CONVERSATORIO SOBRE JUSTICIA AMBIENTAL EN EL MARCO DE LA 51 ASAMBLEA GENERAL DE LA OEA

9 de noviembre de 2021 - Washington, DC

Nuestro hemisferio necesita justicia en el tema ambiental, necesita justicia y aplicación del derecho, necesita la enforceability del derecho en el tema ambiental.

En el tema ambiental no puede ganar la retórica, la retórica es permanente y existe la retórica del cambio climático, existe la retórica de la preservación de la biodiversidad y existe la retórica para los contaminantes orgánicos persistentes, pero tenemos que pasar a la acción y la acción implica aplicar el derecho.

El derecho es el camino más corto a la acción y es el camino que nuestras sociedades mejor aceptan, nuestras sociedades democráticas, porque implica que también existe la justicia en nuestra sociedad en materia ambiental.

La existencia de justicia en materia ambiental hará que nuestras sociedades no sean fracasadas desde el punto de vista ambiental. Siempre citamos una frase de José Antonio Marina que dice que las sociedades fracasadas son las sociedades injustas. Desde el punto de vista ambiental para que nuestras sociedades no sean fracasadas tienen que ser justas y esto implica la aplicación de la justicia.

Y esto implica la obligatoriedad, el sentido obligatorio de la norma ambiental, ya sea nacional, ya sea internacional. La norma internacional ambiental, sea la convención de cambio climático, sea la convención de biodiversidad, sea la convención de contaminantes orgánicos persistentes, o la convención del mercurio. No son entelequias abstractas, son derecho aplicable, son derecho muy cercano a nosotros y son derecho que nos garantiza el paso a asegurar que nuestras sociedades van a ser sustentables, que nuestro planeta va ser sustentable, que nuestros países y que nuestras comunidades van a ser sustentables.

En este contexto quiero felicitar a Ricardo Lorenzetti por su libro de Justicia y Derecho Ambiental en las Américas, que para nosotros es un documento de referencia absoluta, no solo porque recopila lo más importante del Derecho Interamericano, sino porque sistematiza la visión de un juez de la Corte Suprema sobre cómo el derecho se hace aplicable, cómo el derecho debe de estar cercano a la gente y cómo la gente debe acceder a la justicia ambiental.

Esto implica conocer el medio ambiente, saber lo que significa el medio ambiente para nosotros en cada una de sus variables y cómo el medio ambiente nos afecta a todos, afecta nuestra vida hasta en los elementos que parecen más lejanos. Afecta nuestra vida en el punto de vista productivo y sicológico, también desde el punto de vista del desarrollo social, así cómo en el agua que tomamos y en los alimentos que comemos. También afecta nuestra vida en las temperaturas que sentimos y cómo esas temperaturas terminan afectando a toda nuestras sociedades.

Y también termina afectando nuestros países, por eso la reciente decisión de Antigua y Barbuda de llevar el caso de las obligaciones de cambio climático a la Corte Internacional de Justicia es un paso que deber ser considerado por los Embajadores de Buena Voluntad de la OEA. Debemos plantearnos cómo podemos aportar y cómo podemos trabajar juntos para acercar derecho para que la Corte Internacional de Justicia también tenga ese sentido de obligatoriedad y de aplicabilidad del derecho y de las convenciones internacionales de medio ambiente, que no solo se quede en la retórica, porque es derecho aplicable en todos los casos.

Implica también trabajar en las condiciones de gobernabilidad de nuestro países, cómo el paradigma ambiental tiene que ser una referencia fundamental a la hora de crear derecho en nuestros países y a la hora de generar gobernabilidad en nuestros países. Y que cuando los gobiernos ejecutan acciones, estas deben estar completamente impregnadas de la normativa ambiental y de la obligatoriedad y de los valores que impone la normativa ambiental.

El derecho ambiental en las Américas ha tenido un desarrollo, tenemos convenciones importantes, tenemos esos vínculos fuertes con las convenciones del sistema de Naciones Unidas, tenemos en las Américas la conciencia del bien jurídico ambiental, como bien señala en su libro, el juez Lorenzetti,
Tenemos que trabajar para lograr esa legitimación permanente en los esquemas de aplicación de la justicia
Agradezco mucho la oportunidad y agradezco mucho la preservación de estos derechos fundamentales que hacen a los derechos de la gente.

Si decimos más derecho para más gente en las Américas, también decimos que es vital lograr la protección de estos derechos humanos fundamentales que tienen que ver con el medio ambiente.

Muchas gracias.