Comunicado de Prensa


INSULZA DESTACA RESPONSABILIDAD DE PAÍSES DESARROLLADOS EN LA ASIGNACIÓN DE RECURSOS A LOS ORGANISMOS FINANCIEROS REGIONALES

  30 de marzo de 2009

El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, reiteró en la ceremonia de apertura de la asamblea del BID, en Medellín, que la cooperación será el gran instrumento para ayudar a los países más pobres, que harán frente a la crisis económica global en débiles condiciones, y pidió al Grupo de los 20 que exprese su disposición a respaldar a los países en desarrollo, otorgando una ampliación de los recursos a los organismos financieros internacionales, entre ellos al BID.

Aludiendo a la próxima reunión del G-20, Insulza identificó la cita de Londres como una oportunidad del mundo desarrollado para dar muestras de su disposición a definir formas concretas de apoyo a las economías más vulnerables de cara a la crisis financiera mundial. "Es preciso permitir al Fondo Monetario Internacional, al Banco Mundial, a las instituciones regionales, aumentar la provisión de fondos y de recursos para los países mas pobres, para ayudar a las naciones en dificultades. Es necesario también, hablar de una estructura mas permanente del sistema financiero internacional", afirmó.

Citando cifras del BID para graficar los riesgos que se ciernen sobre la región, Insulza alertó que los efectos de la crisis económica pueden deslizar a más de 12 millones de personas de América Latina y el Caribe por debajo de la línea de pobreza en los próximos dos años. "Sabemos que esta crisis traerá momentos amargos a las economías de nuestro continente: menos crecimiento e incluso crecimiento negativo para muchos, más desempleo, más pobreza y en términos políticos, inestabilidad".

En clave de preocupación, Insulza dijo que para enfrentar esta crisis global, es necesario "evitar la tentación de protegerse de ella transfiriendo el costo a otros; ello ocurre por ejemplo, cuando se adoptan medidas proteccionistas que violan acuerdos comerciales alcanzados, cuando se sugiere postergar políticas sociales, energéticas o de protección ambiental; cuando se restringen los derechos de los inmigrantes; cuando los más débiles no tienen acceso a los recursos necesarios para mantener sus economías deterioradas por la reducción de remesas y las exportaciones, por la ausencia de flujos financieros hacia ellas".

Insulza recordó que al encuentro del G-20 asisten tres países latinoamericanos -Brasil, México y Argentina- y expresó su esperanza que con su presencia quede "claramente reflejada tanto nuestra disposición a participar de las políticas que allí se acuerden como en la entrega de soluciones a nuestros problemas".

Coincidiendo que los planteamientos formulados por el Presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, en la cumbre de lideres de Viña del Mar (Chile), el máximo representante de la OEA dijo que no le gustaría "que nuestro Banco Interamericano de Desarrollo no sea mencionado entre las instituciones financieras que deban recibir una ampliación de sus capitales para apoyar las políticas de reactivación en sus países miembros". Por el contrario, agregó, "queremos ver inscrito su nombre entre los países que van a participar en la reactivación económica que es necesaria para nuestra región".

Insulza advirtió que aunque esta vez la crisis no fue gatillada por las regiones más pobres, los efectos inevitablemente recaerán en ellos. "La recesión ya esta afectando la demanda de materias primas, la reducción de la disponibilidad de créditos ya se comienza a sentir, la disminución de las remesas empieza a causar daño a los países mas pequeños, y es inevitable que nuestras economías, incluso las más preparadas, vean reducir su ritmo de crecimiento y aumentar los niveles de desempleo", indicó.

Sobre la reunión del BID en Medellín, Insulza expresó su deseo de que se imponga "un debate claro y con consenso productivo acerca del papel del BID ante la crisis". Dijo que aunque se insiste en que esta crisis sorprende a America Latina y el Caribe en un buen momento político y económico, "no todos los países tienen capacidad financiera ni reservas suficientes para aplicar políticas de estímulo, generación de empleos y combate a la pobreza, que son necesarias de hacer" para enfrentar la crisis, por lo que insistió en la urgencia de que el BID pueda contar con mas recursos para apoyar a los países en desarrollo.

Referencia: C-100/09