Comunicado de Prensa


CÉSAR GAVIRIA INFORMA SOBRE CONVENIO OEA-COLOMBIA

  4 de febrero de 2004

El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), César Gaviria, dijo hoy al Consejo Permanente que Colombia merece el apoyo internacional en el proceso de desmovilizar a los grupos armados ilegales del país.

Refiriéndose al Convenio para el Acompañamiento al Proceso de Paz en Colombia, firmado el pasado 23 de enero entre el gobierno colombiano y la Secretaría General de la OEA, Gaviria expresó su convicción de que la OEA tiene la experiencia necesaria para cumplir con la verificación de este proceso. Mencionó el caso de Nicaragua, donde la OEA acompañó la desmovilización de 22 mil “contras”, usando personal civil.

En su informe verbal, el Secretario General aseguró que la Misión para Apoyar el Proceso de Paz de Colombia (MAPP-OEA) cumplirá funciones técnicas y no intervendrá en los asuntos que competen a las instituciones democráticas de Colombia. La misión será dirigida por Sergio Caramagna, quien manejó el proceso de desmovilización en Nicaragua y en los últimos años se ha desempeñado como director de la oficina nacional de la OEA en ese país.

Gaviria subrayó que Colombia está viviendo una “etapa crítica” y requiere de ayuda inmediata de la comunidad internacional para continuar con el proceso que comenzó con la desmovilización de más de 1.000 paramilitares en noviembre pasado. Recordó que los países de la OEA han afirmado su apoyo al gobierno colombiano en varias ocasiones, incluyendo en la Asamblea General de la OEA, celebrada en junio de 2003, y en la Conferencia Especial sobre Seguridad, realizada en octubre pasado. En febrero de 2003, el Consejo Permanente condenó un atentado de la guerrilla colombiana y renovó su "inequívoco apoyo a los esfuerzos del Gobierno de Colombia en procura de una paz firme y duradera en ese país."

El acuerdo OEA-Colombia, que tiene una duración de tres años con posibilidades de extenderse, contempla el apoyo de la OEA en la verificación del proceso de paz, en especial en lo que se refiere al cese de fuego y de hostilidades, así como la desmovilización, desarme y reinserción de los grupos armados ilegales a la vida civil.

El gobierno colombiano solicitó apoyo de la OEA en el marco de su política de paz mediante la cual se abren las puertas para una negociación con los grupos armados ilegales “que deseen retornar a la vida democrática del país, previa condición de decretar un ‘cese de hostilidades’, con el único fin de lograr una disminución de la violencia y asegurar el respeto de los derechos humanos en todo el territorio nacional”, considera el acuerdo.

Por su parte el Representante Permanente de Colombia ante la OEA, Horacio Serpa, describió al Consejo Permanente la situación de violencia que por varias décadas vive su país e invitó a los estados miembros a la comprensión. Afirmó que “sólo la comunidad internacional puede tener la capacidad y autoridad para dar a Colombia la ayuda para lograr la paz”.

Añadió Serpa que la presencia de la OEA no constituye “una cortina de humo” para tapar crímenes; al contrario, dijo, el papel de la OEA va permitir una observación permanente e imparcial del proceso de paz. En este sentido dijo que el gobierno colombiano está dispuesto a considerar cualquier cuestionamiento y aceptar la resolución que sea aprobada por el Consejo Permanente el próximo viernes 6.

Referencia: C-015/04