Discursos

SR. JORGE BRIZ ABULARACH, MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES DE GUATEMALA
DISCURSO DEL SR. MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES DE GUATEMALA EN OCASIÓN DE LA XXXV ASAMBLEA GENERAL DE LA OEA

6 de junio de 2005 - Fort Lauderdale, FL


Señores y Señoras Cancilleres
Señor Secretario General
Señoras y Señores Embajadores
Distinguidos Invitados Especiales
Señores Delegados
Amigos todos:

En nombre del gobierno y pueblo de Guatemala, deseo agradecer al gobierno de los Estados Unidos de América por sus deferentes atenciones hacia todas nuestras delegaciones y por hacer realidad el desarrollo del XXXV período ordinario de sesiones de la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos.

Aprovecho la ocasión para unirme a las expresiones de satisfacción y felicitación por la asunción del Secretario General, el Dr. José Miguel Insulza, a quien le reiteramos nuestro apoyo para que pueda llevar a cabo las acciones e iniciativas necesarias para que la OEA cumpla a cabalidad con todas sus responsabilidades y con los objetivos establecidos en la Carta de la Organización, los instrumentos regionales de Derechos Humanos, las declaraciones de las Cumbres de Jefes de Estado, así como en la Carta Democrática Interamericana, todos los cuales son también un referente fundamental cel que hacer de nuestros gobiernos.

Mi delegación viene con la mejor intención de contribuir en el debate relacionado con el lema de la Asamblea General “cómo hacer realidad los beneficios de la Democracia” que es el reto principal de todos los Estados miembros de la OEA. Este lema nos obliga a pensar en las acciones y en las estrategias que permitan que la Democracia deje de prisionera de las prácticas nocivas del pasado y pase a ser una vivencia efectiva y cotidiana de los gobiernos, de la sociedad civil y de todos los grupos y Pueblos que convivimos en el hemisferio.

Un elemento estratégico, que se enmarca dentro de una visión de largo plazo, mismo que debe valorarse y consolidarse, es la instauración de gobiernos por medios pacíficos y eleccionarios. Hemos superado ya la etapa de los golpes de Estado y entramos a una etapa de certidumbre constitucional, aunque con momentos de inestabilidad en varios países que han producido la salida prematura de algunos presidentes, pero no del régimen constitucional en su conjunto. Nuestro mayor reto es cómo construir y fortalecer instituciones gubernamentales que garanticen los derechos de todos los ciudadanos y que a su vez ellos mismos se reconozcan en dichas instituciones, tanto en intereses políticos, económicos, sociales, culturales, educativos, entre otros, para evitar la inestabilidad, las confrontaciones y las exclusiones.

Muchos de nuestros ciudadanos se preguntan por qué teniendo Constituciones y leyes positivas que establecen regímenes democráticos, todavía tenemos retos importantes que superar, como la pobreza extrema, inseguridad ciudadana, la corrupción, la injusticia social, los grupos transnacionales delincuenciales, la exclusión, el racismo y la discriminación. Además de enfrentar esos retos, debemos pensar en cómo elevar el producto interno bruto, como incrementar el comercio, la producción nacional y la generación de riqueza para poder superar los obstáculos que impiden disfrutar los beneficios de la Democracia.

Es nuestra opinión que la OEA debe participar en el diseño de estrategias regionales para contribuir, junto a los gobiernos, a reducir los conflictos políticos y las situaciones de grave inestabilidad que ocurren o que pueden ocurrir en cualquier estado de las Américas. Sería muy productivo iniciar con una reflexión sobre las experiencias de “buenas prácticas” de los estados, sobre cómo han solucionado diversas confrontaciones o crisis internas. Hay múltiples experiencias en el hemisferio, algunas de ellas muy positivas.

También sería beneficioso para todos los estados miembros de la OEA, teniendo en cuenta el principio y derecho a la libre determinación, a que se intercambien visiones y criterios en el Consejo Permanente acerca de cómo se podrían construir mecanismos que apoyen a los gobiernos para reducir los conflictos nacionales o intranacionales o en su defecto, contribuyan con un cuadro de análisis de riesgo para los gobiernos, sin detrimento también de los derechos de su población. Creemos que tenemos ejemplos concretos de prácticas de solución de conflictos internos o procesos de diálogo y negociación exitosos.

Sin pretender presentarnos como un modelo para el resto del continente, nos parece oportuno mencionar la experiencia nacional guatemalteca, que ha tenido éxito en la reducción de conflictos mediante el establecimiento de diálogos en búsqueda de acuerdos con los grupos de la sociedad civil, así como con los Pueblos Indígenas para encontrar soluciones en conjunto. De esta manera la sociedad civil tiene una acción propositiva y mentalidad constructiva, aunque aún existen grupos de presión cuya estrategia es eminentemente contestaria.

Reconocemos que todos los gobiernos hemos hecho esfuerzos de avanzar hacia el perfeccionamiento de la Democracia y la agenda de la OEA en esta materia es ciertamente amplia, pero aún existen temas que requieren de mayor atención. Este ha sido el ánimo de Guatemala al haber presentado el tema sobre “Los Pueblos Indígenas y su situación económica y social” a consideración de esta Asamblea General.

Este tema ha venido ganando espacio y reconocimiento en la agenda política de la OEA y por ello valoramos altamente la contribución de todos los gobiernos en el propósito de avanzar lo más pronto posible en la adopción de una Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Aunque hemos avanzado en las legislaciones nacionales, estos Pueblos aún están marginados y excluidos de las oportunidades y los beneficios socioeconómicos tanto nacionales como internacionales, razón por la cual debemos seguir haciendo el mayor esfuerzo para buscar y construir mecanismos para que dichos Pueblos tengan plena igualdad y equidad en derechos.

Por el tiempo limitado y porque conocemos ampliamente la situación, mi delegación evitará hacer análisis de los problemas que enfrentan los Pueblos Indígenas de las Américas, por ello me referiré a la idea del gobierno de Guatemala de sugerir a la OEA para que estudie la conformación de una entidad de la Secretaría General para atender las necesidadades y aspiraciones de los Pueblos Indígenas. Un ente que pueda contribuir, entre otros, al apoyo técnico, asesoría, de acompañamiento a los Pueblos, gestión de recursos para diversos proyectos impulsados por los Pueblos interesados; también que defina estrategias y planes hemisféricos en el aspecto educativo, cultural, económico, social, etc.

Mi delegación hace esta contribución sobre la base de que en la OEA no existe un ente de ejecución de políticas hacia dichos Pueblos. Aún que está el Grupo de Trabajo que elabora la declación sobre Derechos de los Pueblos Indígenas, su función es específicamente ésta, es decir, elaborar la declaración. De allí también nuestro respaldo activo a la preparación de una Convención Interamericana contra el Racismo y de toda forma de discriminación e intolerancia.

Señor Presidente, tema prioritario es también el de los migrantes que enfrentan diversas vicisitudes y adversidades para alcanzar sus aspiraciones en nuestros países. Nuestra delegación se congratula por el establecimiento del Programa Interamericano para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos de los Migrantes, incluyendo los trabajadores migratorios y sus familias. Este programa tendrá resultados que asegurarán mejores relaciones entre las autoridades, las instituciones, los gobiernos hacia los migrantes, que por buscar un horizonte de atención a su derecho socioeconómico, emigra hacia otros países del hemisferio.

Finalmente es oportuno reafirmar nuestro compromiso de seguir impulsando y contribuyendo en la búsqueda de acuerdos sobre otros temas de la agenda hemisférica, como lo son el de lucha contra la corrupción, el combate al terrorismo, la trata de mujeres, niños, adolescentes; así como la vigilancia para la consolidación de la Democracia, la promoción de la descentralización y otros objetivos contenidos en la Carta Democrática Interamericana. De la misma manera consideramos fundamental el cumplimiento de los compromisos adquiridos con la entrada en vigencia de convenios e instrumentos regionales.

Muchas gracias.