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Comunicado de Prensa

Secretario General de la OEA recibió distinción del Cambio de la Rosa de la Paz de Guatemala

El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos, (OEA), José Miguel Insulza, recibió hoy la distinción del Cambio de la Rosa, que otorga el gobierno de Guatemala a nacionales o extranjeros que hayan tenido actuaciones relevantes en actividades políticas, culturales, sociales o económicas, que signifiquen un aporte valioso a la sociedad guatemalteca, y a las grandes causas de la paz.

En sus palabras de agradecimiento, el Secretario General Insulza dijo que "la paz no es sólo el fin de la guerra, sino que también es aprender a vivir en una cultura de paz y respeto, es tolerar las discrepancias, aceptar la divergencias y es buscar las soluciones por la vía del consenso y la amistad cívica"

El acto, que tuvo lugar en el Palacio Presidencial, fue encabezado por el Ministro de Cultura, Carlos Enrique Batzin, el Vice Canciller Rodrigo Vielmann y la Embajadora Arabella Woolfolk, quienes en sus intervenciones elogiaron la trayectoria política que el Secretario General de la OEA ha desarrollado tanto en Chile como en la escena internacional. El Ministro Batzin, al dirigirse a las autoridades, cuerpo diplomático y demás invitados presentes en la ceremonia, expresó la satisfacción de su gobierno por nombrar al Secretario General Insulza, Mensajero de la Paz.

El máximo representante de la OEA, en su reflexión sobre el significado de la distinción -que recuerda el Acuerdo de Paz Firme y Duradera firmado en 1996 entre el gobierno de Álvaro Arzú y la Unidad Revolucionaria Guatemalteca (URNG) que puso fin a una etapa dolorosa vivida en este país- trazó una línea entre la experiencia guatemalteca de la década de los 80, y lo vivido en Chile en la década anterior. Dijo que el acuerdo que alcanzaron los guatemaltecos, "afianzó en Guatemala la tan anhelada paz" y puso fin a la dramática historia de violencia que vivió este país. En esa perspectiva, indicó, "entiendo bien su significado, porque pertenecí a una generación que aprendió, de manera muy dura, el valor de la paz".

El líder de la institución hemisférica recordó que a principio de los 70, su país "vivía una paz interna, con gran movilización social pero con respeto a los principios democráticos, pero todo ello se rompió un 11 de septiembre de 1973". "Fueron años de dolor y sufrimiento hasta que recuperamos la paz en mi país", apuntó, "por eso agradezco y valoro esta ceremonia".

Siempre en su definición de lo que es la cultura de paz, el Secretario General Insulza sostuvo que ésta también significa "superar la pobreza y la desigualdad, dar a todos condiciones para desarrollar sus capacidades, y trabajar por el fin de la violencia y la inseguridad que impone el crimen organizado". Es una dura tarea, advirtió, "pero siempre estaremos abocados y trabajando por ello para lograr que, en esta lucha incesante, el ser humano alcance una buena convivencia, el desarrollo, la justicia y la paz”.

El monumento símbolo, develado el 29 de diciembre de 1997, que se encuentra en el Patio de la Paz del Palacio Nacional, son dos manos de bronce, entrelazadas, que recogen una rosa blanca, que es periódicamente renovada. En algunas oportunidades el honor de ese ejercicio recae en personalidades nacionales o internacionales, como el caso de hoy.

La galería de fotos del evento está disponible aquí.

Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-383/14