONCADA COLINDRES EN LA REUNION DEL CONSEJO PERMANENTE

20 de noviembre de 2008 - Washington, DC


Señor Presidente.
Señor Secretario General.
Señor Secretario General Adjunto.
Estimados Representantes Permanentes y Alternos.
Estimados Observadores Permanentes.

El Gobierno de la República de Nicaragua que dirige el Presidente Daniel Ortega a través de su Representación en la OEA, denuncia en primer lugar la política injerencista que de forma permanente mantiene el Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica en contra del Gobierno y Pueblo nicaragüense.

Esta política del gobierno norteamericano ha tenido sus últimas expresiones desde que comenzó el proceso electoral presidencial en el 2006 con la injerencia directa en nuestro país, de los funcionarios gubernamentales de alto nivel como el Secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, y el Subsecretario de Estado en ese momento y actual Presidente del Banco Mundial, Roberto Zoellick, el General Collin Powell, y John Dimitri Negroponte del Consejo Nacional de Seguridad y actual Subsecretario de Estado. Estos personajes llegaron a Nicaragua en 2006, con la misión perversa de intimidar al pueblo nicaragüense, con mensajes chantajistas tratando de influir a los votantes nicaragüenses en contra de los candidatos a Presidente y Diputados del FSLN.

Frustrados por el fracaso de su misión al ser electo el Presidente Daniel Ortega, continúan con su política de desestabilización encaminada a derrocar el Gobierno de Reconstrucción y Unidad Nacional de Nicaragua.

Esta actitud injerencista de Estados Unidos, de organizaciones internacionales y sumado a ellos el Secretario General José Miguel Insulza están afectando el Proceso Electoral Municipal en Nicaragua, realizado el 9 de noviembre recién pasado, pretendiendo desconocer al Consejo Supremo Electoral (CSE).

Este ejercicio democrático y libre, mandatado por la Constitución Política de Nicaragua y por la Ley Electoral ha pretendido ser empañado y deslegitimado por campañas mediáticas realizadas desde mucho antes de que los ciudadanos nicaragüenses concurrieran a depositar su voto por los candidatos de su preferencia en las Juntas Receptoras de Votos.

Esta campaña sistemática que Nicaragua ha venido sufriendo desde hace meses esta siendo impulsada en el ámbito nacional e internacional por diversos organismos políticos sometidos a dictados e intereses de gobiernos que manteniendo una actitud injerencista buscan continuar polarizando el clima político y los resultados electorales que han sido adversos a la oposición nicaragüense.

El libreto diseñado por organismos internacionales, el Departamento de Estado y el Secretario General, Dr. José Miguel lnsulza y grupos derechistas de poder interno y dirigentes de algunos partidos políticos de oposición nicaragüense han hecho causa común para cumplir con su hoja de ruta dirigida a poner en tela de duda, empañar y deslegitimar el reciente proceso electoral municipal.

Lo más grave y delicado es que esta hoja de ruta política con un itinerario violento y subversivo que están desarrollando y cumpliendo, está encaminado y tiene como objetivo la desestabilización y el colapso de las instituciones del Estado y en particular el derrocamiento del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional que dirige el Presidente Daniel Ortega. Todo esto reproducido por instituciones y organismos derechistas que responden a los intereses de la oligarquía nicaragüense sostenida por Campañas mediáticas y actos de violencias en varios municipios del país.

Pretendiendo justificar su violencia y sus actuaciones al margen de la ley los sectores desestabilizadores crearon de forma virtual y como por arte de magia la supuesta existencia de una dictadura y en consecuencia levantan el slogan de campaña "todos contra la Dictadura".

El pecado de Nicaragua es que tiene un gobierno progresista, revolucionario, electo libremente por la mayoría del pueblo nicaragüense que aspira y ha decidido continuar con el proceso de cambios democráticos y profundas transformaciones en el orden político, económico y social en nuestro país.

Es dentro de este contexto que el Departamento de Estado en comunicación oficial expresó nuevamente la política injerencista del gobierno de Estados Unidos en Nicaragua. El Departamento de Estado para no perder el hábito y la mala costumbre injerencista ha expresado que está preocupado por las elecciones municipales que se llevaron a cabo en Nicaragua. Ellos deberían ocuparse de terminar con la guerra de agresión a Irak, de ponerle fin al inhumano bloqueo a Cuba y de respetar y sujetarse al Derecho Internacional.

El gobierno de Estados Unidos debe recordar que los Estados y Gobiernos representados en la OEA no somos Estados asociados, ni estados federados de la Unión Norteamericana, Nicaragua es un Estado libre, independiente y soberano con autodeterminación para realizar sus propios procesos electorales de acuerdo con nuestra Constitución y nuestra Ley.

Los tiempos en que las elecciones en Nicaragua las dirigía el propio Secretario de Estado de Estados Unidos y en que los votos eran contados por la tropa de Infantería norteamericana que invadió el suelo nicaragüense, ya pasaron. En Nicaragua no permitiremos que se repitan hechos vergonzosos como los de 1927 y 1928 en que Mr. Henry Stimson impuso las elecciones vigiladas y dirigidas por las fuerzas interventoras norteamericanas.

En ese período las elecciones presidenciales fueron realizadas por oficiales y personal de la Infantería de Marina de Estados Unidos. El consejo Superior de Elecciones fue presidido por el General Charles McCoy nombrado directamente por el Presidente de Estados Unidos Calvin Cooligde. Este es el tipo de democracia subyugada por el que aboga el Departamento de Estado, el gobierno norteamericano y la oligarquía nicaragüense. Por supuesto para Nicaragua es inaceptable y la rechazamos.

En sintonía con la posición oficial del Gobierno de Estados Unidos su Embajador en Nicaragua, Robert Callaham ha expresado que ante las dudas que tienen sobre el proceso electoral municipal, su gobierno en cualquier momento procederá a examinar y evaluar la cooperación económica con Nicaragua. El Embajador Callaham que es un amplio conocedor de Centroamérica desde los años 80 y el Departamento de Estado de Estados Unidos deberían revisar y evaluar la sentencia de la Corte Internacional de Justicia que ordenó a los Estados Unidos indemnizar con 17 mil millones de dólares a Nicaragua por su continuada violación a los principios fundamentales del Derecho Internacional, específicamente por intervenir en los asuntos internos de Nicaragua, violando su soberanía mediante el uso de la fuerza y actos de terrorismo que fueron claramente señalados por la Corte Internacional de Justicia.

Las declaraciones del Departamento de Estado y del Embajador Callaham, no abonan a la estabilidad de las Relaciones Bilaterales de Estados Unidos y Nicaragua.

Sumándose al coro injerencista la Secretaría General de la OEA publicó un comunicado por medio del cual el Doctor José Miguel Insulza secunda esta campaña deslegitimadora de las elecciones municipales en Nicaragua y desestabilizadora del Gobierno del Presidente Ortega.

Con anterioridad en el mes de agosto desde Chile, la prensa internacional circuló la información afirmando que el Secretario General de la OEA, José Miguel lnsulza se comprometió con el Presidente de la Unión de Partidos Latinoamericanos (UPLA) el derechista Jovino Novoa a discutir en el Consejo Permanente de la OEA, sobre la suspensión de la personalidad jurídica de dos partidos políticos de Nicaragua.

La información agregó que la reunión sostenida en Santiago de Chile entre el Secretario General lnsulza y el Presidente de la Unión de Partidos Latinoamericanos (UPLA) Jovino Novoa, fue con el objetivo de analizar la petición que le hizo a fines de julio para que interviniera en el proceso electoral de Nicaragua.

Para que no quedara ninguna duda sobre lo informado por los medios de prensa internacional la Secretaria de la OEA publicó el 21 de agosto de 2008 el comunicado de prensa con referencia C-314108 en el que se confirma lo dicho por la prensa internacional agregando además que el Secretario de la OEA, insistió en que "nos preocupa la exclusión que se ha producido en Nicaragua de dos partidos, ya que son la oposición que existe en ese país".

Es inaudito que el Secretario General, se invista de una autoridad que ni el Estado, ni el gobierno, ni el pueblo de Nicaragua le han otorgado para que determine a que partidos políticos se les puede o no cancelar su personería jurídica y quienes son y quienes no son los partidos de oposición en Nicaragua. Sobre todo teniendo en cuenta que de las resoluciones del Consejo Supremo Electoral los partidos políticos hicieron uso de los recursos que les permitía la Ley. Parece que el Dr. lnsulza quiere reencarnar el viejo ministerio de colonias de Estados Unidos, que fue la concepción original con la que se creo la Organización de los Estados Americanos (OEA). El secretario General de la OEA, se está convirtiendo en un mensajero oficioso de sectores interesados en continuar pretendiendo descalificar y desestabilizar al gobierno popular, legítimo y constitucional del Presidente Daniel Ortega.

No es correcto ni se puede permitir, poner en juego la soberanía, la independencia y la autodeterminación de los estados, gobiernos y pueblos del hemisferio por hacer causa común con intereses de un imperio decadente. La OEA, no es un Supra-Estado, ni tiene funcionarios que estén por encima de los Estados. Por eso le planteamos al Secretario General que la próxima vez que acuda al Congreso de Estados Unidos para ser interpelado como ocurrió el 10 de abril de 2008 lo haga a titulo personal y no como Secretario General de la OEA, para no continuar quebrantando el artículo 118 de la Carta por actuaciones incompatibles con su cargo.

El Secretario General José Miguel Insulza, se está extralimitando en sus funciones, abusando de la autoridad y atribuciones que le confiere la carta de la OEA, pretendiendo pasar por encima de la independencia y soberanía de los estados que conforman ésta organización. Está desconociendo la carta de la OEA la cual regula que ninguna de sus disposiciones autoriza a intervenir en asuntos de la jurisdicción interna de los Estados Miembro. Razón tiene el Presidente de los nicaragüenses Comandante Daniel Ortega al afirmar que de nuevo Nicaragua esta sufriendo una guerra de baja intensidad, ya no con armas convencionales como en los años 80, ahora es con la mentira, la infamia y las calumnias a través de los medios de comunicación al servicio de la oligarquía y del imperio que buscan socavar y derrocar al Gobierno de Nicaragua.

Para el gobierno de Nicaragua es inaceptable que el Secretario General se esté sumando a este plan desestabilizador que atenta contra los principios de la Carta que están siendo defendidos por las instituciones del Estado nicaragüense.

El Gobierno del Presidente Ortega hace un llamado a los gobiernos de los hermanos países representados en la OEA para que contribuyamos entre todos a fortalecer y defender la soberanía, la independencia y la autodeterminación de nuestros estados, pueblos y gobiernos. También hacer efectivo el rol de los estados y gobiernos en la OEA y a contribuir en el llamado a la no injerencia en los asuntos internos de Nicaragua y en neutralizar las acciones desestabilizadoras y de derrocamiento del gobierno del Presidente Ortega dirigido por la administración actual del Presidente El Gobierno de Nicaragua solicita a los honorables representantes de los países del hemisferio su apoyo para aprobar el Proyecto de Resolución que hemos presentado a la Presidencia de este Consejo y que contiene 3 puntos resolutivos que son:

  1. Hacer un llamado al Gobierno de los Estados Unidos de América a que cese en su actitud injerencista en los asuntos internos de Nicaragua.
  2. Recordarle al Gobierno norteamericano a no utilizar la presión económica y se abstenga de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza en contra del Estado y Gobierno nicaragüense.
  3. Recordarle al Secretario General José Miguel Insulza, que no se extralimite en sus funciones.
  4. Los Estados Miembros de la Organización de Estados Americanos reafirman el respeto a la soberanía del Estado nicaragüense, sus instituciones, el proceso de participación democrática ciudadana y su voluntad de paz.