Excelentísimo Embajador Rodolfo Hugo Gil, Representante Permanente de la República Argentina ante la OEA, Presidente del Consejo Permanente
Excelentísimo Embajador Luis Guardia Mora, a cargo de la Misión Permanente de la República de Costa Rica ante la OEA
Excelentísimo Señor Secretario General, José Miguel Insulza
Señores Representantes Permanentes de los Estados Miembros y Estados Observadores ante la OEA
Señoras y Señores

Tengo el honor de presentarles los resultados de la reciente Misión de Observación Electoral enviada por el Señor Secretario General a Costa Rica por motivo de la celebración del Referéndum sobre el Tratado de Libre Comercio entre la República Dominicana, Centro América y Estados Unidos que tuvo lugar el día 7 de octubre de 2007. Cabe resaltar que este Referéndum fue el primero en la historia democrática de este país, y la primera ocasión en que la OEA fue invitada a enviar una Misión de Observación a Costa Rica. Es preciso mencionar también que en esta oportunidad, la Misión se benefició de la presencia del Secretario General, quien estuvo en Costa Rica del 5 al 8 de octubre y acompañó las diferentes tareas de observación de la OEA en el país.
Esta Misión responde a la solicitud realizada por el distinguido Gobierno de la República de Costa Rica, al igual que mandatos dados por los Estados miembros de la Organización. Entre éstos se encuentran el Acuerdo Relativo a los Privilegios e Inmunidades de los Observadores firmado el día 28 de septiembre de 2007 en Washington, DC y el Acuerdo sobre Procedimientos para la Observación Electoral firmado entre el Jefe de Misión, es decir, mi persona, y el Presidente del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Dr. Luis Antonio Sobrado en San José, Costa Rica.
Este Acuerdo le garantizó a la Misión pleno acceso a las autoridades y oficinas electorales así como a los centros de votación y cualquier información necesaria sobre la organización y la administración del proceso electoral. En este sentido, la Misión se realizó con plena independencia y libertad con el fin de ejercer las funciones establecidas.
En seguimiento a la solicitud tanto del Gobierno de la República de Costa Rica, como del TSE, la Organización envió del 4 al 7 de septiembre de 2007, una misión exploratoria, también a mi cargo, con el objetivo de sostener reuniones de coordinación con los cuerpos electorales y otras autoridades para la realización de la MOE.
El objetivo consistió en obtener insumos sobre el contexto político-electoral, y concretar un plan de trabajo para establecer la Misión en el país.
La Misión se estableció en el país a partir del 1ro de octubre y buscó generar un proceso de diálogo con los principales actores políticos del país, los grupos abanderados del “SI” y del “NO”, el TSE, los partidos políticos, la cooperación internacional y los diversos sectores del gobierno costarricense, con el fin de cumplir con los siguientes objetivos. En primer lugar, colaborar con las autoridades gubernamentales, electorales, y con la ciudadanía costarricense en general, para el desarrollo de un proceso íntegro, transparente y confiable. Segundo, a partir de la interacción con los actores políticos del país, facilitar el logro de consensos entre los diferentes participantes de la consulta popular, al igual que expresar y promover el apoyo de la comunidad internacional a favor del proceso. Finalmente, formular recomendaciones con el fin de contribuir al perfeccionamiento del sistema electoral costarricense al igual que recoger mejores prácticas y lecciones aprendidas para compartir con los demás países miembros.
A través de las entrevistas realizadas con representantes de diversos sectores de la sociedad costarricense, se pudo constatar la ecuanimidad e integridad del Tribunal Supremo de Elecciones de Costa Rica, y principalmente, el profundo espíritu democrático de los costarricenses.
En general, el ambiente durante la etapa pre-comicial fue tranquilo aunque existió preocupación sobre un escenario post-electoral con resultados muy estrechos. En este sentido, la Misión de la OEA buscó contribuir para generar un ambiente de confianza durante la jornada del 7 de octubre.
El día del Referéndum, un grupo de más de 80 observadores de la OEA, de 23 países miembros de la OEA, Europa y Asia, monitorearon la jornada desde la apertura de las Juntas Receptoras de Votos hasta el final del escrutinio sin reportar mayores inconvenientes.
La Misión también tomó nota de la importante presencia de los fiscales representando el “SI” y el “NO” en los centros de votación. Estos mantuvieron una presencia constante en más del 50% de las Juntas Receptoras de Votos tanto durante la apertura, como en el desarrollo y cierre de la jornada electoral.
Un elemento también observado fue la presencia de proselitismo electoral alrededor de algunos centros de votación (en un 40% de las juntas observadas por la OEA hubo proselitismo electoral). Sin embargo, no se reportaron confrontaciones que pudieran afectar la tranquilidad del proceso de consulta.
En términos generales, el referéndum se llevó a cabo en su mayoría en un ambiente de tranquilidad, tolerancia y respeto. No obstante, algunos hechos aislados que podrían ser tomados en cuenta en futuros procesos electorales, como son:
En primer lugar, diversos sectores manifestaron su descontento con la legislación del referéndum en lo pertinente al financiamiento de la actividad política, y el acceso equitativo a los medios de comunicación.
En segundo lugar, algunos sectores consideraron que las manifestaciones de apoyo o rechazo al TLC por parte de actores externos al proceso y al país, atentaron contra la integridad del proceso de consulta.
Se resalta, sin embargo, la vocación democrática de la ciudadanía que acudió a emitir su voto de manera pacífica y en total apego a las prácticas y valores democráticos, aceptando sin mayores cuestionamientos los resultados del proceso. Vale mencionar que aún cuando el porcentaje de participación electoral bajó por 5.96 puntos porcentuales en comparación con la elección presidencial de 2006 (en el cual la participación electoral fue de 65.20%), el porcentaje exigido por la legislación (40%) para hacer vinculante el Referéndum se cumplió, e incluso se superó ampliamente, ya que la participación electoral reportada ascendió a 59.24%. Esto, sin duda, muestra el profundo compromiso con la democracia de los costarricenses, y el valor que otorgan a la oportunidad de ejercer sus derechos políticos.
Es así como de acuerdo a los resultados emitidos por el Tribunal Supremo de Elecciones, el “SI” ganó con un 51.6% de los votos y tal como habían anticipado las encuestas, el resultado final fue muy estrecho.
Finalmente, vale la pena reconocer las contribuciones hechas por los Gobiernos de Canadá, EEUU y Corea, además de todos los países que acreditarán observadores internacionales para la Misión (Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Corea, Colombia, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, España, Francia, Guatemala, Holanda, Honduras, Italia, Japón, México, Panamá, Paraguay, Perú, Suiza, y Venezuela).
Reiteramos nuestra felicitación a los actores costarricenses por llevar a cabo un proceso de consulta de manera libre y democrática, y agradecemos la receptividad y acogida que dieron a la Misión de Observación Electoral de la OEA en Costa Rica.
Muchas gracias.