Comunicado de Prensa


La Misión Conjunta OEA/CARICOM en Haití hace un balance de sus tres meses de actividades

  19 de noviembre de 2010

La Misión de Observación Electoral Conjunta (MOEC) de largo plazo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y de la Comunidad Caribeña (CARICOM) en Haití, dirigida por el Embajador Colin Granderson, está presente en el terreno desde el 3 de agosto de 2010. La Misión cuenta actualmente con 68 observadores desplegados en cada uno de los 10 departamentos y reforzará sus efectivos en los próximos días. La MOEC observó las diversas fases de la organización del proceso electoral: el proceso de registro, impugnación y validación de las candidaturas presidenciales; la atribución de los números para los nuevos partidos políticos que participarán en las elecciones presidenciales; el sorteo para la designación de los Miembros de los Burós de Votación (MBV) a partir de las personas nominadas por los partidos políticos; la actualización, la confección y la publicación de la lista electoral; los preparativos técnicos, administrativos y logísticos para el día de las elecciones; el desarrollo de las dos fases de la campaña electoral; y la capacitación de los capacitadores. La Misión acompañará el proceso hasta la publicación de los resultados oficiales de la primera y la segunda vuelta de las elecciones.

Desde su llegada, la MOEC se reunió con autoridades gubernamentales, autoridades electorales, candidatos presidenciales, candidatos al Senado y a la diputación, representantes de los partidos políticos (incluyendo a los partidos políticos que no participan en las elecciones), representantes de la sociedad civil, organizaciones de observación nacional y representantes de la comunidad internacional. Estas reuniones le permitieron tomar el pulso del contexto político-electoral y le permitieron identificar anticipadamente los potenciales factores de riesgo del proceso electoral en curso como es el déficit de credibilidad del CEP, los temores con respecto a las irregularidades y los fraudes que podrían impedir la expresión de la voluntad de los electores, y la aprensión general sobre el entorno en materia de seguridad de las elecciones.

La Misión ejerció un rol proactivo en la observación de las elecciones. Esto se tradujo a través de un flujo regular de comunicación con el Consejo Electoral Provisorio (CEP), quien demostró una buena disposición y apertura ante las sugerencias formuladas por la Misión en base a las observaciones y preocupaciones manifestadas por los partidos políticos en las reuniones con sus representantes. La Misión jugó igualmente un rol de buenos oficios para facilitar las reuniones entre el CEP, la Oficina Nacional de Identificación (ONI) y la sociedad civil.

La Misión transmitió tres mensajes que considera esenciales para el buen desarrollo del proceso durante sus reuniones con los partidos políticos y los candidatos presidenciales: i) el rol clave ejercido por los partidos políticos en los preparativos de las elecciones y en el funcionamiento de la jornada electoral a través de la designación de los miembros de los burós de votación y de los representantes de partidos políticos que protegerán sus intereses el día de la votación; ii) la importancia de la capacitación de estos actores y de la vigilancia combinada el día de las elecciones ejercida por los representantes de partidos políticos y los observadores nacionales e internacionales, la cual representa una medida preventiva contra eventuales tentativas de fraude; iii) la importancia de un buen conocimiento de la Ley Electoral, sobretodo en cuanto concierne la jornada electoral, con el objetivo de poder identificar la naturaleza del problema o del contencioso que puede surgir, y en consecuencia identificar la naturaleza de la respuesta más eficaz.

A diez días de las elecciones, la Misión reconoce los esfuerzos realizados por el Consejo Electoral Provisorio (CEP) para enfrentar los numerosos desafíos a los cuales se vio confrontado a nivel técnico, administrativo, político y humanitario. En efecto, el Consejo Electoral Provisorio (CEP) tiene como mandato la difícil tarea de organizar elecciones en un país en el cual la situación humanitaria y social se ha deteriorado como consecuencia del terremoto del 12 de enero de 2010, de la epidemia de cólera y del huracán Tomás. El CEP ha hecho esfuerzos para ajustarse a los desafíos de la realidad post-sismo y garantizar así el derecho de voto a todos los ciudadanos, incluyendo a los ciudadanos internamente desplazados. En este sentido, es importante subrayar los esfuerzos desplegados en los Centros de Operación de Verificación (COV) durante la actualización de la lista electoral.

El CEP, consciente de su imagen desacreditada, se dedicó a reivindicarla. En el plan técnico y administrativo se han hecho enormes esfuerzos a pesar de las debilidades institucionales para respetar los límites de tiempo de las fases más importantes del calendario electoral como es la publicación de la Lista Electoral Comunal (LEC), aún si el lanzamiento de la campaña de sensibilización y la publicación de la lista de Miembros del Buró de Votación (MBV) registraron un retraso. A nivel político el CEP intentó mejorar sus relaciones con los partidos políticos y los candidatos, a través de los esfuerzos de comunicación, de apertura y de transparencia. Las tres reuniones entre el CEP y los partidos políticos ofrecieron espacios de diálogo que permitieron a éstos últimos expresar sus dolencias de manera franca y abierta. La Misión considera que los progresos realizados en materia de comunicación entre los partidos políticos y el CEP; si bien están lejos de ser consolidados, representan un avance hacia la realización de elecciones el próximo 28 de noviembre.

La Misión notó con satisfacción que la dinámica electoral se consolidó a medida que el proceso avanzaba. La multiplicidad de actores implicados el día de la elección tendrá un rol clave. La MOEC hace un llamado a todos ellos a ejercer sus funciones con estricta neutralidad y en el marco de la Ley Electoral. En este sentido, la capacitación de los supervisores en curso será esencial para el buen desarrollo del proceso y la MOEC desea subrayar la importancia de contratar personal competente y experimentado para cumplir estas funciones de supervisión. La Misión recuerda también el rol responsable, imparcial y sereno que los Jueces de Paz jugarán al asumir sus responsabilidades al verbalizar los hechos en respuesta a las demandas de los representantes de candidatos y partidos políticos. Asimismo, la Policía Nacional Haitiana (PNH), en estrecha colaboración con la MINUSTAH, tendrá la tarea de garantizar la seguridad el día de la votación. Por último, la Misión recuerda nuevamente a los partidos políticos la importancia capital del trabajo de los Miembros de los Burós de Votación (MBV) así como de los representantes de los partidos políticos en la transparencia del proceso de votación y el escrutinio.

Los preparativos para las elecciones presidenciales y legislativas del 28 de noviembre están en buen camino. Sin embargo aún quedan desafíos por enfrentar. El impacto de la epidemia de cólera que suscita una creciente angustia es difícil de medir, sobretodo en cuanto concierne la participación electoral. Las aprensiones con respecto al entorno de la seguridad fueron exacerbadas por los recientes incidentes en Cabo Haitiano y Hinche. El CEP, blanco de ácidas críticas, debe realizar un recorrido sin faltas a pesar de que el desarrollo del día de la votación no dependa completamente de la responsabilidad del CEP. La formación otorgada a los Miembros de los Burós de Votación (MBV) determinará su dominio de los procedimientos y en consecuencia la calidad de su rendimiento. El CEP debe asimismo continuar con sus esfuerzos para tranquilizar a los actores políticos sobre la transparencia de la tabulación de los votos dado que ésta debe reflejar la voluntad de los electores. Las visitas de información al Centro de Tabulación de Votos (CTV) para los partidos políticos que se llevan a cabo actualmente y la presentación de un manual de operación son gestos importantes en este sentido. La distribución de las Cartas de Identificación Nacional (CIN) continuará sin duda hasta el último momento posible.

La Misión lanza un llamado a los ciudadanos a asistir a las urnas el 28 de noviembre próximo para ejercer su derecho ciudadano y su deber cívico que les permitirá elegir al nuevo Jefe de Estado y al Parlamento cuya tarea de importancia primordial será la de llevar a cabo la relocalización de los damnificados y la reconstrucción del país.

Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-447/10