Página precedente Indice Página siguiente

1.6 Características del equipamiento y de los servicios sociales

1.6.1 Vivienda
1.6.2 Agua potable y alcantarillado
1.6.3 Educación
1.6.4 Salud

En la Región se presentan graves deficiencias de carácter social que tienen relación con una inadecuada distribución del ingreso, alto subempleo, marcadas diferencias entre las condiciones de vida urbanas y rurales que crean un amplio proceso migratorio, una estructura social poco flexible y una baja cobertura de los servicios sociales.

Las viviendas que deberían mejorarse son 34 524 y el déficit cuantitativo es de 35 884; de estas viviendas, 30 424 son rurales. La población servida con agua potable alcanza sólo a un 40 por ciento, y en el medio rural baja al 20 por ciento. El problema de analfabetismo de la población de más de diez años alcanza al 41 por ciento.

CUADRO 1-22
FERIAS DE PRODUCTOS AGROPECUARIOS EN LA SUBREGION ANDINA

Lugar

Productos principales

Frecuencia

No. de comerciantes

Tulcán

papa y varios

diario

20

J. Andrade

papa

semanal

15

Huaca

papa

semanal

10

San Gabriel

varios

semanal y diario

20

El Angel

varios

semanal

15

Ibarra

agrícola y varios

diario

250

Otavalo

agropecuaria, varios, artes

semanal

250

Atuntaqui

agropecuaria y varios

semanal

a/

Pimampiro

agrícola y maderas

semanal

a/

Ibarra

ganado

semanal

a/

Cotacachi

agrícola y varios

semanal

a/

Quiroga

agrícola y varios

semanal

a/

a/ No se obtuvo la información.
Fuente: Encuesta Regional INERHI.

CUADRO 1-23
INSTALACIONES DE ALMACENAMIENTO DE GRANOS EN LA REGION I (toneladas)

Provincia

ENAC

Piladoras y Molinos

Total

Silos

Bodega

Silos

Bodegas

Carchi

2 636

455

2 273

2 636

3 546

Imbabura

*

900

227

1 127

Esmeraldas

2 500

1 500


2 500

1 573

Total

5 136

2 855

2 500

5 136

6 246

* Corresponde a bodegas.
Fuente: ENAC, Programa Cooperativo FAO/Banco Mundial.

La situación general se agrava en las áreas rurales, donde vive el 67 por ciento de la población de la Región I. En la población campesina existe un gran sector que se encuentra prácticamente marginado de la comunidad ecuatoriana especialmente ciertos grupos étnicos. Las causas de esta marginalidad también están relacionadas con la escasez y dificultad de acceso a la tierra de muchos campesinos que tienen muy bajos salarios, deficiencias alimenticias, de salud y vivienda, alto grado de analfabetismo e inadecuada organización de la comunidad rural.

La situación del sector rural ha repercutido en la composición de la estructura social urbana por el acelerado proceso migratorio rural-urbano; esto ha ido generando un importante sector de artesanos y operarios dedicados principalmente a actividades manuales, donde se encuentran grupos sociales en proceso de permanente acumulación y otros pauperizados con niveles de vida infrahumana. También se ha incrementado el grupo de comerciantes y trabajadores de servicios ocasionales, producto de la incapacidad del sistema urbano para dar empleo a toda la población económicamente activa que entra al mercado del trabajo. Finalmente están los sectores medios y altos, que representan un 15 por ciento de la población urbana, y que están constituidos por los profesionales y altos empleados del sector público y privado.

Si bien es necesario ampliar la cobertura de los servicios sociales, como educación, vivienda y salud, será necesario incrementar con mayor esfuerzo la acción del Estado en las áreas rurales a fin de mejorar las condiciones de vida y poder controlar en algún grado el proceso migratorio rural-urbano, integrar a la población marginada a la comunidad para tener una mayor participación social y política, generar un poder de compra para sostener el desarrollo industrial del país, y modernizar el medio rural.

Por otra parte, la diversidad y heterogeneidad de la organización campesina constituye una traba al desarrollo social al generar conflictos de competencia y poder dentro de la comunidad.

1.6.1 Vivienda

i. Déficit de vivienda

El déficit de la vivienda se ha considerado bajo diversos criterios; el déficit cualitativo; el déficit cuantitativo; el déficit por hacinamiento y el déficit por la calidad física.

a. Déficit cualitativo

Se refiere a aquellas viviendas que son susceptibles de mejoras, o sea las viviendas denominadas semipermanentes; éstas suman 34 524 a nivel regional, mientras que por provincia figuran Carchi con 11 131; Imbabura con 22 024, y Esmeraldas con 1 369.

b. Déficit cuantitativo

Las viviendas con déficit cuantitativo son aquellas que es necesario reemplazar y que están clasificadas como desechables (ver cuadro 1-24).

CUADRO 1-24
DEFICIT CUANTITATIVO DE VIVIENDA


Total

Urbano

Rural

Región I

35 884

5 460

30 424

Carchi

4 187

168

4 019

Imbabura

7 358

41

7 317

Esmeraldas

24 339

5 251

19 088

c. Déficit por hacinamiento

El hacinamiento es un factor de mucha importancia que es necesario tener presente; se denomina hacinamiento a los casos siguientes: la ocupación por cuatro o más personas para las viviendas que tienen un solo cuarto; la ocupación por siete o más personas para viviendas que tienen dos cuartos, y la ocupación por diez o más personas para viviendas que tienen tres cuartos. La condición de hacinamiento se puede observar en el cuadro 1-25 y allí cabe destacar que de acuerdo con la clasificación realizada, la provincia de Imbabura presenta el más alto nivel absoluto de hacinamiento en la Región, y a ella le sigue la provincia de Esmeraldas, aunque son mucho más graves en la provincia de Carchi, con un 43 por ciento sobre el total de las viviendas.

CUADRO 1-25
INDICADORES DE HACINAMIENTO EN VIVIENDAS

Provincia

Total de Viviendas

Viviendas con hacinamiento

Porcentaje

Carchi

22 918

9 873

43.0

Imbabura

43 853

17 415

39.7

Esmeraldas

33 893

11 159

32.9

Total Región I

100 664

38 447

38.2

País

1 193 940

384 143

32.1

Fuente: Segundo Censo de Viviendas, 1974.
Elaboración: INERHI-OEA.

Es importante precisar en qué proporción la calidad física de las viviendas muestra condiciones por debajo de un estándar aceptable. La conclusión a que se ha arribado indica que hay 45 834 viviendas particulares ocupadas y que pueden calificarse como deficitarias bajo el concepto de calidad física de la construcción. Las deficiencias de servicios aparecen en el cuadro 1-26.

1.6.2 Agua potable y alcantarillado

i. Extensión y cobertura actual del abastecimiento

De acuerdo con el censo de vivienda de 1974, el 41 por ciento de la población de la Región dispone de servicios de agua potable de redes públicas, y el 20 por ciento está conectada al sistema de alcantarillado. Se considera con servicios de alcantarillado a aquellas viviendas que están conectadas a algún sistema de alcantarillado público, y con servicio de agua potable se ha considerado a la población que tiene acceso a grifos públicos.

Los sistemas de alcantarillado en la Región son casi todos del tipo combinado, o sea que sirven tanto para conducir excretas como agua de lluvia. Los afluentes vierten en cauces naturales sin ningún tipo de tratamiento. El agua potable en los centros poblados mayores se consume en su mayoría a través de las conexiones domiciliarias. En los centros poblados pequeños, un elevado porcentaje se consume a través de grifos públicos.

ii. Fuentes de abastecimiento

La gran mayoría de los servicios de agua potable captan de fuentes superficiales y en especial de vertientes. Sólo en la provincia de Esmeraldas se usa el agua subterránea como fuente principal.

El tratamiento del agua consiste fundamentalmente en aireación y cloración.

Debido al tipo de fuentes utilizadas no son necesarios los tratamientos de floculación y sedimentación.

Las fuentes utilizadas por las principales ciudades de la Región son las siguientes: Esmeraldas se abastece de 17 pozos ubicados en las islas Guerrero y Propicia. Cuando se completen los trabajos de conexión a la red, que se están ejecutando, se dispondrá de una dotación de 280 l/hab/día. El sistema tiene varias deficiencias en la captación, por lo que ya se han realizado estudios para su mejoramiento.

CUADRO 1-26
DEFICIENCIAS DE SERVICIOS DE AGUA POTABLE, ALCANTARILLADO Y ELECTRICIDAD

Tipo de deficiencia

Lugar

Porcentaje

Lugar

Porcentaje

Lugar

Porcentaje

Lugar

Porcentaje

Lugar

Porcentaje

PROVINCIA DEL CARCHI

C. Tulcán

C. Espejo

C. Montúfar

Total provincia



Total de viviendas

9 531

100.0

5 082

100.0

8 305

100.0

22 918

100.0



Con abastecimiento de agua desde ríos o acequias

1 024

107

2 535

49.8

3 420

41.1

6 979

30.4



Sin ningún sistema de eliminación de aguas servidas

4 516

47.3

3 454

67.9

6 020

72.4

13 900

61.0



Sin servicio eléctrico

5 042

52.9

4 410

86.7

6 032

73.0

15 534

67.0



PROVINCIA DE IMBABURA

C. Ibarra

C. A. Ante

C. Cotacachi

C. Otavalo

Total provincia

Total de viviendas

21 519

100.0

4 648

100.0

6 055

100.0

11 631

100.0

43 853

100.0

Con abastecimiento de agua desde ríos o acequias

5 509

25.6

917

19.7

2 171

35.8

3 647

31.3

12 244

27.9

Sin ningún sistema de eliminación de aguas servidas

13 656

63.4

3 475

74.7

5 337

88.1

9 211

79.1

31 679

72.2

Sin servicio eléctrico

12 257

56.9

2 091

44.9

4 825

79.6

8 566

73.6

27 739

63.2

PROVINCIA DE ESMERALDAS

C. Esmeraldas

C. E. Alfaro

C. Muisne

C. Quinindé

Total provincia

Total de viviendas

16 649

100.0

7 494

100.0

2 545

100.0

7 205

100.0

33 893

100.0

Con abastecimiento de agua desde ríos o acequias

5 850

35. 1

4 316

57.6

1 171

49.9

4 436

61.5

15 873

46.8

Sin ningún sistema de eliminación de aguas servidas

9 313

55.9

6 515

86.9

2 384

93.6

6 026

83.6

24 238

71,5

Sin servicio eléctrico

10 000

60.0

6 617

88.3

2 328

91.4

6 660

92.4

25 605

75.5

REGION I Y PAIS

Región I

País







Total viviendas

100 664

100.01

1 193 940

100.0







Con abastecimiento de agua desde ríos o acequias

35 096

34.8

272 747

22.8







Sin ningún sistema de aliminación de aguas servidas

45 669

45.3

739 630

61.9







Sin servicio eléctrico

68 878

68.4

701 781

58.7







Fuente: Segundo Censo Nacional de Vivienda, 1974.
Elaboración: INERHI-OEA.

Ibarra se abastece desde varias vertientes, de las cuales la más antigua es la Yuyococha, que proporciona 90 l/s, y además es la más cercana a la ciudad. El caudal total captado es de 198 l/s.

Tulcán hace uso de las vertientes de Aguas Calientes y Moledores. El máximo caudal captado es de 169 l/s y asegura una dotación de 160 l/hab/día.

Otavalo se surte de la vertiente Magdalena, ubicada en el curso superior de la cuenca del río Tejar. Capta 160 l/s,, con lo que asegura una dotación de 200 l/ha/día.

Según un estudio del IEOS, la dotación media y aproximada para las ciudades de más de 10 000 habitantes es de 150 a 250 l/hab/día, mientras que para las ciudades menores es de 70 a 100 l/hab/día.

iii. Organización de los servidos

Los servicios están organizados como empresas mixtas formadas por el IEOS y el respectivo Municipio, pero en la práctica la mayor parte de la Región está servida directamente por el IEOS. Sólo está organizada y funcionando la empresa de Esmeraldas e Ibarra.

La empresa de agua potable (EMAPA) sirve a Ibarra y a las parroquias de San Antonio, Ambuquí, Pablo Arenas, La Carolina, Cahuasquí, Chugá, Pimampiro, San Blas, Salinas y Tumbabiro.

En los poblados de menos de mil habitantes (límite que define la población rural para los efectos de las estadísticas sanitarias) las obras de agua potable y letrinas son proyectadas y ejecutadas por el Programa de Saneamiento Rural del IEOS.

1.6.3 Educación

i. Nivel de instrucción

Los resultados del III Censo de Población (1974), sobre el nivel de instrucción de la Región I presentan una situación desfavorable con respecto a la situación nacional, en especial si se tiene en cuenta a la población de 6 años y más sin ninguna instrucción: dicha población alcanza al 31.3 por ciento en la Región, frente al 26.2 por ciento a nivel nacional.

Igualmente son bajos los porcentajes de población que recibieron educación secundaria y superior. La provincia del Carchi muestra los índices más favorables registrando los más bajos porcentajes de población sin ninguna instrucción, los más altos de población con instrucción primaria y altos porcentajes de población con instrucción secundaria, especialmente en el cantón Tulcán. Este último supera el promedio nacional en todos los indicadores salvo en educación superior.

En la provincia de Imbabura, el cantón Otavalo muestra los indicadores más desfavorables de la Región. Son especialmente graves los porcentajes de población sin ninguna instrucción (55.7 por ciento) y los porcentajes de población con instrucción primaria, que son sensiblemente inferiores a los promedios regionales y nacionales.

En las cifras correspondientes a la población con instrucción secundaria es evidente el impacto del equipamiento educacional localizado en las ciudades de Tulcán, Ibarra y Esmeraldas.

ii. Grado de escolarización

A fin de establecer el grado de escolaridad, fue necesario realizar una estimación de la población en edad escolar al año 1976 en base a los datos del censo de 1974. La información se puede observar en el cuadro 1-27. De él se desprende que existe un déficit de matrícula tanto a nivel primario como secundario.

Aunque ligeramente inferiores a nivel nacional, los coeficientes podrían considerarse satisfactorios, a nivel primario, a excepción de los cantones Otavalo y Cotacachi en la provincia de Imbabura, que presentan coeficientes muy bajos, al igual que los cantones Eloy Alfaro y Muisne, de la provincia de Esmeraldas.

La situación difiere a nivel secundario presentando disparidades muy notorias en la Región, que varían desde un 53.4 por ciento en el cantón Tulcán a un 8.8 por ciento en Eloy Alfaro.

La relación alumno-profesor presenta diversas características a nivel urbano y rural: en el área rural se observa que un profesor debe atender varios cursos simultáneamente, lo cual va en detrimento del nivel educativo.

iii. Tasas de analfabetismo

El analfabetismo dentro de la Región es bastante alto y presenta situaciones muy heterogéneas. Si se considera por ejemplo a la población de más de 10 años, el 41.3 por ciento es analfabeta. El mayor volumen de analfabetismo existe en el área rural en general y en los cantones de Cotacachi y Otavalo en particular, pues en ellos se localiza gran parte de la población indígena. El cantón Eloy Alfaro presenta también niveles altos de analfabetismo, y el cantón Tulcán tiene niveles bastante favorables. A nivel parroquial los niveles de analfabetismo pueden observarse en el mapa 1-10.

MAPA 1-10. NIVELES DE ANALFABETISMO (Censo 1974)

iv. Conclusiones

Los indicadores expuestos reflejan una situación bastante dispar respecto a la situación educacional, tanto entre las provincias de la Región como entre áreas urbanas y rurales. Los centros urbanos muestran una situación menos grave, y señalan una brecha entre el acceso a la educación en los sectores rurales y los urbanos. A este hecho está asociado necesariamente el problema de accesibilidad física a los centros donde se localiza el equipamiento y el bajo nivel de ingreso de la población rural, cuyas manifestaciones más visibles son el retiro prematuro de los niños del colegio para su ocupación en actividades agrícolas, los niveles de salubridad y nutrición deficientes, y el ausentismo escolar.

1.6.4 Salud

El análisis del sector salud constituye uno de los aspectos centrales dentro del diagnóstico socio - económico de una región, pues guarda íntima relación con el nivel de ingresos, con la accesibilidad a los centros asistenciales y con la nutrición y otros aspectos inherentes al nivel de vida de la población.

CUADRO 1-27
COEFICIENTE DE ESCOLARIZACION

Región, provincias y cantones

Población 6 a 12 años

Alumnos matriculados Primaria

Coeficiente de escolarización

Población 13 a 19 años

Alumnos matriculados Secundaria

Coeficiente escolarización

PROVINCIA DEL CARCHI

25 693

24 682

96.1

18 657

8 188

43.9

Cantón Tulcán

11 213

10 206

91.0

8 366

4 466

53.4


Espejo

5 451

5 006

95.5

3 827

1 492

39.0


Montúfar

9 029

8 794

97.4

6 464

2 230

34.5

PROVINCIA DE IMBABURA

48 314

37 463

77.5

29 067

12 232

42.1

Cantón Ibarra

22 130

20 901

94.4

16 920

7 648

45.2


Antonio Ante

4 254

3 952

92.0

3 207

1 542

48,1


Cotacachi

7 844

4 518

57,6

3 555

466

13.1


Otavalo

14 086

8 092

57.4

8 074

2 576

31.9

PROVINCIA DE ESMERALDAS

48 902

47 262

96.6

34 062

10 711

31.4

Cantón Esmeraldas

24 384

25 932

106.3

18 224

9 107

50.0


Eloy Alfaro

9 780

77 672

78.4

6 651

584

8.8


Muisne

3 915

3 042

77.7

2 254

203

9,0


Quinindé

10 827

10 616

98.0

6 933

817

11.8

Total de la cuenca

122 909

109 407

89.0

81 786

31 131

38.6

Total del país

1 407 077

1 338 119

95.0

1 098 679

431 315

39.2

* Incluye a matriculados de más de 12 años.

Fuente: Departamento de Investigación y Estadística del Ministerio de Educación - Años 1976-1977.

Elaboración: Convenio INERHI - OEA:

i. Situación de la salud

a. Mortalidad general

En 1976, las tasas de mortalidad general para Carchi fue de 7.89 por mil habitantes, para Imbabura de 13.94 y para Esmeraldas de 6.51; en el mismo año la mortalidad general para todo el país fue de 8.3.

Como puede observarse, Imbabura presenta la tasa más alta de la región e indudablemente una de las más altas del país, pero es preciso indicar que en los últimos años se observa una disminución bastante notable de las tasas de mortalidad general, tanto en Imbabura como en el resto del país.

Las enfermedades de enteritis y otras enfermedades diarréicas en Carchi ocupan el primer lugar, con una tasa de 122.92 por 100 000 habitantes; luego, en orden descendente siguen bronquitis, enfisema y asma, otras enfermedades del corazón y también otras neumonías.

En Imbabura los sistemas y estados morbosos mal definidos ocupan el primer lugar, con una tasa de 249.50 por 100 000 habitantes; luego siguen la enteritis y otras enfermedades diarréicas; senilidad sin mención de psicosis y bronquitis, enfisema y asma, etc.

En Esmeraldas las enfermedades de enteritis y otras enfermedades diarréicas ocupan el primer lugar, con una tasa de 134.2 por 100 000 habitantes, y luego siguen los síntomas y estados morbosos mal definidos, sarampión y tétanos.

La situación antes descrita indica que existe una baja cobertura de los servicios de salud y una gran proporción de causas de muerte (especialmente las diarréicas, tetamos, bronquitis) puede ser reducida en acciones de prevención de la salud y mejoramiento de la infraestructura de saneamiento ambiental y de servicios de salud.

b. Mortalidad infantil

La mortalidad de menores de un año en 1976 fue de 72.07 por mil nacidos vivos en todo el país. En las provincias de la Región las tasas son sensiblemente más altas: así, en Carchi fue de 84.13, en Imbabura 104.99 y en Esmeraldas 70.42.

c. Mortalidad materna

La mortalidad materna para las provincias de la Región I para el año 1976 fue: para Carchi 2.16, Imbabura 1.83 y Esmeraldas 1.54 por mil nacidos vivos. En dicho año la tasa para el país fue de 2.09.

ii. Factores condicionantes

El individuo que más se ve afectado por las enfermedades se caracteriza por tener un índice de mortalidad general muy alto. Se caracteriza además por su mala nutrición, falta de desarrollo ponderal y también por su falta de desarrollo intelectual.

La nutrición, el medio ambiente y la cultura son factores que tienen estrecha relación con el nivel de salud de la población. Es necesario mencionar que Esmeraldas tiene caracteres con una patología tropical, en muchos casos exclusiva de esa zona, y que tiene además la mayor incidencia de malaria del país, la cual se halla en fase de ataque. Igualmente en Esmeraldas existe en forma prevaleciente el pian y la leisbaniosis cutánea. En esta provincia la desnutrición, unida a la parasitosis y la malaria, producen cuadros de anemia tropical y plurecarenciales: Kwashiorkor.

iii. Personal médico y paramédico

La relación de los recursos humanos de salud con respecto a la población fue muy inferior en la Región I que la existente en el país. Sin embargo la relación recursos humanos-habitantes del país está muy por debajo de lo recomendado en el plan decenal de salud de las Américas. Esmeraldas es la provincia que presenta un déficit mayor: cuenta con 1.37 médicos por 10 000 habitantes; 0.15 odontólogos, 0.05 obstétricos, 0.51 enfermeras. La situación de las otras provincias es ligeramente mejor.

Si se compara el número de médicos especialistas en pediatría (los que atienden a la población de edad más susceptible), y en obstetricia en relación con la población específica, la situación es todavía peor: Carchi no cuenta con especialistas en otras materias, y lo que es peor aún, a pesar de la escasez de recursos, éstos son subutilizados: el rendimiento de la hora médica en Carchi e Imbabura es 2 y Esmeraldas 4: es decir que en una hora atienden 2 ó 4 pacientes.

iv. Servicios

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en 1973, los promedios de concentración poblacional por los servicios de salud según las consultas realizadas fue de 19.8 por ciento para Carchi, 30.1 por ciento para Imbabura y 32.9 por ciento para Esmeraldas. Esta cobertura fue realizada en la siguiente forma:


Carchi

Imbabura

Esmeraldas

Servicios con hospitalización

4

5

7

Número de camas

117

306

206

Tasa por 1 000 habitantes

1.38

1.36

1.05

Servicios sin hospitalización




Centros de salud

1

3

1

Subcentros de salud

4

5

3

Puestos de salud

4

21

7

Dispensarios

2

3

2

Todas las camas hospitalarias están concentradas en la zona urbana. A nivel rural se encuentran sólo los subcentros y puestos mínimos de salud.

El porcentaje de ocupación de las camas hospitalarias es de 37.9 por ciento en Carchi, con un promedio de días de estancia de 8.9 y con rendimiento por cama de 15. En Imbabura hay índices mejores: porcentaje de ocupación 56.5; promedio de días de estancia 7.5 y rendimiento por cama de 27. Esmeraldas tiene mejores índices: porcentaje de ocupación 57.4; promedio de días de estancia 6.4 y rendimiento por cama de 32 (ver cuadro 1-28).

CUADRO 1-28
ESTABLECIMIENTOS HOSPITALARIOS DE LA REGION I (1973)

Clase de establecimiento

Lugar donde funciona

Entidad a la que pertenece

No. de camas

Días cama

Porcentaje de ocupación

Rendimiento de camas

PROVINCIA DEL CARCHI







Total



173

63 145

37.9

15


Tulcán







Hospital Luis G. Dávila

Tulcán

Minist. de Salud

97

35 405

43.1

19

Sanatorio Juan Tanca Marengo

Tulcán

LEA

20

7 300

54.2

1


San Gabriel

S. Gabriel

Minist. de Salud

56

20 440

23.1

15

PROVINCIA DE IMBABURA







Total



293

106 945

56.5

27


Ibarra







Hospital San Vicente de Paul

Ibarra

Minist. de Salud

176

64 240

51.4

24


Atuntaqui







Clínica del Seguro

Atuntaqui

Seguro Social

40

14 600

72.3

31


Cotacachi







Hospital Centro de Salud

Cotacachi

Minist. de Salud

9

3 285

20.4

22


Otavalo







Hospital San Luis

Otavalo

Minist. de Salud

68

24 820

65.5

35

PROVINCIA DE ESMERALDAS







Total



191

69 715

57.4

32


Esmeraldas







Clínica del Seguro

Esmeraldas

Seguro Social

30

10 950

52.9

26

Hospital Delfina T. de Concha

Esmeraldas

Minist. de Salud

56

20 440

91.3

59


Eloy Alfaro Valdez (Limones)







Hospital Civil

Limones

Minist. de Salud

19

6 935

26.3

15

Hospital Divina Providencia

San Lorenzo

Misional

38

13 870

54.0

21


Muísne







Hospital Civil

Muísne

Minist. de Salud

27

91 855

14.1

11


Quinindé







Hospital Civil

Quinindé

Minist. de Salud

21

7 665

63.7

34

v. Limitantes

Dentro de los limitantes que afronta el sector, se destaca lo siguiente:

- Falta de recursos humanos (médico y paramédico).
- Falta de infraestructura de servicio (hospitales, centros y subcentros, etc.).
- Baja cobertura en los servicios de salud.

Es necesario que la región cuente con mayor porcentaje de personal médico y paramédico a fin de que pueda atender la demanda de la población, aunque también es importante que se incremente la infraestructura existente, o sea hospitales, centros y subcentros de salud, en especial estos últimos para el área rural, en la cual se encuentra el mayor número de enfermedades.

1.7 Asentamientos humanos

1.7.1 Características físicas
1.7.2 Subsistemas de asentamientos humanos
1.7.3 Jerarquización de los centros poblados

1.7.1 Características físicas

Las actividades agropecuaria y forestal han sido y son la base económica fundamental de la actividad económica regional, lo que hace que exista un predominio de la población dispersa y una débil estructuración del sistema urbano.

La ocupación del territorio en la región es heterogénea; así, mientras en encuentran niveles altos de densidad poblacional donde prácticamente casi todo el territorio habitable está ocupado, en la costa en cambio se halla la presencia de niveles bajos de densidad y con espacios relativamente vacíos.

Prácticamente no existe conexión entre la costa y la sierra y la poca que hay se hace a través de Quito, ya que la infraestructura vial está orientada hacia esta ciudad. Unicamente el ferrocarril Ibarra - San Lorenzo liga a las dos regiones permitiendo un reducido flujo de bienes y personas.

Las vinculaciones físicas directas entre las subregiones ha estado fuertemente influida por la orografía que presenta la Región, pues la existencia de la cordillera occidental ha sido un límite físico muy importante. 1

1/ Un mayor detalle de estos aspectos se encuentra en la publicación No. 28 "Asentamientos humanos" del Plan de desarrollo de la Región I, INERHI-CONADE-OEA, 1979.

1.7.2 Subsistemas de asentamientos humanos

De acuerdo con las características bipolar del país, existen dos sistemas de asentamientos humanos; uno tiene como centro a la ciudad de Quito y el otro a la ciudad de Guayaquil. Los asentamientos humanos de la Región I forman parta del sistema nacional de Quito.

En la Región existen tres grandes subsistemas claramente definidos, y a su vez definen una serie de microsistemas que gravitan dentro del área de influencia del centro mayor, aunque es de hacer notar que existen algunos microsistemas aislados.

Los tres grandes subsistemas son el de Esmeraldas, el de Ibarra y el de Tulcán.

La localización de los subsistemas y microsistemas se presenta en el mapa 1-11.

MAPA 1-11. ASENTAMIENTOS HUMANOS (Subsistemas y Microsistemas)

1.7.3 Jerarquización de los centros poblados

Los centros poblados en la sierra muestran un sistema urbano más equilibrado, en especial en la provincia de Imbabura; en cambio, en la provincia de Esmeraldas se observa una marcada primacía de la ciudad de Esmeraldas, que agrupa alrededor de un 30 por ciento de la población total. De acuerdo con una jerarquización a nivel de rango de tamaño se han establecido siete niveles según se aprecia en el cuadro 1-29.

CUADRO 1-29
JERARQUIZACION DE LOS CENTROS POBLADOS

Nivel

Habitantes

Centros

I

31 000 - 70 000

2

II

10 200 - 30 000

4

III

5 001 - 10 100

3

IV

2 600 - 5 000

6

V

1 500 - 2 500

10

VI

510 - 1 400

18

VII

150 - 500

54

Fuente: III Censo de Población 1974.
Elaboración: JUNAPLA.

1.8 Estructura social

1.8.1 Estructura social rural
1.8.2 Estructura social urbana

Los procesos de expansión y transformación económica experimentados en las últimas décadas han modificado. de manera sustancial la fisonomía de la sociedad ecuatoriana, tanto en el aparato productivo como en la estructura social, y estos cambios, aunque con menor intensidad, también han repercutido en la Región. 1

1/ Un mayor detalle de estos aspectos se encuentra en la publicación No. 26 "Diagnóstico Social" del Plan de desarrollo de la Región I, INERHI-CONADE-OEA, 1979.

1.8.1 Estructura social rural

Las actividades productivas más importantes de la Región son la agropecuaria y la forestal, pero la estructura económica dificulta una adecuada caracterización de los grupos sociales, por cuanto un porcentaje considerable participa en varias posiciones ocupacionales: tal es el caso de los campesinos minifundistas que ocasionalmente actúan como asalariados agrícolas.

Los cambios que se producen en las relaciones sociales de producción a nivel de la gran propiedad constituye la variable que permite explicar y comprender las características, modificaciones y tendencias de cambio que se hallan presentes en la estructura social de la Región.

En los últimos años el país ha vivido un proceso de transformación en la estructura agraria, y esta situación ha dado como resultado la siguiente estructura social a nivel de agro:

i. Los grandes propietarios

Este sector social está constituido por los propietarios de unidades de producción con una extensión mayor de 100 hectáreas. A nivel regional constituyen el sector hegemónico y dominante dentro de la estructura social rural y con mucha incidencia a nivel político en la estructura social general.

La base de sustentación del poder es que bajo la propiedad de este grupo está la mayor cantidad de tierra aprovechable. Así, en 1974 el 2.7 por ciento de las unidades de producción agropecuaria absorbía el 47.5 por ciento de la tierra agrícola, lo que significaba una extensión de 424 000 hectáreas.

Dentro del proceso de modernización de la actividad agropecuaria, este factor social atraviesa por un período de transformaciones cualitativas en cuanto a su naturaleza como clase. Tal cambio tiene relación con el proceso de autotransformación del latifundista tradicional, que obtenía mano de obra y productos semigratuitos como empresario moderno. Por lo tanto en la estructura social de este sector se pueden distinguir dos grupos: los "modernizantes" y los "tradicionales". Los "modernizantes" son aquellos que buscan la eficiencia empresarial y se muestran más receptivos a los estímulos técnicos y económicos, y es además el que se beneficia con las políticas estatales: inversiones en infraestructura, crédito, asesoramiento técnico, libre importación de maquinaria, etc., mientras que los "tradicionales" son los que mantienen prácticas atrasadas de producción.

ii. Los medianos propietarios

No existen criterios para definirlos explícitamente, aunque se ha considerado que podrían ser los dueños de propiedades cuya extensión se encuentra entre 10 y 100 hectáreas.

De acuerdo con el tipo de cultivo, localización geográfica. calidad y tamaño de la unidad, se establecen distintos niveles de acumulación y de diferenciación social dentro de este sector. Su comportamiento se asemeja al grupo social superior en el caso de aquellos con más capacidad de acumulación y al inferior en el caso de los grupos más pobres.

iii. El pequeño agricultor

Su desarrollo se halla limitado por el tipo de cultivo, actividad productiva y tipo de tecnología que se usa en las unidades productivas con o sin capacidad de demandar fuerza de trabajo asalariada.

iv. Asalariados

Como consecuencia del proceso de modernización a nivel de la grande y mediana propiedad, se observa el crecimiento cuantitativo de los asalariados agrícolas y concomitantemente la de su importancia en la estructura productiva social regional. En 1974, el 40.4 por ciento, que corresponde a 32 059 personas de la PEA ocupada en agricultura se hallaba catalogada como asalariado. Esto indica un considerable incremento desde el año 1962, en que el porcentaje de asalariados en labores agrícolas era del 36.4 por ciento, lo que significa 27 606 personas.

Dentro de los asalariados agrícolas se incluye a los campesinos sin tierra, y se debe destacar que el empleo rural tiene como característica el de dar únicamente ocupación temporal a buena parte de los asalariados; entre los problemas principales se cuenta desocupación, subempleo y bajo nivel de remuneración.

v. El propietario minifundista

En lo que a su número respecta, constituye el sector social más importante dentro de la estructura social rural. Es usual identificar al minifundista como campesino pobre y propietario de menos de 5 hectáreas.

En 1974 estas unidades representaban el 60 por ciento del número total regional y tienen bajo su propiedad únicamente el 5 por ciento de la superficie.

El reducido tamaño de estas propiedades, unidas al deterioro constante de sus recursos productivos, a la imposibilidad de su ampliación derivada de sus escasas posibilidades de acumulación, y al crecimiento del número de miembros familiares en número y edad obliga constantemente a la búsqueda de ingresos complementarios para su subsistencia mediante la venta parcial y ocasional de la fuerza de trabajo familiar.

De esta manera el propietario minifundista, que constituye el estrato más deteriorado en sus condiciones productivas y sociales de vida, "aporta" a la constitución del asalariado agrícola en las dos formas: aquellos que sólo pueden subsistir vendiendo su fuerza de trabajo (principalmente hijos en edad productiva), y los que complementan la producción insuficiente de sus parcelas con el salario.

Las condiciones socioeconómicas de existencia de este sector social son las más precarias, situación que les ha obligado a emigrar.

1.8.2 Estructura social urbana

El proceso de "modernización" operado en el agro no ha llevado consigo un mejoramiento de las condiciones de vida de la mayor parte de la población y ha ocasionado entre otros factores un proceso migratorio amplio.

A pesar de que resulta difícil establecer una caracterización de la estructura social urbana, se tratará de realizar una puntualización de los principales grupos humanos que se encuentran en la Región I.

Se ha tomado como referencia a la población ocupada por rama de actividad según el censo de 1974; el área urbana abarca varios grupos principales de ocupación.

i. Artesanos y operarios

Este grupo absorbe al mayor número de trabajadores de la población económicamente activa del área urbana (22.2 por ciento); son sujetos dedicados a labores manuales, que en la provincia de Imbabura concentra el mayor porcentaje de artesanos (29.5 por ciento), especialmente indígenas otavaleños que se dedican a labores artesanales esencialmente dentro del ramo textil.

Este sector social no es homogéneo, lo que indica una diferenciación en la que se encuentran desde sujetos que están en un proceso de permanente acumulación hasta aquéllos que se mantienen pauperizados y con niveles de ingreso infrahumanos. Es importante conocer toda la gama de individuos que incluye este sector social para cualquier tipo de programas que se desee implementar.

ii. Comerciantes y trabajadores de servidos ocasionales

Uno de los grupos que mayor ritmo de crecimiento tienen es el que se encuentra inserto en actividades comerciales (13 por ciento) y en la de Servicios Personales (12.1 por ciento). Esto se comprende porque la estructura urbana está incapacitada de generar empleo productivo a gran parte de la población que se encuentra en esta área. De manera especial se ubican en actividades tales como dependientes de comercio y vendedores ambulantes.

El principal problema que afronta este sector social, que se conoce como marginal, es el de la inseguridad económica crónica. La imposibilidad de encontrar un empleo estable con niveles de remuneración aceptables convierten a este grupo en "población sobrante" que no encaja en el sector moderno de la economía, por lo que se ve como una carga y como un problema socio-político real y/o potencial. Por otro lado constituyen fuerza de trabajo barata que se halla disponible para servicios tradicionales o para períodos de expansión de la economía en que su presencia se hace necesaria.

iii. Sectores medios y altos

En la Región de estudio este grupo compone un 15 por ciento de la población urbana y está comprendido por profesionales técnicos y afines (9.3 por ciento) y por empleados de oficina y afines (5.6 por ciento) que dependen de la administración pública y/o de la empresa privada. Dado que este grupo requiere de preparación universitaria o de capacitación especial, la educación secundaria y superior se ha convertido en uno de sus principales canales de ascenso social. Debido a que no toda la población tiene posibilidades de obtener este tipo de preparación, en este caso la educación se ha convertido en un elemento más de diferenciación social.

Los gerentes, administradores y funcionarios encargados de tareas directivas en el sector público y/o privado son relativamente pocos a nivel del conjunto (1 por ciento); sin embargo, poseen bastante poder económico y político como para materializar obras de infraestructura que llevarán a desarrollar ciertas actividades empresariales.

A medida que la industrialización disminuye en la Región, por cuanto la concentración de la actividad industrial se localiza fundamentalmente en Quito y Guayaquil, el sector de la burguesía Se hace también muy pequeño; más bien es el comercial el que mayor poder económico y político tiene en la Región, poder que lo comparte con los empresarios agrícolas.

iv. La condición étnica y los valores culturales

Una aspecto que tiene importancia dentro de los estudios sociales es el que tiene relación con la condición étnica y los valores culturales de los sujetos sociales que actúan en la Región.

En la Región I existen diversos grupos étnicos, y entre ellos se destaca la población de color que se localiza fundamentalmente en la provincia de Esmeraldas y en la zona del Chota, en la provincia del Carchi, quienes se caracterizan por mantener formas culturales propias, la danza y la música, por ejemplo. La mayor parte de la población se dedica a la actividad agropecuaria, fundamentalmente en Esmeraldas, donde hay plantaciones de palma africana; un porcentaje considerable se dedica a las actividades forestales y otro a la pesca.

Otro grupo muy característico es el indígena, tanto de la sierra como de la costa. Es preciso recalcar que el grupo denominado Cayapas mantiene en la costa su propia forma de vida, tradición y cultura, aunque es preciso indicar que este grupo prácticamente se está extinguiendo. En cuando a los indígenas de la sierra, se localizan fundamentalmente en la provincia de Imbabura, y entre ellos se destacan los otavaleños, cuyas actividades centrales son la artesanía y el comercio; por supuesto que las artesanías otavaleñas se encuentran en el mercado nacional, y en un porcentaje muy alto se las exporta. Un número considerable también se dedica a la agricultura; la organización básica de los indígenas es la comuna, donde mantienen sus tradiciones y sobre todo hablan el idioma quechua. También existen comunidades indígenas, pero en menor medida en el Carchi.

Es necesario indicar que los grupos étnicos anteriormente anotados responden también a la estructura social general de la Región, aunque la mayor parte de los mismos pertenece a los grupos artesanos, asalariados y campesinos pobres minifundistas y a pequeños comerciantes. En resumen, la estructura social de la Región se caracteriza por ser muy rígida; de ahí que el proceso de movilidad social sea muy lento.

Página precedente Inicěo de página Página siguiente