Un poco de historia
El primer cable telegráfico submarino internacional
fue instalado en Europa en 1850 uniendo Inglaterra y Francia, mientras
que el primer cable telefónico trasatlántico fue instalado en el año
1956 y era capaz de transmitir 36 canales telefónicos analógicos
simultáneos.
Después de 30 años de cables submarinos coaxiales,
los años 80 trajeron dos cambios radicales, la transmisión digital y
la fibra óptica lo que permitió transmitir digitalmente sobre un medio
de gran ancho de banda, con alta calidad y confiabilidad.
Los años 90 trajeron dos nuevos avances para los
enlaces submarinos de fibra óptica, el amplificador óptico y la
multiplexión en longitud de onda densa (DWDM) que permiten amplificar
la luz y enviar por una misma fibra óptica varias señales de alta
velocidad en diferentes “colores” (longitudes de onda) de la luz en
forma simultánea.
La amplificación óptica y el adecuado manejo de los
efectos degradantes de la fibra óptica que deformaban los pulsos de
información permitieron eliminar la necesidad de regeneradores
electrónicos, mejorando la confiabilidad y permitiendo cambios en las
velocidades de transmisión sin cambiar las características de los
repetidores submarinos que son de alto costo.
La introducción de las nuevas tecnologías hizo
abaratar los costos de una forma dramática, interesando a cada vez más
actores a participar en nuevos proyectos, ya que a mediados de los
noventa el retorno de la inversión era muy rápido. Es así que se
verificó la disminución del costo del circuito de voz por año desde
US$ 40.000. en el TAT-1 en 1956, a US$ 20. en el TAT-12 en 1995.
Estos últimos avances permitieron hacer crecer la
capacidad ofrecida en forma explosiva, satisfaciendo con creces el
extraordinario aumento de la transmisión de datos debido al
advenimiento de la Internet e introduciendo una positiva sinergia
entre oferta y demanda. Por ejemplo, la capacidad ofrecida entre los
años 1988 a 1998 se multiplicó por 64.
En la actualidad, existen instalados en el mundo un
millón de kilómetros de cable submarino, bastante para rodear el globo
30 veces, formando una red de enlaces de fibra óptica que llevan
grandes volúmenes de tráfico entre los continentes.
Se ha demostrado la factibilidad real de sistemas
transoceánicos que operan a 10 Gbit/s con 32 longitudes de onda, lo
que significa una capacidad de 320 Gbit/s por fibra, suficiente para
transmitir más de 15 millones de circuitos de voz simultáneos en un
cable submarino típico de cuatro pares de fibras ópticas.
La explosión del mercado internacional de las redes
de cable submarino se produjo en la década de 1990 a 2000, e
incluyeron una gran actividad a través del Océano Pacífico. Las
razones que provocaron la tremenda y urgente necesidad del aumento en
la conectividad transpacífica provino del tráfico de Internet que
creció a tasas del 100% en esos años, mucho más del 10% anual de
crecimiento telefónico. Se agregó a esto el aumento del tráfico anual
de las intranets debido a la globalización de los negocios, que
incluye video conferencia, transmisión de datos en tiempo real y
aplicaciones multimediales (imágenes de video, imágenes gráficas en
colores y sonido de alta fidelidad).
Un ejemplo del volumen del negocio lo representa el
proyecto China-USA de 950 millones de dólares que consiste de un
anillo auto-protegido de 30.000 Km. y que une China, Japón y Korea con
USA contando con 9 puntos en tierra y una derivación a Uam y que puede
llegar a una capacidad global en torno a 1,5 Terabits/s.
(1.500.000.000.000 de símbolos binarios por segundo).
El excesivo optimismo sobre el crecimiento de
Internet y la integración de muchos nuevos actores en los proyectos
llevó inexorablemente a que el mercado de los sistemas de fibra óptica
submarina se comenzara a contraer bruscamente después de varios años
de excesiva inversión (28 billones de dólares hasta el año 2002 a
nivel mundial) dejando como inversiones factibles en el corto plazo
principalmente los up-grades de los sistemas ya instalados.
¿Qué es una Red submarina de fibra óptica?
Una red submarina de fibra óptica está compuesta de
enlaces realizados con cables de fibra óptica formando anillos que
permiten unir ciudades dentro de un continente y con otras ubicadas en
otros continentes. Normalmente la conectividad global mundial se
consigue a través de la interconexión de anillos de menor envergadura.
Un enlace submarino de fibra óptica se compone de
dos grandes partes: La Planta seca en tierra y la Planta húmeda o bajo
el mar.
La Planta húmeda está compuesta por los elementos
que se encuentran bajo el mar y que son principalmente el cable que
transportan las señales luminosas de información de una estación a
otra, los repetidores que permiten amplificar la señal luminosa a
medida que se desgasta y las unidades de derivación, que posibilitan
integrar estaciones secundarias a la troncal sin arriesgar la
confiabilidad del sistema.
En la Red Seca se encuentran los componentes que
permiten transmitir, recibir y controlar las comunicaciones que se
envían a través de los segmentos de enlaces submarinos. Estos
componentes son el Equipo terminal de línea para transmitir y recibir
la información, el equipo de generador de potencia para alimentar con
corriente eléctrica a los repetidores, el cable terrestre para unir la
Estación de tierra con el Cable submarino y el Cable de tierra que
permite cerrar el circuito eléctrico a través del mar.
Para instalar los cables submarinos bajo el mar, se
realiza primero un levantamiento topográfico del fondo marino que
permita elegir la ruta del cable más adecuada que evite las fosas,
montañas y otras dificultades que imponen el medio ambiente en que
será instalado, por ejemplo faenas de pesca, anclas y ataque de peces.
En zonas en las cuales sea necesario, el cable puede ser enterrado y/o
fijado para evitar movimientos que pudiesen afectar su integridad
física.
¿Cómo se consigue la gran confiabilidad de las
redes submarinas de fibra óptica?
Dado que hoy en día existe una gran conectividad
mundial a través de cables submarinos formando anillos, las redes
submarinas de fibra óptica cuentan normalmente con protecciones en
caso de falla de equipos o corte de un cable; sin embargo debido a la
gran cantidad de información que transportan se hace vital restablecer
lo antes posible el equipo o cable dañado, dado que mientras no haya
sido solucionada la falla el sistema permanecerá sin respaldo,
produciéndose una crisis de proporciones en caso de producirse una
nueva falla en otro lugar del anillo.
Para cumplir con el propósito anterior las
estaciones de cable submarino se conectan utilizando un anillo de
“trabajo” y uno de “respaldo”, En caso normal, sin falla, el tráfico
prioritario es llevado por el anillo de trabajo, mientras que por el
anillo de protección se lleva tráfico de baja prioridad. En caso de
falla, existirá una conmutación de segmento (sólo entre dos estaciones
y por falla de equipos), o conmutación de anillo, que implica una
re-configuración total del anillo en forma de “banana” (cuando se
trata de un corte de cable). Cuando se realiza una conmutación que
utiliza el anillo de protección, el tráfico no prioritario se pierde.
La tecnología de anillos aprovecha además lo
explicado antes en el sentido que es posible enviar por una misma
fibra óptica varias señales de alta velocidad en diferentes “colores”
de la luz en forma simultánea, por lo que si se usan 16 “colores” y
considerando que se disponen de 4 pares de fibras, se podrán construir
un total de 64 anillos independientes. (Posteriormente esa cantidad
podría ser ampliada agregando nuevos “colores” o sea nuevas longitudes
de onda).
Gracias a la cantidad de anillos disponibles, la
flexibilidad y confiabilidad del sistema crece enormemente,
facilitando además el mantenimiento preventivo y correctivo.
En las redes de submarinas de fibra óptica
normalmente existe un centro remoto de operación que tiene por función
supervisar la red las 24 horas del día y los 365 días del año. Todo
tipo de actividad de mantenimiento correctivo, debe contar con la
autorización y dirección del Centro de operación de red de manera que
nada sea hecho sin un adecuado registro y supervisión.
Las comunicaciones de servicio (mantenimiento)
entre los computadores de las diferentes estaciones de cable
submarino, se realizan a través de canales de transmisión de datos
mediante routers bajo protocolo TCP-IP. Dichos canales de datos se
envían dentro de la misma señal de alta velocidad que sale por el
terminal de línea respectivo.
Es interesante destacar que para fines de
mantenimiento preventivo y correctivo es necesario realizar mediciones
y enviar órdenes a los repetidores que están bajo el mar. Esto se
realiza variando levemente (sobre-modulando) la señal luminosa de
acuerdo a la señal de datos de baja velocidad que contiene los
mensajes enviados o recibidos hacia o desde los repetidores.
Para la rápida localización de un punto de corte
del cable se utiliza un instrumento (reflectómetro óptico coherente)
que envía pulsos de luz y mide el tiempo de retorno de dichos pulsos
al reflejarse en el corte, presentando errores que pueden ser tan
bajos como un 0,1% y un alcance de hasta 15.000 kilómetros.
En algunos casos se producen fallas eléctricas de
aislación en el cable submarino y no pueden usarse métodos de
reflectometría óptica como el explicado antes; en ese caso existen
métodos eléctricos de localización, pero dado que dependen de muchos
parámetros variables y particulares de cada enlace pueden presentar un
error tan grande como 1%.
Importancia de las redes submarinas de fibra
óptica.
Quizá la mayor importancia de las redes de cable
submarino de fibras ópticas sea la reducción del costo de las
comunicaciones de larga distancia que se deriva de las siguientes
causas principales:
- La extraordinaria capacidad que presenta la
tecnología permite abaratar los costos por circuito.
- La gran oferta de capacidad ofrecida en la
actualidad debido a las cuantiosas inversiones realizadas.
- La existencia de alta competencia entre las
empresas explotadoras de las redes de cable submarino.
La importancia global de las redes submarinas de
fibra óptica es que permiten crear, junto a las redes terrestres de
fibra óptica una poderosa columna vertebral que enruta las señales de
telecomunicación a través de todo el planeta sin que se produzcan
cuellos de botella ni degradación de la calidad de la transmisión.
(Como sucedía con las comunicaciones punto a punto vía satélite
anteriormente). En este sentido cabe destacar:
- Todas las señales de larga distancia
intercontinentales y en muchos caso regionales y cualquiera sea su
origen, (teléfono fijo o celular, datos de Internet, datos privados,
etc). desembocan ineludiblemente en la columna vertebral que forman
las redes submarinas y terrestres de fibra óptica.
- Dada la estructura en base de anillos
auto-curables de las redes submarinas de fibra óptica, siempre
existirá un camino para que la información llegue a su destino y con
alta calidad.
Las redes submarinas de fibra óptica trabajan en
forma silenciosa y eficiente, asegurando una disponibilidad altísima e
inmediata y, protegidas por un medio que no presenta cambios que
afecten su integridad. Es labor de las administraciones de
telecomunicaciones comprender y explotar a cabalidad las enormes
potencialidades que presentan en lo técnico y económico.
Miguel Angel De La Sotta Cerbino
Ingeniero - Master en ciencias
Información adicional: CITEL/OEA y el Centro de
Excelencia de la UIT ofrecerán 50 becas de la matrícula para el
curso a distancia de Redes Submarinas de fibra óptica que tendrá
lugar del 1 al 26 de agosto de 2005 a través de la Universidad
Diego Portales de Chile, Nodo del Centro de Excencia de la UIT
(US$ 200= US$ 100 (CITEL) + US$ 100 (UIT)). El Sr. De la Sotta
será el tutor principal de este curso. Por más información, por
favor vea la página de la CITEL o envíe un email a: [email protected].
La fecha límite de presentación para las becas en Washington es el
22 de julio de 2005. Se recuerda que los interesados tienen la opción de realizar el
curso pagando la matrícula de registro de US$200.
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