Contexto


MISION DE OBSERVACION ELECTORAL DE LA OEA
PRESENTA INFORME PRELIMINAR DE
LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES EN EL PERU

  6 de junio de 2006

El Jefe de la Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) presenta su informe preliminar de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales llevadas a cabo en el Perú el 4 de junio de 2006.

La Misión de la OEA desplegó 123 observadores a lo largo del territorio peruano. De acuerdo a los informes recibidos de los observadores que cumplieron sus labores en 17 Departamentos del país, la Misión ha podido constatar que la segunda vuelta de las elecciones presidenciales se desarrolló en un marco de calma, orden y transparencia.

Las autoridades electorales del Perú han demostrado su compromiso de garantizar un proceso electoral seguro y confiable. La Misión de la OEA considera que estas elecciones exitosas han contribuido a legitimar las reformas electorales que se pusieron en práctica desde la elección del 2001 y han creado una oportunidad para consolidar este avance, como una plataforma para construir un sistema político más inclusivo.

La Misión de la OEA felicita a ambos candidatos, al ganador señor Alan García Pérez por su victoria, y al señor Ollanta Humala Tasso por su desempeño en el proceso electoral y por su aceptación de los resultados. Si bien es cierto que el ganador ha triunfado de manera convincente, el nuevo Presidente tendrá también la oportunidad de tender puentes para superar las divisiones que se manifestaron durante estas elecciones. La Misión alienta al señor Ollanta Humala a que utilice el compromiso de sus simpatizantes para desarrollar una oposición constructiva en beneficio de todos los peruanos.

Es oportuno destacar el compromiso cívico de los miembros de mesa y de los personeros de los partidos políticos a lo largo de la jornada electoral, así como la labor cumplida por los organismos de observación nacional y los delegados de la Defensoría del Pueblo. La participación de todos ellos ha contribuido a la credibilidad de estos comicios.

La Misión expresa igualmente su reconocimiento a la ciudadanía por su significativa participación en la jornada electoral, la misma que superó el 90%.




La Organización Electoral

El papel de las autoridades en el período postelectoral será fundamental y por tanto la Misión las insta a continuar cumpliendo sus funciones en estrecha coordinación. Las mejoras alcanzadas en la planificación fueron especialmente notorias con respecto a una mayor seguridad, en particular en los locales de votación en donde sufragaron los candidatos. Una vez concluida esta etapa electoral, la Misión espera que se considere la inclusión de medidas para lograr una mejor coordinación entre las autoridades electorales.

El día de la elección se constató que los miembros de las mesas estaban mejor capacitados en comparación con la primera vuelta. No se presentaron casos de violencia o intimidación durante el día de la elección y en la mayoría de las mesas de votación observadas hubo presencia de los personeros de ambos partidos políticos.

El nuevo gobierno tiene la oportunidad de construir sobre las reformas existentes con el fin de enfrentar las desigualdades entre los electores rurales y los urbanos, con respecto al acceso a las mesas de votación, al derecho a ejercer el sufragio y a los obstáculos que dificultan dicho acceso (por ejemplo la información, el transporte, la educación). El compromiso del nuevo gobierno de ampliar la inclusión debiera enfocar sus esfuerzos en superar esta importante brecha social, lo cual merece el apoyo de la OEA y de toda la comunidad internacional. Los temas de registro, documentación e identidad legal son de crucial importancia. El nuevo gobierno podría considerar la implementación de métodos tales como las mesas de voto anticipado, las de transeúntes y las móviles con el fin de facilitar el ejercicio del voto.

En esta segunda vuelta electoral, la transmisión de los resultados preliminares contribuyó significativamente a crear confianza y aceptación de los candidatos, de las autoridades gubernamentales y de la población en general. Ambos candidatos actuaron adecuadamente mientras se iban dando los resultados no oficiales. Sin embargo, antes de que se dieran los resultados oficiales, ambos candidatos se dirigieron públicamente a sus seguidores.

Denuncias y Reclamos

La Misión atendió denuncias relacionadas con distintas fases del proceso electoral, las cuales fueron trasladadas oportunamente a las correspondientes autoridades para su atención.

Temas como el financiamiento de las campañas, el papel de los medios de comunicación, las encuestas y los sondeos de opinión, así como las declaraciones de los funcionarios públicos en el proceso electoral deben generar una debida reflexión para logar en el futuro un mejor cumplimiento de acuerdo a la ley de partidos políticos vigente.



En las primeras horas del día de la elección, los candidatos y sus familiares hicieron declaraciones públicas a los medios de comunicación. Esto generó una controversia innecesaria en relación con el cumplimiento de la ley electoral, respecto al período de silencio. La Misión tomó nota de los reclamos públicos acerca de estas acciones, las cuales, por haberse convertido en práctica habitual, debieran ser consideradas prontamente por las autoridades competentes.

La Misión de la OEA recibió durante el curso de su observación una serie de inquietudes respecto a la democracia en el Perú y al proceso electoral en particular, de un amplio espectro de la sociedad peruana. Entre ellas merece destacarse la relacionada con las declaraciones y expresiones emitidas por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, que fueron interpretadas como una interferencia en los asuntos internos del Perú y que generaron una reacción negativa por parte de los dos candidatos presidenciales, los partidos políticos que ellos representan, los sectores de sociedad civil, los funcionarios gubernamentales y los medios de comunicación. El gobierno peruano presentó un reclamo ante la Asamblea General de la OEA, el 5 de junio del 2006, resaltando su convicción de que estas acciones representaban una interferencia en el proceso electoral peruano.

El ambiente postelectoral

Durante el día de la elección, se observó un ambiente pacifico y tranquilo, a excepción de los hechos violentos ocurridos en la ciudad de Arequipa una vez concluido el proceso de votación. La Misión expresa su rechazo a estos actos de intolerancia y exhorta a los militantes y simpatizantes de los partidos políticos a que privilegien el respeto y la tolerancia en esta etapa postelectoral con el fin de crear oportunidades de diálogo y de cooperación.

En vista de las divisiones que se han puesto de manifiesto en el país durante estas elecciones y considerando las próximas elecciones municipales y regionales, la Misión confía en que se reanudará el diálogo con la participación
de los diferentes sectores de país, los partidos políticos y las distintas instituciones nacionales.

La Misión de la OEA agradece a las instituciones electorales, a las autoridades gubernamentales, a la sociedad civil, a los partidos políticos y a los medios de prensa por el apoyo y la receptividad recibida que hizo posible realizar nuestras tareas sin limitación alguna.



Contacto: Carlos Flores Ledesma (9573-4332)

Referencia: MOE-PE-05