Comunicado de Prensa


SE PRESENTA EN LA OEA INFORME DE LA CIDH SOBRE EL ACCESO A LA JUSTICIA DE MUJERES VICTIMAS DE VIOLENCIA

  8 de marzo de 2007

El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, presentó un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la situación que atraviesan mujeres en la región cuando son víctimas de violencia y acuden a los tribunales en busca de justicia.

El informe, titulado Acceso a la Justicia para las Mujeres Víctimas de Violencia en las Américas, expone “la brecha existente entre el reconocimiento formal y jurídico por parte de los Estados americanos de la violencia contra las mujeres, y la efectividad de las instancias judiciales de protección para remediar dichos actos”, explicó Insulza.

En el acto de presentación, el Secretario General destacó la importancia del trabajo realizado por la CIDH que documenta el problema de manera detallada y comparativa, después de una investigación que incluyó aportes de varios sectores de la sociedad: gobierno, administración de justicia, sociedad civil, sector académico y expertos en el tema.

El informe –que también formula conclusiones y recomendaciones a los Estados miembros- deja constancia que en muchas ocasiones las víctimas que intentan denunciar los hechos de violencia enfrentan discriminación y son maltratadas por funcionarios del Estado. Además destaca casos donde fiscales, policías y jueces descalifican a las víctimas y le restan credibilidad a sus declaraciones.

Subrayando éstos y otros aspectos del documento, Insulza reiteró que los países miembros deben crear las condiciones necesarias para que las mujeres puedan usar el sistema jurídico para lograr justicia ante los actos de violencia sufridos y recibir un trato digno por parte de los funcionarios al acudir a las distintas instancias judiciales.

“Es necesario que los Estados adopten medidas públicas para redefinir las concepciones tradicionales sobre el rol de las mujeres en la sociedad, y promover la erradicación de patrones socioculturales discriminatorios que impiden su acceso pleno a la justicia”, enfatizó Insulza. El Secretario General afirmó que la responsabilidad primordial de la OEA no es únicamente reafirmar los principios y valores esenciales de estas ciudadanas, “sino también avanzar en la realización práctica de estos valores comunes, a través de políticas públicas que tengan un resultado positivo y tangible para la gente”.

Durante el lanzamiento del informe, el Comisionado de la CIDH y Relator sobre los Derechos de la Mujer, Víctor Abramovich, dijo que el próximo paso más importante será lograr que las recomendaciones de las políticas públicas planteadas en este informe sean implementadas en los Estados, lo que consideró un esfuerzo que va requerir participación y diálogo entre la sociedad civil y las instancias estatales.

“Se trata de mejorar las políticas públicas de prevención de situaciones de violencia para lograr hacer efectivo el compromiso que los Estados asumieron al firmar la Convención de Belem do Pará. Esto es la existencia de un derecho de las mujeres a vivir libres de violencia”, afirmó Abramovich. El referido tratado para eliminar la violencia contra la mujer fue adoptado por los Estados de la región en 1994.
-
La adopción de medidas que pongan fin a esta situación es una de las recomendaciones presentadas a los países miembros. Estas incluyen el diseño de una política estatal integral y coordinada, respaldada con recursos públicos adecuados, para garantizar que las víctimas de violencia por género tengan un acceso pleno a una protección judicial, entre otras medidas. El estudio fue llevado a cabo durante los últimos dos años por la CIDH y la Relatoría sobre los Derechos de la Mujer, con el apoyo financiero del gobierno de Finlandia.

Finalmente, Insulza reiteró que es fundamental que en la consolidación de las democracias y el fortalecimiento de la gobernabilidad, así como la protección de los derechos humanos, el desarrollo integral más allá del crecimiento económico, se incorporen los principios de la inclusión y la equidad de género como base de la prosperidad. “Estoy convencido que el fomento de la igualdad de género es imprescindible para las democracias. La democracia sin mujeres es media democracia solamente”, apuntó el Secretario General.

En el evento también participaron la Consejera Principal para América Latina y el Caribe de la División Legal del Banco Mundial, Teresa Genta-Fons; y la representante de la División de los Derechos de las Mujeres de Human Rights Watch, Marianne Mollman.

Referencia: C-071/07