Discursos

CÉSAR GAVIRIA TRUJILLO, SECRETARIO GENERAL DE LA ORGANIZACION DE LOS ESTADOS AMERICANOS
EN LA INSTALACIÓN DEL PRIMER PERÍODO DE SESIONES DEL COMITÉ JURÍDICO INTERAMERICANO 1997

24 de febrero de 1997 - Washington, DC


Quisiera comenzar por darles una muy cordial bienvenida a la casa de las Américas en Washington y agradecerles la gentil invitación que me han formulado para participar en esta sesión inaugural del Comité Jurídico Interamericano. De igual forma, deseo expresar mi reconocimiento a la competencia profesional y al liderazgo de los doctores Eduardo Vío Grossi y Keith Highet, elegidos por el Comité como Presidente y Vicepresidente en las pasadas sesiones.

Hace dos años tuvimos la oportunidad de reunirnos en este mismo lugar y de intercambiar algunas ideas sobre temas de interés para la agenda jurídica interamericana. Desde entonces, se han dado importantes avances en el marco de todo el sistema. Por eso considero de especial utilidad e importancia esta reunión del Comité en la sede del Consejo Permanente y de la Secretaría General, así como la iniciativa de propiciar este tipo de encuentros periódicos entre el Comité y los demás órganos de la OEA para evaluar los avances dados en materia jurídica a nivel hemisférico y coordinar acciones para el futuro.

Durante los dos años que han transcurrido desde nuestro último encuentro en Washington, se ha hecho cada vez más evidente que una de las más importantes ventajas comparativas de la OEA la constituye ser el único escenario dentro del cual los Estados, en igualdad de condiciones jurídicas, definen las normas que regulan las relaciones internacionales a nivel hemisférico.

En este período también he podido confirmar que los grandes desafíos que tenemos hacia el mañana en las Américas tienen que ver con aspectos jurídicos, y que uno de los mayores aportes que el conjunto de órganos e instituciones que integran el sistema interamericano le pueden hacer al progreso de nuestros países y al buen desenvolvimiento de sus crecientes relaciones, se encuentra precisamente en el campo jurídico.

Los hechos que han ocurrido a nivel hemisférico y las reuniones y foros de distinta naturaleza que se han realizado en el marco de la OEA, han mostrado cómo en este nuevo período de mayor integración e interdependencia se da con mucha mayor intensidad la necesidad de avanzar en el desarrollo de nuevos instrumentos jurídicos o en el perfeccionamiento de los existentes. Sobre todo si hemos de tener un hemisferio cuyos descuerdos y conflictos se puedan resolver acudiendo a los mecanismos jurídicos y no a actos unilaterales o a estar apelando de manera sistemática a soluciones ad hoc.

Para comenzar, las negociaciones con miras al Area de Libre Comercio de las Américas van a demandar una gran labor de apoyo jurídico. Durante la etapa preparatoria la Unidad de Comercio de la Secretaría General ha iniciado algunas de estas tareas a través de documentos de carácter comparativo entre las normas nacionales y subregionales en relación con diferentes temas. Ahora esa Unidad, junto con la Subsecretaría de Asuntos Jurídicos y teniendo como fundamento los muy importantes trabajos realizados por miembros del Comité Jurídico Interamericano entre 1993 y 1995, está elaborando un documento sobre métodos de solución de controversias a nivel hemisférico, para ser presentado en la próxima reunión de Ministros de Comercio en Belo Horizonte, en la cual se creará un grupo de trabajo sobre esta materia.

A partir de esa información, será preciso elaborar estudios que permitan detectar los cambios jurídicos necesarios para conseguir la meta del Area de Libre Comercio. Debemos recordar que la OEA ofrece un marco adecuado para la armonización de las legislaciones internas y para la elaboración de disciplinas sobre los distintos temas que ayuden a crear un nuevo marco común para la zona.

Históricamente la OEA y en especial este Comité han cumplido un papel central en este tipo de labores, como lo describe el magnífico trabajo presentado por el doctor José Luis Siqueiros en las sesiones de agosto del año pasado.

En materia de medio ambiente y desarrollo sostenible tenemos desafíos similares, especialmente si se tienen en cuenta los muy importantes mandatos que en este campo fueron asignados a nuestra organización en la Cumbre de Bolivia, y en particular la creación de una red hemisférica sobre derecho ambiental.

Pero en general todos los nuevos temas de la agenda hemisférica están reclamando nuevos desarrollos en materia jurídica: Los temas relativos a la democracia, al derecho ambiental, al derecho laboral, a los acuerdos comerciales y de integración económica, a la inversion extranjera, a la propiedad intelectual, al desarrollo de las telecomunicaciones y de la ciencia y la tecnología, la búsqueda de la mayor seguridad hemisférica, la lucha conjunta contra el avance y la internacionalización del crimen organizado y de fenómenos como el terrorismo, el narcotráfico, la corrupción, el tráfico de armas y la explotación ilícita de recursos naturales.

Consciente de la importancia de los aspectos jurídicos para el futuro del hemisferio y del gran aporte que la OEA puede hacer en esta materia, hace un año presenté a consideración del Consejo Permanente y de este Comité el documento "El Derecho en un Nuevo Orden Interamericano" cuyo único propósito era el de servir de punto de partida de un proceso de diálogo entre los países y los órganos de la OEA sobre el contenido y la forma cómo debemos prepararnos para asumir los retos que en materia jurídica tiene el sistema interamericano.

Durante el último año los diferentes órganos de la OEA han tomado decisiones de la mayor trascendencia para conseguir este propósito. Así, por primera vez la Asamblea General en Panamá aprobó una declaración sobre la contribución interamericana al desarrollo y codificación del derecho internacional, en cuyo desarrollo ahora se encuentra trabajando la Comisión de Asuntos Jurídicos y Políticos bajo el liderazgo de la Embajadora Beatriz Ramachiotti de Perú.

El área jurídica de la Secretaría General fue reestructurada para concentrar la Subsecretaría de Asuntos Jurídicos en el apoyo a los órganos en materia del desarrollo progresivo del derecho internacional y en tareas de cooperación jurídica a nivel hemisférico Quisiera agradecer de manera especial la expresiones del Comité Jurídico Interamericano en relación con el documento que tuve oportunidad de remitirles en las sesiones de febrero de 1996, así como las decisiones de incluir en su agenda el análisis, con carácter prioritario, de dicho documento y reformular su agenda tomando en cuenta la sugerencia formulada en tal sentido.

Ese documento ha sido rebasado por los juiciosos y serios análisis y comentarios contenidos en los excelentes documentos de trabajo elaborados por el doctor Siqueiros, en relación con "el aporte del Comité sobre el Desarrollo del Derecho Internacional Privado", y por los doctores Zelada, Highet y Grandino Rodas con respecto a otros aspectos referidos en él. Todos estos avances en que coinciden los diferentes órganos de la OEA con responsabilidades en materia jurídica, deberían permitirnos avanzar en la consolidación de esos esfuerzos y en la definición de una metodología para continuar trabajando de manera mas ordenada y sistemática.

Son muchos los encargos que ha recibido el Comité Jurídico Interamericano por parte de la Asamblea General este año y que hacen presagiar una vez más una labor ardua y enriquecedora durante este período de sesiones.

La preparación de legislación modelo con respecto al enriquecimiento ilícito y el soborno transnacional; el estudio de la dimensión jurídica de la integración y de los diversos aspectos relativos al perfeccionamiento de la administración de justicia en las Américas; la consideración de los comentarios formulados al estudio relativo a las directrices para los procesos de elaboración y aprobación de instrumentos jurídicos interamericanos en el ámbito de la Organización; la continuación del estudio sobre la cooperación interamericana contra el terrorismo; el tema relativo al derecho de la información, entre otros, hacen parte de su agenda y tienen una importancia fundamental en el desarrollo progresivo del derecho internacional interamericano.

En cuanto a la preparación de legislaciones modelo sobre enriquecimiento ilícito y soborno transnacional, hay que señalar que son dos temas que se derivan directamente del magnífico trabajo realizado por el Comité en el proceso de elaboración de la Convención Interamericana contra la Corrupción, y a los que la Asamblea General ha otorgado especial relevancia. Sin duda constituirán un ejercicio que coadyuvará a la armonización de las medidas a tomar en dichas materias, tan necesarias en la lucha contra estos flagelos que representan un amenaza para nuestra seguridad y nuestras democracias.

Por su parte, el tema del perfeccionamiento de la administración de justicia se presenta también como un tema fundamental para el desarrollo del continente, puesto que las relaciones regionales, hoy más que nunca, se basan en la seguridad jurídica que se logra al interior de las fronteras de cada uno de nuestros países. En particular, quiero resaltar la labor del Comité Jurídico en este campo, elaborando distintos estudios sobre el tema y en especial en materia de protección y garantías de los jueces y magistrados en el ejercicio de sus funciones. El enfrentar las grandes amenazas que se ciernen sobre nuestras democracias depende también de aclimatar un nivel razonable de cooperación judicial dado el carácter transnacional de los delitos y de las instituciones que a él se dedican.

Especial importancia reviste el tema de las directrices para los procesos de elaboración y aprobación de instrumentos jurídicos interamericanos en el ámbito de la Organización. Está demás reiterar que uno de los aportes más meritorios que ha realizado la OEA al derecho internacional general se refiere al de los instrumentos jurídicos adoptados bajo su esfera, muchos de ellos pioneros y novedosos en las diversas áreas del derecho. Salta pues a la vista que dichas directrices vendrán a constituir un aporte fundamental para coadyuvar en los aspectos técnicos de este proceso.

En fin, me podría referir a la importancia de todos y cada uno de los temas que integran la agenda del Comité, pero lo importante es resaltar que no obstante lo recargado de dicha agenda, confío en que una vez más sus labores se verán colmadas de resultados satisfactorios que contribuirán al enriquecimiento de nuestro sistema jurídico interamericano.

Deseo asimismo aprovechar esta ocasión para reconocer la importancia de la realización del Curso de Derecho Internacional que anualmente organiza el Comité Jurídico Interamericano en la ciudad de Río de Janeiro, y cuyo tema para el presente año versa sobre la interacción entre el derecho internacional y el derecho interno en la actualidad. Considero de la mayor importancia difundir, hoy más que nunca, los cambios que experimenta el derecho internacional y las incidencias directas de este cambio en las actividades del Estado y de los individuos en el ámbito interno.

Confío en que el Curso de este año dará nuevas luces para que los becarios que a él asisten logren realizar un aporte sustancial en los medios en los cuales se desempeñan en sus respectivos países. Desde ya auguro un gran éxito a este Curso de Derecho Internacional e insto al Comité Jurídico Interamericano a que siga brindando todos sus esfuerzos para que año a año se sigan multiplicando los frutos logrados hasta el día de hoy.

Como se menciona en el documento "El Derecho en un Nuevo Orden Interamericano”, al tener en cuenta el papel que históricamente ha cumplido el Comité, las muy importantes funciones que la Carta le asigna y las altas calidades de sus miembros, el fortalecimiento de este órgano debe ser un objetivo prioritario de esta Organización y a ello estamos abocados, procurando propiciar un diálogo constructivo entre los principales órganos de la OEA sobre este particular. Confiamos en que los pasos que se están dando tengan como resultado final la consolidación efectiva del mismo, y desde ya saben que cuentan con todo el apoyo de la Secretaría General, en particular a través de su Subsecretaría de Asuntos Jurídicos.

Quiero finalmente aprovechar esta oportunidad para volver a expresar mi satisfacción y mis felicitaciones a los miembros del Comité Jurídico Interamericano por la efectiva e importante labor que desarrolla en el cumplimiento de las prioridades de nuestra Organización, deseándoles toda clase de éxitos en el período de sesiones que hoy se inicia.

Muchas gracias.