El Secretario General de la OEA, César
Gaviria, solicitó al Secretario General Adjunto, Embajador Luigi R. Einaudi, que lo
represente en la ceremonia de toma de posesión del nuevo Presidente de Haití, que
tendrá lugar el 7 de febrero de 2001. En cartas del 4 y 17 de enero el Presidente Préval
invitó al Secretario General a asistir y solicitó a la OEA que reanude sus actividades
para "ayudar a Haití acompañando sus esfuerzos encaminados a la consolidación de
las instituciones democráticas y el respeto de los derechos humanos".
El Embajador Einaudi aprovechará su
presencia en Haití para mantener las líneas de comunicación abiertas a todos los
interesados con el fin de determinar en qué medida se han satisfecho las condiciones para
que la OEA, junto con el Gobierno y otros sectores de la comunidad política y la sociedad
civil haitiana, continúe identificando opciones y recomendaciones tendientes a superar el
impasse político actual en el país.
El Secretario General Adjunto tendrá
también oportunidad de evaluar las posibilidades de poner en práctica otras medidas que
se juzguen adecuadas para seguir fortaleciendo la democracia en Haití, de conformidad con
la resolución CP/RES. 772, adoptada por el Consejo Permanente de la Organización en
agosto de 2000, y con los ocho compromisos asumidos en diciembre de 2000 por el Presidente
que entrará en funciones. Los ocho compromisos fueron posteriormente confirmados a la OEA
por el Primer Ministro Jacques Édouard Alexis, cuando se entrevistó con el Secretario
General Adjunto el 12 de enero de 2001 y en la declaración que formuló ante el Consejo
Permanente el 18 de enero de 2001 el Representante Interino de Haití ante la OEA.
El Secretario General reitera una vez más
que la representación política amplia, la plena participación de la ciudadanía y la
seguridad son elementos críticos para la estabilidad en Haití.